La decisi¨®n de la editorial Almad¨ªa de rescindir un contrato a la escritora Carolina San¨ªn enciende el debate sobre la cancelaci¨®n

La decisi¨®n de la editorial Almad¨ªa de cancelar los contratos que ten¨ªa con la autora colombiana Carolina San¨ªn (Bogot¨¢, 49 a?os) ha encendido el debate en el mundo editorial y en las redes sociales. La autora colombiana cont¨® el viernes en un tuit que la editorial mexicana hab¨ªa rescindido su contrato debido a los cuestionamientos de la escritora a ¡°la pol¨ªtica identitaria¡±. Como consecuencia, dos de sus obras, Somos luces abismales y Tu cruz en el cielo desierto, no se publicar¨¢n en M¨¦xico.

Desde que se produjo el anuncio, autores y editores se dividen entre quienes apoyan a la escritora y creen que ha sido ¡°censurada¡±, y quienes defienden que la decisi¨®n de la empresa fue ¡°pol¨ªtica¡±. ¡°Quiero contarles que @Almadia_Edit [Editorial Almad¨ªa], despu¨¦s de haber comprado y pagado por los derechos de mis libros Somos luces abismales y Tu cruz en el cielo desierto para M¨¦xico, me hizo saber hoy que no los publicar¨¢ debido a mis cuestionamientos a la pol¨ªtica identitaria¡±, escribi¨® San¨ªn el viernes en Twitter. ¡°Me parece que la decisi¨®n de cancelar un contrato ya firmado por unos libros (que, adem¨¢s, no tienen que ver con el tema en cuesti¨®n) sienta un precedente tenebroso¡±, continu¨® la escritora.

Tras ese mensaje, el debate se dividi¨® y se abri¨® la discusi¨®n sobre la cancelaci¨®n de una obra por las opiniones personales de artistas o intelectuales. La poeta mexicana Dahlia de la Cerda opin¨® en un tuit que ¡°Almad¨ªa, como todas las editoriales, no tiene por qu¨¦ tomar solo decisiones editoriales¡±. ¡°Tambi¨¦n pueden tomar decisiones pol¨ªticas, ¨¦ticas y econ¨®micas. Esta fue una decisi¨®n pol¨ªtica y as¨ª hay que entenderla¡±, dijo la escritora. La narradora mexicana Gabriela J¨¢uregui destac¨® que Almad¨ªa sea ¡°clara con su misi¨®n y cu¨¢les historias y de qu¨¦ bocas salen¡±.

La escritora argentina Mariana Enriquez, en cambio, expres¨® en Twitter su ¡°solidaridad¡± con la autora. ¡°Creo que es importante discutir y no estar de acuerdo. Es importante inclusive para afirmar la posici¨®n propia¡±, escribi¨®, y poco despu¨¦s borr¨® su cuenta en la red social por la reacci¨®n de otros usuarios a sus mensajes. El escritor mexicano Guillermo Arriaga envi¨® un mensaje similar: ¡°Los desacuerdos deben ser pretexto para el di¨¢logo, no para la cancelaci¨®n. Me preocupa sobremanera este hecho por venir de una editorial respetada¡±. Otros usuarios acusaron de ¡°hipocres¨ªa¡± a la editorial por no resolver de la misma manera se?alamientos anteriores contra autores o miembros de la empresa.

Almad¨ªa, una de las editoriales independientes m¨¢s exitosas de M¨¦xico, compr¨® ¡°hace un par de a?os¡± los derechos de la publicaci¨®n en el pa¨ªs de dos de los libros de San¨ªn, seg¨²n cont¨® la autora en Twitter. ¡°Firmaron el contrato e incluso pagaron el anticipo, de modo que nada tiene que ver con el contenido de los libros. Se trata de cancelaci¨®n de la persona¡±, dijo la autora. La editorial no ha hecho, hasta este lunes por la noche, comentarios sobre la decisi¨®n de no publicar las obras en M¨¦xico.

