El Gobierno detiene a los tres presuntos sicarios que asesinaron a Lourdes Maldonado y reconstruye sus ¨²ltimos minutos con vida
Las autoridades federales han anunciado la captura de los gatilleros aunque no ha explicado qui¨¦n dio la orden para matarla de un balazo en la puerta de su casa
Los tres sicarios que asesinaron a balazos a la periodista Lourdes Maldonado a las puertas de su casa en Tijuana han sido detenidos la madrugada de este mi¨¦rcoles. El Gobierno de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha anunciado la captura durante la conferencia ma?anera, aunque todav¨ªa a m¨¢s de dos semanas de lo sucedido ninguna autoridad ha informado sobre qui¨¦n dio la orden de acribillarla ni por qu¨¦, tampoco una posible l¨ªnea de investigaci¨®n. Pese a las promesas de impunidad cero ante los casos de los ataques a la prensa en lo que va de a?o y la reconstrucci¨®n de los ¨²ltimos instantes de su homicidio, el caso de Lourdes Maldonado corre el mismo riesgo de quedar impune para los autores intelectuales, como ha sucedido con decenas de compa?eros asesinados.
Maldonado fue asesinada de un balazo en el rostro cuando regresaba a su casa el pasado 23 de enero alrededor de las 19.50. La reportera, que hac¨ªa tres a?os hab¨ªa acudido a una ma?anera de L¨®pez Obrador para advertirle de que tem¨ªa por su vida, estaba todav¨ªa en su cochecito rojo y ah¨ª fue asesinada antes de que le diera tiempo a apagarlo y bajarse del veh¨ªculo. Su muerte se produc¨ªa solo seis d¨ªas despu¨¦s de que el gremio de Tijuana se despidiera conmocionado por el asesinato de otro compa?ero, Margarito Mart¨ªnez, tambi¨¦n a las puertas de su casa. El esc¨¢ndalo de los dos cr¨ªmenes contra la prensa en la misma ciudad convirti¨® a Tijuana en el s¨ªmbolo de la violencia contra los periodistas y rescat¨® los peores a?os del terror contra el oficio.
La muerte de Maldonado apunt¨® directamente hacia un hombre, el exgobernador Jaime Bonilla, del mismo partido de L¨®pez Obrador. La periodista llevaba nueve a?os de batalla legal por un pleito laboral cuando trabaj¨® en una de sus empresas, Primer Sistema de Noticias (PSN). Lo hab¨ªa demandado por un despido injustificado y a ella se sumaron quejas por adeudos de sueldo y de otras prestaciones como impagos al seguro. La misma semana en la que fue asesinada, un fallo de la Junta de Conciliaci¨®n le dio la raz¨®n y orden¨® embargar los bienes de la firma, adem¨¢s de una indemnizaci¨®n. Maldonado ten¨ªa en ese momento la capacidad legal de revisar las cuentas y finanzas del canal de noticias.
Muchos de los compa?eros de Maldonado especulaban qui¨¦n hab¨ªa ordenado su muerte. La mayor¨ªa cuestionaban la versi¨®n m¨¢s obvia y que apuntaba al exgobernador. El mismo presidente L¨®pez Obrador apunt¨®: ¡°Hay que ver el m¨®vil, si hay vinculaci¨®n con la denuncia de tipo laboral, verlo con mucha responsabilidad, aunque sea redundante lo que planteo, qui¨¦nes fueron los autores intelectuales, materiales, no se puede en autom¨¢tico vincular una demanda de tipo laboral al crimen¡±. Pero las autoridades no han planteado ni aclarado otra posible hip¨®tesis. Hay alguna que sobrevuela en los corrillos de Tijuana: el crimen organizado con el fin de golpear a Bonilla.
La secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodr¨ªguez, y su subsecretario, Ricardo Mej¨ªa, han reconstruido este mi¨¦rcoles los ¨²ltimos momentos con vida de la periodista y c¨®mo los presuntos sicarios la acorralaron en su domicilio en la privada Chalco, del fraccionamiento Villa Los Pinos. La periodista, seg¨²n la versi¨®n oficial, fue asesinada de un solo balazo ¡°que le atraves¨® el rostro y fue mortal¡±, ha apuntado Mej¨ªa durante la conferencia de prensa ma?anera del presidente.
Mej¨ªa mostr¨® fotos de las c¨¢maras de seguridad de la calle para se?alar a un taxi que estuvo ¡°momentos previos¡± al homicidio y que ¡°ser¨ªa clave¡±. La c¨¢mara de fuera de su domicilio estaba desconectada, pero los vecinos aportaron otras donde se observaba el taxi dando vueltas por la cuadra. Las im¨¢genes ayudaron a identificar al conductor, al copiloto y a otro m¨¢s, que viajaba en la parte de atr¨¢s del veh¨ªculo. ¡°El carro estuvo dando vueltas de reconocimiento tratando de ubicar el momento preciso en el que ella arribara a su domicilio¡±, continu¨® el subsecretario.
