Otra pol¨¦mica decisi¨®n del Frente Amplio por M¨¦xico
Los partidos decidieron apoyar a Creel en una ambici¨®n sin futuro, y con ello cancelaron la oportunidad a un cuadro que promet¨ªa al menos novedad, preparaci¨®n y entrega, como De la Madrid
Es una ilusi¨®n pensar que los partidos del Frente Amplio por M¨¦xico sacaron las manos para que sea el pueblo quien decida qui¨¦n compite en la primaria para elegir a su candidato(a) presidencial. Y al disfrazar de democracia el proceso cometieron el error de eliminar este martes a Enrique de la Madrid.
Para evitar filtraciones, el comit¨¦ organizador de la interna del Frente adelant¨® el anuncio de sus finalistas. Pasadas las seis de la tarde del martes informaron que en la encuesta opositora quedaron mejor posicionados, en ese orden, X¨®chitl G¨¢lvez, Beatriz Paredes y Santiago Creel. Sin sorpresas.
Por lo tanto De la Madrid ha quedado eliminado y no participar¨¢ en los cinco foros que habr¨¢ a partir del jueves, y mucho menos en la consulta entre aquellos que se inscribieron en el padr¨®n que para tal efecto se convoc¨®.
El Frente Amplio tiene un gobierno y unas reglas. No son factores independientes. El gobierno corre a cargo de los partidos, y las reglas las impusieron los mismos, con algunas concesiones ciudadanas y cediendo partes operativas del proceso al llamado comit¨¦ ciudadano.
Porque si los partidos se lo propon¨ªan, un aspirante desist¨ªa de sus ambiciones incluso antes de registrarse. Eso ha ocurrido y no est¨¢ mal. Todo lo contrario, pues es eso precisamente lo esperable de los institutos que han de velar para que quien gane la candidatura aliancista tenga el mejor perfil.
As¨ª que ni se apuntaron todos los que quer¨ªan inscribirse, ni necesariamente aquellos que s¨ª lo hicieron habr¨ªan pasado a la siguiente fase sin la ayuda de las estructuras partidistas para lograr las 150 mil firmas requeridas. Porque salvo el caso de X¨®chitl, tuvieron bastante qu¨¦ ver en qui¨¦n calificaba.
Con eso en mente es doblemente lamentable el espect¨¢culo de Silvano Aureoles y Miguel ?ngel Mancera, perredistas que lejos de agradecer la ayuda recibida de los partidos, retoban con argumentos huisacheros cuando a pocos sorprende que ni as¨ª hayan reunido los apoyos reglamentarios.
Pero quien s¨ª logr¨® pasar a la siguiente fase fue Enrique de la Madrid, cuya aspiraci¨®n presidencial era abierta desde hace tiempo, y en la que empe?¨® bastantes recursos medi¨¢ticos y no pocas giras, encuentros ciudadanos y debates en la prensa.
El exsecretario de Turismo no era tan popular como Santiago Creel y eso era en buena medida una de sus virtudes. Tiene margen para, ante p¨²blicos nuevos, exponer sus ideas (unas mejores que otras, es cierto), una experiencia que no ha defraudado y una carrera sin grandes pol¨¦micas.
Muchas veces los sondeos premian el conocimiento no la capacidad y menos la idoneidad. Por ello no sorprende que el tercer lugar haya sido para alguien que ha sido figura nacional desde hace 30 a?os, y no para quien entr¨® en la pol¨ªtica partidistas m¨¢s resueltamente apenas hace un par de a?os.
?Al Frente le conven¨ªa que Creel siguiera adelante en lugar de De la Madrid? El cuestionamiento presupone que los partidos buscan que el proceso d¨¦ por resultado la mejor candidatura. Porque si lo que pretenden es negociar otros intereses, saciar otras agendas, entonces ni para qu¨¦ explorar la respuesta.
Si la alianza busca el mejor perfil, ?conven¨ªa que en los encuentros venideros la gente escuchara a quien podr¨ªa crecer en conocimiento gracias a novedosos argumentos, a quien con sus planteamientos forzara a los otros contendientes a prepararse m¨¢s? Si s¨ª, el finalista era De la Madrid, no Creel.
El exdirector de Bancomext tuvo mejor desempe?o que el exsecretario de Gobernaci¨®n panista en el foro del pasado jueves. Y que X¨®chitl. Pero eso no incidi¨® en la encuesta porque el encuentro nadie lo vio, y porque cancelados como est¨¢n los debates, no hubo tampoco un encendido postdebate.
Por eso se hac¨ªa necesaria la operaci¨®n de los partidos, para que ponderaran qu¨¦ terna ser¨ªa m¨¢s atractiva en los siguientes encuentros, en las dos semanas que le restan al proceso. Igual y De la Madrid no crec¨ªa, pero una cosa es segura, Creel, con su pasado foxista encima, seguro no crecer¨¢.
Y ese pasado es una raz¨®n extra para que los partidos hubieran hecho valer su autoridad. X¨®chitl es foxista. Ah¨ª surgi¨® a la pol¨ªtica y tiene en el exmandatario a uno de sus referentes. Es lo que es. Y Creel¡ tambi¨¦n. Tendremos a dos foxistas en la palestra junto a Beatriz Paredes.
Paredes y De la Madrid, en cambio, no era redundantes. Tienen carreras muy diferentes: por ello no iban a canibalizarse: ?el diputado y la senadora del PAN podr¨¢n ofrecer cosas distintas? Hoy, dif¨ªcilmente. A ver si la senadora priista no se los desayuna en cada foro. Cosa que no es mala, por supuesto.
Los partidos decidieron apoyar a Creel en una ambici¨®n sin futuro, y con ello cancelaron la oportunidad a un cuadro que promet¨ªa al menos novedad, preparaci¨®n y entrega, como De la Madrid. ?Por qu¨¦? Pronto lo averiguaremos.
Si hiciera falta un argumento de que los partidos nom¨¢s no quieren soltar el proceso, de que no es cierto que le dejan a las encuestas o al comit¨¦ ciudadano las decisiones, aqu¨ª va otro desatino: se anunci¨® que le encargaron a Francisco Garc¨ªa Cabeza de Vaca la estrategia de seguridad. S¨ª, a alguien que no sabe lo que es tener miedo a la delincuencia en las calles mexicanas porque no las puede pisar.
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