L¨®pez Obrador env¨ªa un paquete de reformas constitucionales que son legado y programa electoral

El camino est¨¢ marcado. Cuatro meses antes de las elecciones que le retirar¨¢n a su rancho, el presidente L¨®pez Obrador descarg¨® este lunes en Palacio Nacional un paquete de reformas constitucionales que es a la vez legado y programa electoral. Ah¨ª est¨¢n las pol¨ªticas en las que cree y las que no le ha dado tiempo o no ha querido consagrar en la Constituci¨®n cuando ten¨ªa mayor¨ªa para hacerlo. En la recta final de su mandato, el momento se torna m¨¢s oportuno, con el electorado esper...

El camino est¨¢ marcado. Cuatro meses antes de las elecciones que le retirar¨¢n a su rancho, el presidente L¨®pez Obrador descarg¨® este lunes en Palacio Nacional un paquete de reformas constitucionales que es a la vez legado y programa electoral. Ah¨ª est¨¢n las pol¨ªticas en las que cree y las que no le ha dado tiempo o no ha querido consagrar en la Constituci¨®n cuando ten¨ªa mayor¨ªa para hacerlo. En la recta final de su mandato, el momento se torna m¨¢s oportuno, con el electorado esperando un mensaje para salir a votar, porque por m¨¢s que quisiera, el partido del presidente, Morena, tendr¨¢ que negociar con la oposici¨®n si quiere sacar adelante estas modificaciones legales, a menos que gane dos tercios de los curules del Congreso el 2 de junio.

Los morenistas se ver¨¢n satisfechos cuando oigan estos alegatos en favor de los pobres, de los ind¨ªgenas, de elevar el sueldo a maestros, m¨¦dicos y polic¨ªas, de asegurar un jornal al campesinado o garantizar un salario m¨ªnimo durante un a?o para la formaci¨®n de los j¨®venes que no estudian y no encuentra trabajo; devolver a la Comisi¨®n Federal de Electricidad su carga de empresa p¨²blica estrat¨¦gica as¨ª como otorgar al pueblo la posibilidad de votar a los jueces y consagrar las ayudas sociales y educativas en la Constituci¨®n. O sea, ¡°reencauzar la vida p¨²blica por la senda de la libertad, la justicia y la democracia¡±. Palabras grandilocuentes para un electorado que las espera. Tambi¨¦n tuvo gui?os para los ecologistas, por ejemplo, restringiendo el uso del agua en zonas de escasez solo para uso dom¨¦stico, para quienes esperan el tren, 18.000 kil¨®metros que podr¨¢n transitar los pasajeros, prometi¨®; otros rubros son del gusto m¨¢s populista, el que se escucha en la cantina: reducir el n¨²mero de pol¨ªticos en el Congreso y el Senado o no permitir que funcionario alguno cobre m¨¢s que el presidente.

Y as¨ª hasta 20 medidas con las que enfila el final de su trayecto y tiende las traviesas por las que deber¨¢ conducirse su sucesora, Claudia Sheinbaum. La campa?a electoral estar¨¢ atravesada por un intenso debate parlamentario, rentable para el partido del Gobierno, que deja a la oposici¨®n en la encrucijada de doblegarse a la negociaci¨®n en busca de una posici¨®n que no afecte a sus intereses de camino a las urnas. Pocos minutos despu¨¦s del discurso, el presidente del PAN, Marko Cort¨¦s, sali¨® a anunciar que analizar¨¢n ¡°con responsabilidad¡± lo anunciado por L¨®pez Obrador y critic¨® al presidente por eludir el asunto m¨¢s grave que atraviesa el pa¨ªs, la inseguridad, como as¨ª fue. Apenas cit¨® el presidente la idea de ¡°penalizar con severidad el delito de extorsi¨®n que ejerce el crimen organizado¡±.

La violencia es la gran asignatura reprobada de este sexenio a la que se agarra la oposici¨®n una y otra vez, como lo hicieron este lunes. Eso y la eliminaci¨®n de los organismos aut¨®nomos, como el INAI, para la transparencia administrativa, la Cofece, de competencia econ¨®mica, y el organismo que regula la energ¨ªa, entre otros, ser¨¢n los escudos que proteger¨¢n a la derecha en su lucha contra un gobierno que pretende agotar el mandato con el mismo br¨ªo de quien lo estuviera empezando. Las negociaciones en las C¨¢maras copar¨¢n la expectaci¨®n del p¨²blico antes de decidir su voto. El peor escenario abre el tel¨®n frente a los aliancistas, que se desayunar¨¢n cada ma?ana con las diatribas de un presidente que ha sabido trocar en acci¨®n legislativa asuntos de campa?a electoral.

