Un juez ordena la detenci¨®n de Gualberto Ram¨ªrez, uno de los arquitectos de la verdad hist¨®rica del ¡®caso Ayotzinapa¡¯

Un juez ha pedido la detenci¨®n de Gualberto R¨¢mirez, uno de los mandos de la antigua administraci¨®n de la Fiscal¨ªa, por torturar a un detenido durante las pesquisas del caso Ayotzinapa. Fuentes cercanas a la investigaci¨®n han confirmado a este diario la orden de aprehensi¨®n, la segunda contra el exfuncionario, que permanece en paradero desconocido. En 2014, Ram¨ªrez dirigi¨® los primeros pasos de la investigaci¨®n por el caso Ayotzinapa. Encargado de la unidad antisecuestros de la dependencia, pidi¨® la baja en 2019.

Junto al pr¨®fugo Tom¨¢s Zer¨®n y el olvidado Jes¨²s Murillo Karam, Ram¨ªrez es un personaje importante en la construcci¨®n de la verdad hist¨®rica, la cuestionada narrativa elaborada durante la administraci¨®n de Enrique Pe?a Nieto (2012-2018), sobre el ataque contra los estudiantes normalistas en septiembre de 2014, en Iguala, Guerrero. Entonces, Murillo Karam era el procurador, Zer¨®n el coordinador de las investigaciones y Ramir¨¦z el eslab¨®n inmediatamente inferior.

La Fiscal¨ªa acusa al exfuncionario de participar en la tortura contra uno de los presuntos atacantes, Felipe Rodr¨ªguez, alias El Cepillo. Supuesto integrante del grupo delincuencial Guerreros Unidos, parte de la red criminal que lanz¨® la cacer¨ªa contra los estudiantes, El Cepillo fue uno de tantos detenidos torturados durante los primeros meses de la investigaci¨®n. En un informe divulgado en 2017, la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en M¨¦xico se?al¨® que al menos 34 detenidos por el caso hab¨ªan sido torturados.

En el caso concreto de El Cepillo, Ram¨ªrez comparte acusaci¨®n con Tom¨¢s Zer¨®n. En 2020, en un video del interrogatorio filtrado a los medios, El Cepillo aparec¨ªa con el torso desnudo y la cabeza tapada, en un cuarto junto a Zer¨®n. El expolic¨ªa le dec¨ªa al detenido: ¡°Dime todo lo que sepas de los estudiantes. La primera mentira que me digas, se acab¨® el tema y empezamos¡±. Ram¨ªrez estaba con ellos en la misma habitaci¨®n. Zer¨®n est¨¢ acusado adem¨¢s por la tortura de otro detenido, Agust¨ªn Garc¨ªa Reyes, al¨ªas El Chereje.

Por el caso de El Cepillo, la unidad especial de la Fiscal¨ªa que investiga el caso, dirigida por Omar G¨®mez, busca igualmente la detenci¨®n de un funcionario de alto rango del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Ignacio Mendoza, presente igualmente en el interrogatorio. Entonces funcionario del CISEN, predecesor del CNI, Mendoza est¨¢ acusado de tortura, coalici¨®n de servidores p¨²blicos, intervenci¨®n de comunicaciones privadas y desaparici¨®n forzada de personas, en su modalidad de encubrimiento.

Las acusaciones de tortura contra Mendoza, Ram¨ªrez y el propio Zer¨®n nacen de una bater¨ªa de v¨ªdeos que el mismo CNI entreg¨® a la Fiscal¨ªa. Desconocidos hasta hace dos a?os, negada su existencia en solicitudes de informaci¨®n amparadas en la ley de transparencia, los v¨ªdeos han ampliado el conocimiento que los investigadores ten¨ªan del uso de la tortura durante los primeros meses de la investigaci¨®n, a finales de 2014 y principios de 2015.

M¨¢s all¨¢ de la tortura, el papel de Ram¨ªrez en la construcci¨®n de la verdad hist¨®rica es central. El funcionario particip¨® en uno de los eventos centrales de la vieja narrativa, el supuesto hallazgo de restos de uno de los normalistas, Alexander Mora, en el r¨ªo San Juan. Los investigadores de la actual administraci¨®n de la Fiscal¨ªa se?alan que aquel hallazgo fue un montaje. As¨ª, rechazan las conclusiones del Gobierno de Pe?a Nieto, Murillo y el propio Zer¨®n: el asesinato de los 43 normalistas desaparecidos durante el ataque, la quema de sus cuerpos en el basurero del pueblo vecino de Cocula y la posterior desaparici¨®n de los restos en el r¨ªo.

Ram¨ªrez aparece justamente en el escenario del r¨ªo. Seg¨²n la vieja investigaci¨®n, el detenido Garc¨ªa Reyes y otro presunto integrante de Guerreros Unidos, Jonathan Osorio, fueron trasladados a la zona del r¨ªo el 29 de octubre de 2014, donde habr¨ªan se?alado el lugar donde arrojaron restos de los muchachos. Al rato, elementos de la Secretar¨ªa de Marina encontraron en la zona bolsas con restos ¨®seos. El laboratorio acab¨® confirmando que los restos hab¨ªan pertenecido en vida al estudiante Mora.

La pesquisa del grupo de expertos comisionado por la OEA descubri¨®, sin embargo, que aquella visita del 29 de octubre ven¨ªa precedida de otra, el d¨ªa anterior, que no constaba en el expediente. Zer¨®n y compa?¨ªa trataron de ocultar aquella visita, incluso de los peritos que actuaban en la zona en nombre de las familias en la ¨¦poca, el Equipo Argentino de Antropolog¨ªa Forense. G¨®mez y su equipo creen ahora que aquella visita previa sirvi¨® para colocar los restos de Mora en el r¨ªo, asunto que apuntal¨® a?os atr¨¢s la narrativa del basurero.

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