Somos luces abismales (2018) re¨²ne ocho textos ¡°en los que la autora plantea una situaci¨®n de inicio y luego se permite ir asociando libremente temas, lugares, tiempos, personas¡±, escribi¨® la periodista Mercedes Halfon en P¨¢gina/12. En Tu cruz en el cielo desierto (2020) la escritora plantea ¡°una concepci¨®n del amor propia del siglo XVII como remedio a los romances a distancia de la actualidad¡±, dijo el escritor Rafael Gumucio en Babelia. En ninguno, San¨ªn aborda directamente el tema trans. Aunque los libros no vayan a ser publicados en M¨¦xico por Almad¨ªa, s¨ª est¨¢n disponibles en Colombia, Argentina y Espa?a editados por Laguna Libros, Blatt y R¨ªos y Literatura Random House.

San¨ªn se ha convertido en una de las escritoras m¨¢s pol¨¦micas de Colombia por sus opiniones en Twitter. En un pa¨ªs poco dado al debate, sus posturas han terminado por convertirla en una autora de la que se habla m¨¢s por lo que dice en los breves mensajes de esa red social que por lo que escribe en sus libros. Ning¨²n tema, sin embargo, hab¨ªa causado tanta divisi¨®n como sus preguntas frente a lo que ella llama ¡°el dogma de g¨¦nero¡± y sus cuestionamientos al transactivismo. No es nuevo que San¨ªn se pronuncie sobre ¡°el borrado de mujeres¡±, ni que su nombre sea tendencia en alguna red.

En uno de sus tuits m¨¢s reciente, San¨ªn ha dicho que, tras cuatro d¨ªas de pol¨¦mica, no puede ¡°explicar m¨¢s¡±. ¡°Quieren un chivo expiatorio, y el chivo solo sirve sacrificado. No sirve que busque aclarar, que pida el di¨¢logo, que suplique que no inventen. En este medio no hablar¨¦ por ahora m¨¢s del tema. Aqu¨ª est¨¢ lo que he dicho¡±, escribi¨® y dej¨® el enlace a una extensa videocolumna publicada d¨ªas antes, que ha sido se?alado por colectivos feministas como un discurso de odio y respaldado por otros como un ejercicio de reflexi¨®n.

El 30 de octubre, San¨ªn public¨® un mon¨®logo, La identidad, las mujeres y el mundo siguiente, como hace semanalmente en la revista Cambio. En el v¨ªdeo, la escritora aborda ¡°las tensiones entre el transactivismo y el feminismo¡±. ¡°El punto de este mon¨®logo no es quejarme, es explicar mis intuiciones y mis preguntas con respecto a este tema¡±, avisa al comienzo de la grabaci¨®n. Durante casi una hora y media, la autora cuestiona ¡°el reclamo de la poblaci¨®n trans a ser reconocidos de un sexo distinto de aquel con el que nacieron¡±. ¡°El nombre de eso es privilegio, no es derecho¡±, dice.

San¨ªn ha reconocido haber sido ¡°vehemente¡± en los t¨¦rminos ¡°a veces¡±. ¡°El otro d¨ªa dije que la imposici¨®n del activismo trans era fascista, creo que me pas¨¦ al decir eso. Me refer¨ªa a (...) la imposici¨®n por ley de una ideolog¨ªa sumada a la intimidaci¨®n de la muchedumbre, que es toda propia de los fascismos. Pero he debido decir fanatismo, no fascismo¡±, aclara en el v¨ªdeo. Se estaba refiriendo a sus declaraciones sobre la llamada ley trans que Espa?a espera aprobar antes de que acabe 2022. La autora, sin embargo, ha defendido que no tiene ¡°ninguna fobia¡± contra las personas trans y ha cuestionado que se la defina como feminista transexcluyente: ¡°No puedo excluir a nadie del feminismo porque no soy capitana del feminismo¡±.

San¨ªn ha sido reiterativa en se?alar un intento por silenciar sus opiniones censurando su voz en espacios p¨²blicos. La cancelaci¨®n del contrato con la editorial Almad¨ªa ha sido la m¨¢s ruidosa, pero hace apenas unas semanas, San¨ªn fue relevada de un espacio de entrevistas en Canal Capital. Entonces, la escritora asegur¨® que la hab¨ªan sacado porque necesitaban a alguien ¡°menos problem¨¢tico¡±. ¡°Necesitaban algo m¨¢s ligero, a¨²n a costa del rating. Les tra¨ªa demasiados problemas hablar de problemas (...) Y, por cierto, tambi¨¦n necesitaban a alguien mucho m¨¢s barato¡±, dijo San¨ªn.

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