Colosio desaf¨ªa a MC

Nadie va a declinar, eso es m¨¢s que obvio. Ni M¨¢ynez dejar¨¢ su candidatura presidencial, que le est¨¢ dando los 15 minutos de celebridad que quiz¨¢ nunca vuelva a tener, ni Alito Moreno, presidente del PRI, va a renunciar al fuero que le garantiza su plurinominal en el Senado, recurso que lo blinda de la eventualidad de ir a la c¨¢rcel.

La atenci¨®n medi¨¢tica que ha recibido el asunto, como si en verdad tal declinaci¨®n fuese posible, tiene que ver m¨¢s con la necesidad de sacudir el aburrimiento que dejan nueve meses de campa?a de facto entre dos candidatas sobre las cuales ya se ha dicho todo.

Y, sin embargo, el an¨¢lisis de la manera en que han reaccionado algunos personajes ayuda a entender lo que nos espera con Movimiento Ciudadano, una organizaci¨®n llamada a desempe?ar un protagonismo creciente en M¨¦xico.

Lo m¨¢s significativo tiene que ver con Luis Donaldo Colosio. Fue ¨¦l quien meti¨® el ruido al insistir, en dos ocasiones estos ¨²ltimos d¨ªas, sobre la necesidad de que el tercer lugar en intenci¨®n de voto decline en favor del segundo para estar en condiciones de competir el pr¨®ximo 2 de junio en contra de Claudia Sheinbaum, clara puntera en la lucha por la presidencia. No mencion¨® a X¨®chitl G¨¢lvez o a Jorge ?lvarez M¨¢ynez por nombre, pero en la pr¨¢ctica constituye un exhorto a M¨¢ynez, su compa?ero de partido, a tirar la toalla en favor de la abanderada del PRI y del PAN. En ninguna encuesta M¨¢ynez, que ronda el 10% de las tendencias en el mejor de los casos, se acerca a X¨®chitl que fluct¨²a entre los 20s y 30s %.

Para efectos de los intereses de Movimiento Ciudadano el planteamiento de Colosio es un desprop¨®sito. Un suicidio en t¨¦rminos t¨¢cticos y estrat¨¦gicos. A largo plazo, MC est¨¢ en la tarea de construirse de cara al ciudadano como la tercera v¨ªa: ni el regreso al pasado que encarnan el PRI y el PAN, ni la pol¨¦mica opci¨®n obradorista del cambio. Por lo dem¨¢s la coyuntura le favorece porque intenta beneficiarse del hartazgo de muchos ciudadanos respecto a los tiempos polarizantes que vivimos. Justo en los debates presidenciales y de la Ciudad de M¨¦xico, sus candidatos han insistido en mostrar a los oyentes la belicosidad de las otras dos fuerzas, enzarzadas en mutuas recriminaciones.

En ese sentido, estos comicios son una oportunidad de oro: MC intenta conseguir 10 o 12% de los votos nacionales. Parece cosa menor, pero en t¨¦rminos pol¨ªticos tendr¨ªa un impacto may¨²sculo. Primero, porque con una cifra similar en las c¨¢maras puede llegar a convertirse en el fiel de la balanza que, en la pr¨¢ctica, decida el triunfo o la derrota de los proyectos de las dos grandes fuerzas pol¨ªticas, particularmente en reformas constitucionales que exigen dos tercios de los votos legislativos. Ni que decir el enorme poder pol¨ªtico que eso representa.

Segundo, porque con una votaci¨®n de entre 10 y 15 %, MC puede dejar atr¨¢s las ligas menores de los partidos morralla y convertirse en una fuerza en s¨ª misma. Si adem¨¢s est¨¢ en la tarea de atraer el voto de las generaciones j¨®venes, eso constituir¨ªa una base importante para las disputas de ma?ana. No es un mal c¨¢lculo. Si Morena resulta seriamente erosionado tras un segundo periodo en el poder, MC conf¨ªa que en 2030 podr¨ªa ser m¨¢s atractivo que PRI y PAN como una alternativa al partido oficial.

