¡®Avispa enojada¡¯, la primera gran cueva con la que se topa el Tren Maya
Las obras para construir el ferrocarril en la selva est¨¢n dejando al descubierto los fr¨¢giles sistemas de cavernas que se esconden bajo el suelo
Los cient¨ªficos lo alertaron hace m¨¢s de un mes: el cambio en el trazo del Tren Maya entre Canc¨²n y Tulum amenazar¨ªa un terreno k¨¢rstico repleto de cavernas, cenotes y r¨ªos subterr¨¢neos que suponen la principal reserva de agua dulce de la regi¨®n. Esta semana, la tala en la selva para abrir paso al tren a la altura de Playa del Carmen, en Quintana Roo, ha confirmado sus temores. Las obras han dejado al descubierto la gran boca de entrada a Avispa enfadada, una cueva de m¨¢s de tres kil¨®metros de longitud en la que habitan murci¨¦lagos, aves como el p¨¢jaro toh y peces como la dama blanca. De cuevas como ¨¦sta depende el jaguar para beber agua en la temporada seca, pero su futuro ahora queda en el aire: para sostener el tren encima es posible que se construyan en ella grandes pilares o que sea completamente rellenada. Las autoridades, por ahora, no han hecho p¨²blicos sus planes.
¡°Se lo estuvimos diciendo desde el principio a Fonatur [la autoridad encargada de la obra] pero nunca nos escucharon y ah¨ª est¨¢n los resultados¡±, lamenta el bi¨®logo Roberto Rojo, de la asociaci¨®n civil C¨ªrculo Espeleol¨®gico del Mayab. Rojo lleva m¨¢s de veinte a?os explorando el complejo mundo subterr¨¢neo de esta zona de la pen¨ªnsula de Yucat¨¢n, del que sabe que todav¨ªa falta mucho por descubrir. Desde el exterior se aprecian las enormes estalactitas que cuelgan del techo de la cueva, de unos dos metros de espesor. Ya adentro, cuenta Rojo, la caverna est¨¢ decorada por ¡°hermos¨ªsimas formaciones¡± que llevan m¨¢s de dos millones de a?os cre¨¢ndose, a medida que el agua va disolviendo la roca caliza de la que est¨¢n compuestas. En ella, como en tantas otras de la zona, tambi¨¦n se han encontrado vestigios arqueol¨®gicos.
En su conferencia matutina, el presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ha asegurado que la obra no afectar¨¢ estos sistemas de cuevas. ¡°El proyecto contempla hacer viaductos para pasar por arriba, no se toca, no se alteran en nada los r¨ªos subterr¨¢neos y los cenotes¡±, dijo el martes. Los cient¨ªficos y ambientalistas que se han organizado contra el paso del tren por la selva dudan que eso sea posible. A unos 500 metros de ¡®Avispa enojada¡¯, tambi¨¦n bajo la zona deforestada para construir las v¨ªas, se encuentra otra enorme cueva de dos kil¨®metros de largo, conocida como ¡®Alita¡¯. Este mi¨¦rcoles por la tarde, una vez que se hab¨ªan ido los trabajadores del tren, la espele¨®loga Tania Ram¨ªrez baj¨® a rapel por el boquete que da acceso a la caverna. ¡°Hab¨ªa salones enormes, y lo m¨¢s interesante es que a la salida encontramos una escalinata prehisp¨¢nica¡±.
¡°Siento mucha tristeza e impotencia. Son lugares que hemos explorado por a?os, conocemos perfectamente esta selva y es una tristeza que nos quieran callar de esta manera, que quieran tapar el sol con un dedo y que insistan en que ah¨ª no hay cuevas, que somos un golpeteo pol¨ªtico, cuando realmente no es as¨ª¡±, lamenta Ram¨ªrez. Ante el rechazo que ha generado entre expertos, ambientalistas e incluso famosos el nuevo trazo del tren por la selva, la llamada 4T se ha movilizado en defensa del proyecto y ha calificado como ¡®pseudoambientalistas¡¯ a quienes han levantado la voz en su contra. Este jueves, el presidente hizo p¨²blico un video en el que se puede ver a habitantes del ejido Jacinto Pat, por el que pasar¨¢ el tren, mostrando su apoyo al proyecto.
¡°Hemos notado que las dependencias hacen los estudios de suelo, de flora y de fauna, y no hay tal ecocidio como se dice¡±, dice en el video Tony Kinil, habitante de la zona. El presidente del comisariado ejidal, Crescencio Noh, afirma que las v¨ªas pasar¨¢n tres kil¨®metros ¡°m¨¢s atr¨¢s¡± del cenote Dos Ojos, adentradas en la selva, ¡°donde, sin duda, no nos van a afectar¡±. Hasta ahora Fonatur no ha hecho p¨²blico el trazo oficial del tramo 5 del Tren Maya, pero los trabajos de deforestaci¨®n iniciaron desde finales de febrero, poco despu¨¦s de que se anunciase que las v¨ªas ya no ir¨ªan junto a la carretera que conecta Canc¨²n y Tulum, como estaba planteado inicialmente. El rechazo de los hoteleros, que ten¨ªan que ceder parte de la entrada a sus resorts de lujo, y la tardanza que estaba presentando la obra ¨C que implicaba elevar las v¨ªas por encima de Playa del Carmen-, jugaron en contra del plan original.
El pasado 6 de febrero, poco antes de que llegasen las m¨¢quinas a la selva, el ingeniero industrial Guillermo D.Christy y otros integrantes del colectivo Cenotes Urbanos descubrieron una caverna pr¨ªstina que jam¨¢s hab¨ªa sido explorada. La apodaron ¡®Yorgana 3¡ä. Tardaron varias semanas en mapearla y registrar las diferentes especies que all¨ª habitan: ranas ladradoras yucatecas, damas blancas o camarones de coral. De la b¨®veda a la superficie no hay m¨¢s de dos metros. Ahora la entrada ha quedado expuesta, tras ser talada la selva que la cubr¨ªa. ¡°?C¨®mo van a pasar por ah¨ª un tendido de ferrocarril?¡±, se pregunta. ¡°No va a resistir el techo. Tendr¨¢n que rellenarla o volarla. Cualquiera de las dos es terrible, porque se est¨¢ vulnerando a especies en peligro de extinci¨®n¡±.
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