Las cuentas pendientes de Ovidio Guzm¨¢n en EE UU: narcotr¨¢fico, asesinatos y una extradici¨®n en el aire

Tr¨¢fico de coca¨ªna, metanfetaminas y marihuana. Esas son las sustancias en el centro de la acusaci¨®n contra Ovidio Guzm¨¢n, alias El Rat¨®n, en Estados Unidos. La ¨²nica causa conocida contra el hijo de Joaqu¨ªn El Chapo Guzm¨¢n, fundador y l¨ªder hist¨®rico del Cartel de Sinaloa, est¨¢ abierta ante una corte de Washington D.C. y se centra en un cargo por narcotr¨¢fico, aunque las autoridades afirman que Guzm¨¢n tambi¨¦n est¨¢ detr¨¢s de varios asesinatos. La captura del capo ha desatado una espiral de caos y violencia en el Estado de Sinaloa, basti¨®n de la organizaci¨®n criminal, y se ha producido a tan solo cuatro d¨ªas de que el presidente estadounidense, Joe Biden, aterrice en Ciudad de M¨¦xico para acudir a la Cumbre de L¨ªderes de Am¨¦rica del Norte. Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, ha se?alado este jueves que existe una solicitud de extradici¨®n desde septiembre de 2019, pero ha descartado que el arresto tenga relaci¨®n con la visita de Biden la pr¨®xima semana.

¡°No tiene qu¨¦ ver, este operativo se mantuvo en extrema reserva por parte de las autoridades encargas de hacerlo y no hubo ninguna consulta pol¨ªtica en el Gabinete¡±, ha asegurado Ebrard, cuestionado sobre si la detenci¨®n de Guzm¨¢n se trataba de un ¡°regalo¡± para la Casa Blanca. El secretario ha comentado que es poco probable que el hijo de El Chapo sea extraditado en los pr¨®ximos d¨ªas porque el proceso de extradici¨®n toma tiempo y porque tambi¨¦n hay procedimientos judiciales abiertos en M¨¦xico. La captura se produjo por una orden en el pa¨ªs y no por la solicitud de detenci¨®n emitida por Washington, ha se?alado. ¡°Al d¨ªa de hoy, yo esperar¨ªa un proceso aqu¨ª en M¨¦xico¡±, ha advertido. Ebrard ha dicho que las autoridades estadounidenses no tuvieron participaci¨®n en el operativo contra Guzm¨¢n, al menos en el terreno.

EL PA?S adelant¨® hace unos meses que Estados Unidos pidi¨® a M¨¦xico aumentar el n¨²mero de extradiciones cada a?o como parte de los acuerdos bilaterales de Seguridad, hasta alcanzar una cifra de 60 acusados cada a?o, de acuerdo con una masiva filtraci¨®n de documentos confidenciales del Ej¨¦rcito mexicano. El Rat¨®n se suma a una lista de deseos de las autoridades estadounidenses para juzgar a narcotraficantes de alto perfil como Rafael Caro Quintero, detenido en julio del a?o pasado en la sierra de Sinaloa. Caro Quintero, por ejemplo, a¨²n no ha sido trasladado gracias a que sus abogados han logrado retrasar el proceso. Ebrard estim¨® que el proceso de extradici¨®n contra Guzm¨¢n puede demorarse, al menos, entre cuatro y seis semanas, aunque es probable que tome meses. Un juez concedi¨® una suspensi¨®n que pone en pausa el procedimiento, una t¨¢ctica legal recurrente en este tipo de casos.

El hijo de El Chapo fue identificado por las autoridades mexicanas como l¨ªder de Los Chapitos, una escisi¨®n del Cartel de Sinaloa con amplia presencia en el noroeste del pa¨ªs. No han dado a conocer, sin embargo, los delitos que se le imputan, aunque se barajan de entrada delitos contra la salud y portaci¨®n de armas de fuego. Del otro lado de la frontera, la historia es diferente. La Fiscal¨ªa del Distrito de Columbia lo acusa directamente de traficar una tonelada de marihuana y al menos cinco kilogramos de coca¨ªna, un delito grave, seg¨²n la justicia estadounidense. El historial criminal del capo se expande desde hace m¨¢s de una d¨¦cada, desde abril de 2008, cuando apenas ten¨ªa 18 a?os.

La acusaci¨®n en Estados Unidos data precisamente de julio de 2017, pero se mantuvo clasificada hasta enero de 2019. Fue hasta septiembre de ese a?o, sin embargo, cuando Washington present¨® la solicitud de extradici¨®n a M¨¦xico. Pr¨¢cticamente, un mes despu¨¦s, el 17 de octubre de 2019, las autoridades mexicanas capturaron por primera vez a Guzm¨¢n en Culiac¨¢n, la capital de Sinaloa. Los narcobloqueos, tiroteos y motines que se registraron en la ciudad hicieron que Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador diera la orden de liberarlo. El fiasco pas¨® a la historia como el Culiacanazo y signific¨® uno de los puntos m¨¢s bajos del actual Gobierno.