El PRI calific¨® de ¡°desprop¨®sito¡± que determinadas reformas, atentatorias, dijeron, ¡°contra las instituciones¡±, se anuncien el d¨ªa de la Constituci¨®n mexicana. Y atac¨® el af¨¢n electoralista del mensaje: ¡°Morena busca enfrascar a la oposici¨®n en una discusi¨®n est¨¦ril y sin rumbo. Saben que no cuentan con los votos para consumar este asalto a la democracia¡±. Los priistas anunciaron sus l¨ªneas rojas: no votar¨¢n contra la desaparici¨®n de los organismos aut¨®nomos, ¡°la debilitaci¨®n¡± del Poder Judicial, asuntos que pueden calar en el electorado, como en su d¨ªa pas¨® con los ataques gubernamentales al INE. ¡°No cuenten con el PRI para destruir al pa¨ªs¡±.

L¨®pez Obrador recurri¨® en la celebraci¨®n de la Constituci¨®n de 1917 a un discurso patri¨®tico, muy del gusto mexicano, por el que circularon todos los pr¨®ceres del pasado, los constituyentes y los m¨¢rtires de la Independencia y la Revoluci¨®n, los hacedores de un M¨¦xico grande que hundieron, dijo el presidente, m¨¢s de 40 a?os de neoliberalismo. En ese marco hist¨®rico situ¨® su propio legado. Obrador se sube al pres¨ªdium de los mexicanos ilustres como art¨ªfice del cambio de mentalidad del pueblo, lo que ¨¦l llama ¡°la revoluci¨®n de las conciencias¡±. ¡°Pero ser¨ªa un error confiarnos y dejar pasar esta oportunidad hist¨®rica para afianzar valores e imprimirle a la Constituci¨®n su car¨¢cter democr¨¢tico y social¡±, dijo. La oportunidad ya ha pasado, en realidad, ahora solo puede confiar en las urnas o en llegar a acuerdos con la oposici¨®n. El mensaje, pues, es electoral. Lo que no se logre en esas C¨¢maras legislativas, tendr¨¢n los ciudadanos solo una v¨ªa para obtenerlo, votando a su sucesora, Claudia Sheinbaum, quien ha garantizado la continuidad ideol¨®gica y pol¨ªtica a todo el que quer¨ªa escucharla. Aqu¨ª cabemos todos, llam¨® Obrador a los votantes: ¡°Ahora son tomados en cuenta los estudiantes, los j¨®venes, las mujeres, los adultos mayores, los ind¨ªgenas, los campesinos, los trabajadores, los artistas, las maestras, maestros, los comerciantes, los peque?os y medianos empresarios¡±, prosigui¨® con guion mitinero.

No hay, sin embargo, ni rastro de ofensivas pol¨ªticas que le puedan traer problemas con sectores sensibles, como el econ¨®mico, menos en tiempo de votaciones. Mencion¨® el presidente la ¡°importante tarea¡± de combatir la desigualdad ¡°con una mejor distribuci¨®n de la riqueza, del ingreso y del presupuesto¡±, pero entre las reformas que envi¨® en la noche al Congreso no figuraba la fiscal, uno de los asuntos m¨¢s clamorosos que queda en el debe de este sexenio. Tampoco hubo alusi¨®n a medidas que ocasionen disgustos de ¨ªndole diplom¨¢tica, o no se expusieron con la intensidad discursiva de que gozaron otras.

Las proclamas del presidente fueron las mismas que han presidido su mandato y las que lleva semanas introduciendo en el debate p¨²blico desde sus conferencias matutinas, levantando las cr¨ªticas de la oposici¨®n, porque consideran que Obrador extralimita su papel ejecutivo para acercarse m¨¢s que peligrosamente a la arena electoral. Llevar sus pol¨ªticas a la Constituci¨®n, en detalles tan menores como la prohibici¨®n de consumir fentanilo o el uso de vapeadores, no puede ser solo una forma de alzarse como un dirigente hist¨®rico, en el olimpo de aquellos a los que admira, puede interpretarse tambi¨¦n como gestos electoralistas o simples se?uelos para llevar a buen puerto las negociaciones.

¡°No se puede gobernar a base de impulsos de una voluntad caprichosa¡±, cit¨® a Ju¨¢rez. No parece capricho lo que impulsa al presidente a plantear estas enormes reformas, m¨¢s bien un disparo muy calculado.

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