El camino cuesta arriba de la bicicleta en tiempos de pandemia en Ciudad de M¨¦xico

En el M¨¦xico del siglo XX se usaba la expresi¨®n ¡°pueblo bicicletero¡± para referirse despectivamente a las comunidades que usaban este medio de transporte y a las que el progreso, representado por los autom¨®viles y las grandes carreteras, no hab¨ªa llegado. Frente al hist¨®rico aumento de los contagios de coronavirus y ante el colapso de seis l¨ªneas del Metro tras un incendio en sus oficinas, Ciudad de M¨¦xico ha volteado a ver a la bicicleta como una alternativa de movilidad m¨¢s segura y barata.

¡°Es m¨¢s relevante que nunca abrir espacios para la movilidad ciclista ante el colapso de la red del Metro tras su accidente¡±, indica Bernardo Baranda, director para Latinoam¨¦rica del Instituto de Pol¨ªticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP por sus siglas en ingl¨¦s). ¡°Este momento ser¨¢ crucial para darle peso a otras alternativas al transporte masivo¡±, dice. Ya muchas personas se han bajado de los veh¨ªculos y han desempolvado su bici para hacer los trayectos m¨¢s necesarios. ¡°Agarr¨¦ la bicicleta porque es lo m¨¢s higi¨¦nico, con sana distancia y adem¨¢s es saludable y barato¡±, refiere el empresario Francisco Santamar¨ªa. Un par de meses despu¨¦s de que iniciara la contingencia sanitaria por coronavirus en la capital mexicana, Santamar¨ªa tuvo que recortar operaciones de su negocio de comunicaci¨®n, lo que incluy¨® tambi¨¦n dejar el auto en el garaje y empezar a hacer sus traslados en dos ruedas.

De acuerdo con cifras de la Secretar¨ªa de Movilidad, los viajes han aumentado un 221% desde marzo de 2020, mientras que los viajes en transporte p¨²blico y autom¨®vil particular han descendido hasta un 50%. En junio de este a?o, el Gobierno que encabeza Claudia Sheinbaum habilit¨® 54 kil¨®metros en dos ciclov¨ªas emergentes para atender el creciente uso de la bicicleta, una de ellas, en avenida Insurgentes, la ¨²nica vialidad que cruza la capital de norte a sur. El aumento de los servicios de comida a domicilio mediante aplicaciones tambi¨¦n contribuy¨® a la movilidad no motorizada. ¡°Los repartidores empezaron a usar Insurgentes para conectarse, al ver ese fen¨®meno decidimos hacerla emergente para mejorar la seguridad¡±, refiere en entrevista Andr¨¦s Lajous, secretario de Movilidad.

De un d¨ªa para otro, los automovilistas se encontraron con un carril confinado destinado exclusivamente al transporte no motorizado en dos grandes vialidades. ¡°Yo s¨ª me siento m¨¢s seguro andando en lugares donde hay ciclov¨ªas¡±, refiere Andr¨¦s G¨®mez, un usuario reciente de la bicicleta. ¡°Aunque nunca falta quien te aviente el coche cuando no hay tramos separados¡±, indica el editor de 31 a?os.

Con menos autom¨®viles y m¨¢s ciclistas, los accidentes de tr¨¢nsito tambi¨¦n aumentaron. ¡°La sensaci¨®n de peligro y de riesgo es mayor a pesar de que hay m¨¢s ciclistas, ya que los autom¨®viles se mueven a mayor velocidad¡±, indica Areli Carre¨®n, fundadora de la asociaci¨®n Bicitekas y activista. Hasta septiembre de 2020 se registr¨® la muerte de 16 ciclistas en sucesos de tr¨¢nsito relacionados con la velocidad, m¨¢s del doble que las registradas el a?o anterior.

M¨¢s pedaleo, menos presupuesto

Mientras unos se suben a una bicicleta por la necesidad de trabajar y otros lo hacen como una alternativa saludable de moverse por la ciudad, m¨¢s de 25.000 ciclistas hicieron uso de la ciclov¨ªa en Insurgentes, de acuerdo con el colectivo Cero Emisiones, quienes han pedido que este carril se vuelva permanente. ¡°Yo compr¨¦ mi bici en mayo no solo para moverme, sino tambi¨¦n para dejar de estar encerrado¡±, dice G¨®mez. Tan solo al inicio de la pandemia las ventas de este tipo de veh¨ªculos por internet crecieron 200% en M¨¦xico, mientras que varias tiendas reportaron escasez de refacciones.

Sin embargo, este colectivo apunta que deben de asignarse m¨¢s recursos para que la infraestructura sea definitiva y no de materiales reciclados como el que se coloc¨® para la separaci¨®n de carriles. ¡°Hicimos una petici¨®n al Congreso para que se hiciera una inversi¨®n de 170 millones de pesos para hacer las transformaciones pertinentes y hacerlas permanentes¡±, dice Carre¨®n, integrante de este colectivo.

A finales de a?o, el Congreso de Ciudad de M¨¦xico redujo el presupuesto asignado a la movilidad de peatones y ciclistas. Para 2021, el Fondo P¨²blico de Atenci¨®n al Ciclista y al Peat¨®n tiene contemplado 4,7 millones de pesos (unos 236.000 d¨®lares) en comparaci¨®n con los 45 millones de pesos (2,2 millones de d¨®lares) que se utilizaron el a?o pasado. ¡°Es incongruente que cuando m¨¢s necesitamos alternativas de movilidad con salud, se reduzcan de esa manera los recursos¡±, sentencia Carre¨®n.

Seg¨²n el titular de movilidad capitalina, se est¨¢n analizando los patrones de movilidad en las vialidades donde se construyeron las v¨ªas provisionales. ¡°Parte de la evaluaci¨®n es el costo, pero sobre todo de los patrones de movilidad una vez que la contingencia sanitaria vaya disminuyendo¡±, dice Lajous.

Ciudad de M¨¦xico se ha unido a los millones de personas en el mundo y Latinoam¨¦rica que han decidido pedalear m¨¢s durante la pandemia. Bogot¨¢ construy¨® 80 kil¨®metros de vialidades provisionales y otras ciudades con menor poblaci¨®n como San Jos¨¦ (Costa Rica) o Cuenca (Ecuador) tambi¨¦n implementaron nuevas ciclov¨ªas para atender la movilidad durante la pandemia.

La bicicleta emprende un camino cuesta arriba para volverse una opci¨®n de movilidad permanente. Hasta antes de la pandemia de covid-19, solo 360.000 personas se mov¨ªan con regularidad en este medio, en contraste con los 7,6 millones que usan transporte p¨²blico y los 3,4 millones que se mueven en autom¨®viles, seg¨²n datos del INEGI en 2017. ¡°Se debe replantear la manera en que se configuran las ciudades, porque la mayor¨ªa no usa el auto aunque la ciudad est¨¢ construida para los autos¡±, dice Carre¨®n.

Para Santamar¨ªa, hace falta que haya m¨¢s seguridad en las calles para que la bicicleta se vuelva un medio de transporte consuetudinario. ¡°S¨ª he sentido que mi vida corre peligro andando, lo mejor ser¨ªa que haya m¨¢s seguridad¡±, comenta. Por lo pronto, en el tiempo en que la covid-19 siga siendo el tema central de la capital, este empresario seguir¨¢ usando su casco y recorriendo su camino en dos ruedas.