M¨¢s de cuatro a?os para encontrar a Jael Monserrat: ¡°Ninguna madre merece recoger los restos de sus hijos en ning¨²n lugar¡±
Jaqueline Palmeros, madre buscadora fundadora del colectivo ¡®Una luz en el camino¡¯ ha encontrado los restos de su hija en el Ajusco, en el sur de Ciudad de M¨¦xico, tras la desaparici¨®n de la joven en 2020


Jaqueline Palmeros fue la mujer que traz¨® el plano de b¨²squeda del lugar en donde intu¨ªa que estaban los restos de su hija Jael Monserrat Palmeros, desaparecida en julio de 2020 en la alcald¨ªa Iztapalapa, en Ciudad de M¨¦xico. Fue ella misma quien encontr¨® la forma para ingresar a las redes sociales de su hija, cuando las autoridades de Ciudad de M¨¦xico le dijeron que no ten¨ªan las herramientas para hacerlo, o cuando perdieron su carpeta de investigaci¨®n y tambi¨¦n cuando se extraviaron videos de c¨¢maras de seguridad que ella hab¨ªa conseguido y que mostraban la ruta del coche al que su hija se subi¨® y del que nunca se volvi¨® a saber. Palmeros, de 42 a?os, ha sido nuevamente la que en noviembre de 2024 encontr¨® en el Ajusco, en el sur de la capital, los restos de su hija, formalmente identificados el pasado 17 de enero: ¡°Buscas queriendo encontrar, pero jam¨¢s te imaginas que t¨² misma vas a encontrar a tu hijo o tu hija. Ninguna madre merece recoger los restos de sus hijos en ning¨²n lugar¡±, dice.
Todav¨ªa est¨¢ en negaci¨®n, asegura. Han pasado solo unos d¨ªas desde que la citaron para encontrarse con la Fiscal General de Justicia de Ciudad de M¨¦xico, Bertha Mar¨ªa Alcalde Luj¨¢n, y que le confirmara que los restos hallados por su colectivo en noviembre pertenec¨ªan a Jael Monserrat. Cuenta que la Fiscal le dijo que reconoc¨ªa su trabajo y su activismo y que le hab¨ªa expresado su respeto y admiraci¨®n, aunque a quien salud¨®, apenas se encontraron, fuera a su acompa?ante y no a ella, en una evidente confusi¨®n.
¡°Todo el tiempo estuve con la esperanza de encontrar a mi hija con vida. Todo desaparecido tiene que ser buscado con presunci¨®n de vida, sobre todo porque hab¨ªamos tenido informaci¨®n de que pod¨ªa haber estado en situaci¨®n de trata, o en otras circunstancias, menos sin vida. Es bien dif¨ªcil¡±, relata Palmeros.
Los estudios de gen¨¦tica, antropolog¨ªa, odontolog¨ªa y criminal¨ªstica realizados por personal de la #FGJCDMX a los elementos ¨®seos localizados el pasado mes de noviembre en el Ajusco, Tlalpan, permitieron establecer que corresponden a la joven Jael Monserrat, quien fue vista por¡ pic.twitter.com/6i4inB0qDu
— Fiscal¨ªa CDMX (@FiscaliaCDMX) January 21, 2025
A Jael Monserrat la citaron en un lugar dos personas que hab¨ªa conocido por su trabajo, en un call center, una mujer y un hombre ¡ªAdriana ¡°N¡± y Miguel ¡°N¡±¡ª el 24 de julio de 2020 en la alcald¨ªa Iztapalapa. M¨¢s tarde, y gracias al registro de varias c¨¢maras ¡ªextraviado por las mismas autoridades a cargo de la investigaci¨®n¡ª se sabe que Jael Monserrat se subi¨® a un coche con ambas personas y desapareci¨® entre Eje 5 y La Viga, dos vialidades ubicadas en el oriente de la capital mexicana. Ten¨ªa 21 a?os, y era la madre de dos peque?os de entonces cuatro y dos a?os de edad.
