¡°De haberlo sabido no les compro el boleto¡±: dos hermanas de 16 y 23 a?os mueren al caer por una coladera en Ciudad de M¨¦xico
Las dos j¨®venes iban a un concierto del grupo de rock Zo¨¦ en el Palacio de los Deportes. El padre de ellas trat¨® de rescatarlas con una cuerda sin ¨¦xito
Nada m¨¢s llegar a la zona, un olor fuerte inunda las fosas nasales y hasta el paladar. Son los gases que salen de dos coladeras sin tapa que dan a las aguas negras de la ciudad. Por all¨ª paseaban el jueves por la noche dos hermanas, de 16 y 23 a?os, que iban acompa?adas de su padre a un concierto del grupo Zo¨¦ en el Palacio de los Deportes, en la alcald¨ªa Iztacalco, de Ciudad de M¨¦xico. Una de las chicas se cay¨® en el agujero, de al menos tres metros de profundidad, y se golpe¨® la cabeza, seg¨²n las primeras versiones de los hechos. Su hermana intent¨® ayudarla, pero la falta de ox¨ªgeno por el metano producido por los excrementos y las aguas negras del fondo mataron a las dos. El padre trat¨® de rescatarlas con una cuerda sin ¨¦xito. ¡°De haberlo sabido no les compro el boleto¡±, dijo la madre a los medios de comunicaci¨®n entre sollozos, ¡°son mis dos hijas, las ¨²nicas que tengo¡±.
Armando Quintero, alcalde del municipio, ha lamentado ¡°profundamente¡± la muerte de las dos mujeres. El Sistema de Aguas de la Ciudad de M¨¦xico (SACMEX) encargado de poner nuevas tapas cuando las roban, tambi¨¦n ha lamentado la p¨¦rdida de las dos j¨®venes y ha prometido que cooperar¨¢ en las investigaciones para esclarecer los hechos, que est¨¢n a cargo de la Fiscal¨ªa de la Ciudad de M¨¦xico. El l¨ªder de Zo¨¦, el grupo de rock mexicano al que iban a ver esa noche, ha escrito en su Twitter que est¨¢ ¡°lleno de tristeza¡± despu¨¦s de enterarse de la tragedia.
Entre el viaducto R¨ªo de la Piedad, de seis carriles, y un antiguo estacionamiento de coches semiabandonado, est¨¢ la acera angosta, irregular y llena de basura donde ocurri¨® el accidente. En ese punto hay dos alcantarillas sin tapa, la del accidente y otra m¨¢s. Est¨¢n tapadas con una llanta de autom¨®vil y rodeadas por una valla. En medio hay dos elementos importantes: un peque?o puesto con dulces, salados y bebidas; y una escalera que sube hasta un puente peatonal. La gente lo utiliza para cruzar desde la parada Vel¨®dromo de la l¨ªnea nueve de metro hasta el Palacio de los Deportes, un recinto a 15 minutos andando que por fuera es como el caparaz¨®n de una tortuga y por dentro tiene espacio para 22.000 espectadores.
El se?or que regenta el puesto es muy esquivo ¡ª¡±hable con la polic¨ªa, hable con ellos¡±¡ª y casi no quiere hablar con la prensa, entra y sale de su caseta cada vez que se acercan las c¨¢maras. Los que han conseguido hablar con ¨¦l cuentan que estaba cuando sucedi¨® todo. Normalmente pone su puesto de nueve a tres de la tarde, pero cuando hay concierto, como ayer por la noche, se queda al menos hasta las 10. Cuando las hermanas cayeron al pozo, fue el qui¨¦n ayud¨® al padre y le proporcion¨® la cuerda con la que trat¨® de rescatar a sus hijas. Pero fue imposible, y esta ma?ana ha vuelto a su trabajo y mantiene el silencio.
Las escaleras que dan a la l¨ªnea nueve de metro est¨¢n al lado. Desde arriba se puede ver el agujero por el que se cayeron las chicas, un pozo de menos de medio metro de di¨¢metro y tres de profundidad. Por el fondo pasan las aguas negras, los excrementos y residuos de toda la ciudad. Desde all¨ª arriba tambi¨¦n se puede pulsar el bot¨®n Tot¨¦m. ¡°Lo aprietas cuando hay una emergencia y llama directamente a la base. Se supone que el tiempo de respuesta es entre cinco y siete minutos¡±, dice el polic¨ªa. Sin embargo, el padre de las j¨®venes se quejaba ayer en una televisi¨®n local de que los efectivos tardaron m¨¢s de 20 minutos en llegar.
Borja Trujano S¨¢nchez juega al f¨²tbol al lado de la calle del accidente. Es del barrio, y dice que esas coladeras suelen estar cerradas, pero otras personas aseguran que las alcantarillas llevaban desde hace tiempo sin tapa. ¡°S¨ª, la gente se las roba y las vende por ah¨ª¡±, contaba el chico. El robo de coladeras es un problema desde hace a?os para la Ciudad de M¨¦xico. Aunque a la administraci¨®n le cuesta ¡°11.000 pesos¡± reponer una ¡°rejilla de piso¡±, en el mercado negro se venden por unos 500 pesos, seg¨²n una petici¨®n que realiz¨® el congreso de la capital a las autoridades del gobierno. En ella propon¨ªan cambiar gradualmente las coladeras de hierro por otras elaboradas con pl¨¢stico reciclado o concreto, para que no exista el incentivo de su venta. ¡°Las avenidas con mayor robo son Insurgentes, Circuito Interior, Perif¨¦rico y Viaducto R¨ªo Piedad¡±, reflejaba la petici¨®n, donde ocurri¨® el accidente que acab¨® con la vida de las dos chicas.
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