En suma, MC no va a renunciar a eso para darle mejores oportunidades a X¨®chitl G¨¢lvez y al PRIAN. Ni siquiera a cambio de las muchas prebendas que estos puedan prometerle en pago a la declinaci¨®n de M¨¢ynez. Se tratar¨ªa de promesas peregrinas, porque tal declinaci¨®n no asegura el triunfo de la oposici¨®n: en este momento ni sumados segundo y tercer lugar alcanzan a Sheinbaum, aunque ciertamente hace m¨¢s competitiva la disputa.

El tema de fondo es la actitud de Colosio. Por joven que sea, no puede ignorar el escenario descrito arriba. Y tampoco podemos atribuirlo a una imprudencia del momento porque lo reiter¨® dos d¨ªas m¨¢s tarde. ?Por qu¨¦ entonces una declaraci¨®n tan contraria a los intereses de su partido pol¨ªtico?

Los m¨¢s esc¨¦pticos interpretar¨¢n tales declaraciones como un mero juego propagand¨ªstico para mantener en M¨¢ynez en portadas de medios y noticieros. Cosa que ha sucedido, pero cuesta trabajo creer que Colosio arriesgue un cent¨ªmetro de su capital pol¨ªtico prest¨¢ndose a la provocaci¨®n.

Otros lo atribuir¨¢n a los roces internos entre los distintos polos de liderazgo que detentan Dante Delgado, el dirigente nacional, los dos gobernadores de MC, Samuel Garc¨ªa y Enrique Alfaro, y el propio Luis Donaldo Colosio, presidente municipal de Monterrey. Algo podr¨ªa haber de eso, pero no explica las razones por las cuales Colosio escogi¨® este asunto para marcar una diferencia.

A mi juicio tendr¨ªa que ver con un c¨¢lculo pol¨ªtico del joven alcalde. Recordemos que Colosio fue la primera carta jugada por la dirigencia de MC para la actual campa?a presidencial. Sin embargo, ¨¦l declin¨® la oferta quiz¨¢ con raz¨®n. Aunque hijo del pol¨ªtico asesinado hace 30 a?os, en realidad comenz¨® su carrera de manera tard¨ªa y asumi¨® que a¨²n no era su momento. Pero nadie ignora que es la gran apuesta de MC para lanzar una candidatura exitosa a la presidencia, por la reverberaci¨®n nacional que arrastra el apellido Colosio.

Lo que ahora est¨¢ haciendo, al hablar de la declinaci¨®n de M¨¢ynez, es un gui?o al PRI y al PAN. Entiende que dentro de seis a?os la ¨²nica manera de vencer a Morena ser¨¢ mediante una candidatura unida; asume que con una oposici¨®n dividida no le alcanzar¨ªa. Sabe que M¨¢ynez no va a renunciar, pero le interesa que los partidos de la Alianza tomen nota de su punto de vista. Es el ¨²nico de los dirigentes de MC que exhorta a la unidad de la oposici¨®n y a ¡°votar sin miedo en contra de la 4T¡±. El resto de los cuadros del partido, incluyendo a M¨¢ynez, parecer¨ªan estar m¨¢s cercanos a Morena que al PRIAN, como bien puede observarse en el desempe?o de sus candidatos en los debates.

En suma, lo que revela la actual pol¨¦mica sobre una declinaci¨®n que no va a suceder es un tema de fondo. Un desajuste significativo entre MC, una fuerza pol¨ªtica que ser¨¢ protagonista en los pr¨®ximos a?os en la relaci¨®n con el gobierno de la 4T y los c¨¢lculos de Colosio, su principal promesa para aspirar a la silla presidencial. Para MC Colosio es una pieza clave, pero una pieza. Para Colosio MC es un veh¨ªculo, pero no el ¨²nico. Intereses mutuos que convergen la mayor parte del tiempo, aunque no siempre, como podemos ver hoy, y quiz¨¢ ma?ana.

@jorgezepedap

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