A unos metros de la Privada Chalco estuvieron los presuntos asesinos estacionados, esperando desde al menos una hora antes. Incluso se bajaron del taxi y estuvieron caminando y merodeando a unos pasos de su vivienda. Para acceder a la calle de Maldonado hab¨ªa que activar un port¨®n met¨¢lico, los criminales esperaron tambi¨¦n a que ella lo abriera al llegar con su coche, por ah¨ª entr¨® caminando uno de ellos. Y a las 19.52, el taxi ya estaba estacionado lo m¨¢s cerca posible de la vivienda para esperar al gatillero y huir r¨¢pido por la avenida principal.
¡°No se ha logrado determinar el m¨®vil. Pero tenemos confianza en que a partir de las entrevistas a los detenidos se pueda determinar. Sigue la investigaci¨®n. Y seguramente en breve se lograr¨¢ esclarecer tambi¨¦n¡±, ha se?alado Mej¨ªa ante las preguntas de la prensa. Por su parte, la secretaria Rodr¨ªguez insisti¨® en que ¡°lo importante es que estamos cumpliendo con la instrucci¨®n del presidente de dar con los responsables y de no permitir la impunidad. Cero impunidad y cero corrupci¨®n¡±.
El caso de Maldonado, como no sucedi¨® con los de esa misma semana, el de Margarito Mart¨ªnez y Jos¨¦ Luis Gamboa, acribillado en Veracruz ¡ªadem¨¢s de otro que fue asesinado despu¨¦s, el 31 de enero en Michoac¨¢n, Roberto Toledo¡ª se convirti¨® desde el inicio en una cuesti¨®n federal. Los cuerpos de seguridad del Gobierno de L¨®pez Obrador, incluidos funcionarios federales de Seguridad, fiscal¨ªa, Guardia Nacional y la Marina, se desplazaron a Tijuana por ¨®rdenes expresas del presidente. La principal diferencia entre este homicidio contra la prensa y los dem¨¢s es que Maldonado se hab¨ªa presentado hace tres a?os frente a L¨®pez Obrador, levant¨® el micr¨®fono en una conferencia de prensa, y a pocos metros de ¨¦l, le rog¨® que le ayudaran porque sab¨ªa que la pod¨ªan matar.
El caso de Maldonado corre un riesgo similar al de otros compa?eros asesinados de quedar impune. Tal es el caso del crimen contra Javier Vald¨¦s, acribillado a balazos en Culiac¨¢n en 2017. Despu¨¦s de cuatro a?os de su muerte, uno de los sicarios fue condenado a m¨¢s de 30 a?os de prisi¨®n en junio pasado. Pero qui¨¦n orden¨® su muerte sigue siendo un misterio. Aunque a pocos se les escapa en Sinaloa, que el narco estuvo implicado. Pero no hay m¨¢s responsables en la c¨¢rcel, ni siquiera se?alados.
La impunidad para los cr¨ªmenes contra la prensa, as¨ª como para todo tipo de delitos en general, es m¨¢s del 90%. Y las organizaciones civiles empujan estos d¨ªas para que ni el crimen de Maldonado, pero tampoco el de Margarito Mart¨ªnez, Jos¨¦ Luis Gamboa o Roberto Toledo, asesinados este a?o, engrosen la cifra negra de las decenas de muertes que soporta el gremio.
La prensa: el ¨²ltimo blanco de L¨®pez Obrador
El Comit¨¦ para la Protecci¨®n de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en ingl¨¦s) lleva advirtiendo desde hace m¨¢s de un a?o que M¨¦xico es el pa¨ªs m¨¢s letal del mundo para ejercer el periodismo. Desde que la organizaci¨®n en defensa de sus derechos, Art¨ªculo 19, recaba datos, en el a?o 2000, han sido asesinados hasta ahora 149 reporteros. De estos, 29, durante los ¨²ltimos tres a?os de Gobierno de L¨®pez Obrador. Solo en lo que va de a?o han sido acribillados cuatro, frente a los siete que asesinaron el a?o pasado.
La violencia contra la prensa, una de las ¨²ltimas crisis que han golpeado al Gobierno de L¨®pez Obrador, ha sido minimizada desde el p¨²lpito presidencial. En medio de la pol¨¦mica por los recientes asesinatos y tres d¨ªas despu¨¦s de decenas de protestas por todo el pa¨ªs organizadas por gente del gremio, el presidente lleg¨® a declarar: ¡°Son muy pocos los periodistas que est¨¢n cumpliendo con el noble oficio de informar. La mayor¨ªa est¨¢ buscando la manera de ver c¨®mo caemos¡±.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha llegado a solicitar al presidente esta semana que cancele una de sus m¨¢s recientes secciones que emplea en las ma?aneras: el Qui¨¦n es qui¨¦n de las mentiras. Un espacio previsto para los mi¨¦rcoles donde el Gobierno federal expone reportajes, columnas o informaciones que habitualmente incomodan a su Gobierno y que el organismo ha advertido que vulnera a un oficio ya lo suficientemente en riesgo.
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