La orden de detenci¨®n de Estados Unidos es un documento de apenas cuatro p¨¢ginas y est¨¢ acompa?ada de una solicitud de confiscaci¨®n de todos los bienes de Guzm¨¢n en Estados Unidos, financiados supuestamente por sus actividades criminales. Incluye la agravante de ¡°incitaci¨®n al crimen¡±, una figura legal en ese pa¨ªs que castiga cuando una persona convence a otras de que cometan un delito. No se identifica a Guzm¨¢n con ning¨²n abogado que lo defienda en el escueto sumario judicial. Es posible que otras acusaciones presentadas ante cortes en otros Estados est¨¦n clasificadas. El Departamento de Estado ofrec¨ªa una recompensa de cinco millones de d¨®lares por informaci¨®n que facilitara la captura de El Rat¨®n.

Las autoridades de EE UU han revelado que tienen m¨¢s informaci¨®n sobre el poder de Guzm¨¢n de la que se ha hecho p¨²blica en los tribunales. Ovidio y su hermano Joaqu¨ªn Guzm¨¢n L¨®pez son se?alados como los herederos de El Chapo y de su hermano ?dgar Guzm¨¢n L¨®pez, asesinado en mayo de 2008 en medio de una refriega de m¨¢s de 500 disparos en un centro comercial de Culiac¨¢n. ¡°Tras la muerte de ?dgar, Ovidio y Joaqu¨ªn heredaron buena parte de las ganancias del narcotr¨¢fico y comenzaron a invertir grandes cantidades de efectivo para comprar marihuana en M¨¦xico y coca¨ªna en Colombia¡±, se lee en un perfil del Gobierno estadounidense.

¡°Tambi¨¦n empezaron a comprar grandes cantidades de efedrina desde Argentina, gestionaron el contrabando del producto a M¨¦xico para incursionar en la producci¨®n de metanfetaminas¡±, dice el informe. En la capital estadounidense se le acusa de importar al menos 500 gramos de metanfetaminas. En cambio, el Departamento de Estado asegura que los hermanos Guzm¨¢n supervisaban 11 laboratorios clandestinos en Sinaloa, con una capacidad de producci¨®n de hasta casi 2.500 kilos al mes. ¡°La metanfetamina es vendida al mayoreo a otros miembros del cartel y a distribuidores en Estados Unidos y Canad¨¢¡±, asegura la Casa Blanca. ¡°Otras fuentes indican que Ovidio Guzm¨¢n L¨®pez ha ordenado el asesinato de informantes, un narcotraficante y una famosa cantante mexicana que se neg¨® a cantar en su boda¡±, se agrega.

El momento de la detenci¨®n, en las v¨ªsperas de la primera visita de un presidente estadounidense a M¨¦xico en casi 10 a?os, ha levantado dudas. La versi¨®n oficial es que es una coincidencia. La captura se dio, de hecho, en un mar de coincidencias. El juicio en Nueva York contra Genaro Garc¨ªa Luna, jefe de la Polic¨ªa durante el Gobierno de Felipe Calder¨®n, est¨¢ programado para el pr¨®ximo 17 de enero. El exsecretario de Seguridad P¨²blica es acusado de narcotr¨¢fico y de haber mantenido nexos con el Cartel de Sinaloa. Es el caso de m¨¢s alto perfil contra un exfuncionario mexicano en Estados Unidos, solo comparable con el proceso contra el exsecretario de Defensa Salvador Cienfuegos en 2020, que no lleg¨® a los tribunales.

M¨¢s coincidencias: el exgobernador priista C¨¦sar Duarte fue detenido por corrupci¨®n el 8 de julio de 2020 en Miami, justo el mismo d¨ªa que L¨®pez Obrador se reuni¨® con Donald Trump en Washington. Antes, en febrero de 2017, El Chapo fue extraditado a Estados Unidos, poco m¨¢s de un mes despu¨¦s de la toma de posesi¨®n de Trump, en lo que se ley¨® en M¨¦xico como un intento de apaciguar el discurso antimexicano del pol¨ªtico republicano. El mayor traficante del mundo fue condenado a cadena perpetua en 2019 por el juez Brian Cogan, el mismo que decidir¨¢ el destino de Garc¨ªa Luna en las pr¨®ximas semanas. Su hijo Ovidio fue internado hace unas horas en el penal de m¨¢xima seguridad del Altiplano. Es la misma de la que se fug¨® El Chapo en 2015, tras escapar en un t¨²nel de 1,5 kil¨®metros, acondicionado con iluminaci¨®n, ventilaci¨®n, rieles y una motocicleta para facilitar su huida.

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