Palmeros recuerda todas las cosas que polic¨ªas y personas a cargo de la investigaci¨®n le dijeron durante esos primeros d¨ªas en los que acudi¨® a denunciar la desaparici¨®n de su hija. Como la recomendaci¨®n de que desistiera porque ¡°seguramente estaba todav¨ªa de fiesta¡±, o cuando quisieron convencerla de que se trataba de ¡°una desaparici¨®n voluntaria¡±.
Absoluci¨®n de los presuntos culpables
En enero de 2022, Adriana ¡°N¡± y Miguel ¡°N¡±, fueron vinculados a proceso, se?alados por su presunta responsabilidad en la desaparici¨®n de Jael Monserrat. ¡°Todo el tiempo se declaran inocentes, pero Adriana, durante el juicio de vinculaci¨®n, dijo que ella no habr¨ªa sido capaz de hacerle algo tan horrible como le hicieron a ella [Jael Monserrat]¡±, recuerda Palmeros.
Durante un a?o y ocho meses, el hombre y la mujer se?alados estuvieron en prisi¨®n, hasta que en junio de 2024, una jueza argument¨® falta de pruebas y declar¨® para ambos inocencia con libertad absolutoria.

Varios meses despu¨¦s de la desaparici¨®n de Jael Monserrat, Palmeros fue contactada por dos personas que le aseguraron, bajo anonimato, que su hija se hab¨ªa negado a trabajar para un hombre (presuntamente Miguel ¡°N¡±) y que eso hab¨ªa provocado que se la llevaran, ¡°por negarse a hacer lo que le ped¨ªan¡±, recuerda. Tambi¨¦n asegura que, aunque estuvo trabajando solo un par de meses en ese sitio, su hija le coment¨® que aquello parec¨ªa ser ¡ªadem¨¢s de un supuesto call center¡ª un centro de reclutamiento para mujeres j¨®venes y que, adem¨¢s, se rumoraba que se comet¨ªan fraudes de pr¨¦stamos de dinero.
Su hija tambi¨¦n le cont¨® que Adriana ¡°N¡± le hab¨ªa pedido en alguna ocasi¨®n que le recomendara el trabajo a chicas que fueran de preferencia madres solteras, que necesitaran trabajar solo medio turno, entre otras cosas. Al ser cuestionada sobre este lugar, Palmeros dice que dej¨® de funcionar unos meses despu¨¦s de la desaparici¨®n de su hija. Sin embargo, recuerda que Jael Monserrat le cont¨® tambi¨¦n que la empresa ten¨ªa oficinas en Quer¨¦taro, San Luis Potos¨ª y Guadalajara.
¡®Una luz en el camino¡¯
En 2021, unos meses despu¨¦s de la desaparici¨®n de su hija, Palmeros cre¨®, junto con otras cinco mujeres, madres de desaparecidos en Ciudad de M¨¦xico, el colectivo Una luz en el camino. Un grupo que ahora conforman m¨¢s de 50 personas y que han encontrado, en estos a?os de trabajo conjunto, 35 personas, algunas con vida, y tambi¨¦n otras de nacionalidades distintas a la mexicana. Palmeros asegura que, aunque ha cobrado fuerza el colectivo, todav¨ªa quienes lo integran, no tienen a¨²n apoyos suficientes para sostener a sus familias. ¡°O buscas a tus seres queridos o te pones a trabajar¡±, dice. Adem¨¢s, apunta a que dentro de estas familias que conforman el grupo hay 60 ni?os y ni?as en estado de orfandad que no reciben ayuda ni respaldo de nadie.
Palmeros quiere tomarse unos d¨ªas para asimilar el hallazgo que le ha devuelto a su hija, pero que al mismo tiempo le ha confirmado su peor miedo. Dice que no puede abandonar el activismo porque se siente agradecida y en deuda con sus compa?eras.
Asegura que de las cosas que ella puede decirle a la gente, es que se d¨¦ cuenta de que en M¨¦xico se vive una crisis de personas desaparecidas que, de no atenderla tambi¨¦n como sociedad, seguir¨¢ creciendo en los pr¨®ximos a?os. Y asegura que tener fe le ha salvado la vida y le ha permitido seguir adelante: ¡°El gobierno nos roba hasta la identidad, y pens¨¦: aqu¨ª el ¨²nico que me va a ayudar es Dios¡±.
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