El multilateralismo es la soluci¨®n

La ciencia ha avanzado a una velocidad impresionante desde que comenz¨® la pesadilla mundial del coronavirus.

Casi a diario nos informan de avances en t¨¦cnicas para probar, tratar y prevenir la covid-19. Est¨¢n en marcha m¨¢s de 100 estudios sobre vacunas en todo el mundo, y los ensayos cl¨ªnicos de posibles tratamientos se est¨¢n haciendo a una escala y una rapidez sin precedentes.

Sin embargo, la financiaci¨®n de esas investigaciones no est¨¢ siendo tan r¨¢pida. Sin ayudas sustanciales y urgentes, no lograremos derrotar la pandemia ni prevenir tragedias futuras.

En estos momentos se necesitan 7.500 millones de euros como fondo inicial para financiar vacunas, tratamientos y pruebas en todo el mundo.

El volumen total de dinero tendr¨¢ que ser mucho mayor, miles y miles de millones, pero lo que se necesita urgentemente hoy es un euro por persona.

Este lunes, 4 de mayo de 2020, se cumplen 125 d¨ªas desde que o¨ªmos hablar por primera vez del virus, y el mundo tiene la oportunidad de unirse y cambiar el curso de la pandemia, con la cumbre de dirigentes mundiales por videoconferencia para recaudar esos fondos tan necesarios.

En medio de la horrible realidad de la covid-19, todos tenemos d¨ªas en los que no nos creemos lo que estamos viviendo. Yo, desde luego.

Aunque yo soy de los pocos que llevamos a?os advirtiendo sobre algo como esto, vivirlo, experimentar su r¨¢pida propagaci¨®n a todos los rincones del mundo y ver su devastador impacto en todos los aspectos de la vida es algo inimaginable.

Creo que la covid-19 se ha convertido en una infecci¨®n humana end¨¦mica. Tenemos que asumir que habr¨¢ oleadas futuras y prepararnos para ellas.

Ahora que algunas regiones en Europa y Norteam¨¦rica est¨¢n empezando a aliviar las restricciones sociales ¡ªreapertura de colegios, tiendas y empresas no esenciales¡ª, es el momento de tener mucha cautela.

En muchos pa¨ªses, entre ellos los que cuentan con los sistemas sanitarios m¨¢s fr¨¢giles y las poblaciones m¨¢s vulnerables, el impacto total del virus sigue creciendo.

No debemos olvidar que todav¨ªa estamos en la cara oculta de esta pandemia; que hace solo cuatro meses que conocemos este virus; que todav¨ªa queda mucho por aprender.

Ahora, por ejemplo, se est¨¢ estudiando si los ni?os, aunque tengan s¨ªntomas m¨¢s leves, pueden ser portadores de la misma carga v¨ªrica. A¨²n no sabemos si eso significa que pueden ser tan contagiosos como los adultos, una cuesti¨®n fundamental para saber si las escuelas pueden reabrir.

Vivir con restricciones sociales es complicado; salir es mucho m¨¢s dif¨ªcil, hay m¨¢s en juego. Si nos equivocamos, la tasa de reproducci¨®n del virus ¡ªvalor R¡ª aumentar¨¢ y habr¨¢ que dar marcha atr¨¢s. Ha ocurrido en Alemania, que ha tenido que actuar r¨¢pidamente.

Si nos equivocamos, habr¨¢ que elegir entre prolongar el confinamiento o contar con que habr¨¢ m¨¢s casos y muertes e incluso consecuencias m¨¢s graves para la salud, la confianza, la desigualdad y la econom¨ªa.

Pero, aunque el confinamiento ayuda a ganar tiempo, no sirve como soluci¨®n a largo plazo, para ning¨²n pa¨ªs ni para el mundo. La soluci¨®n solo puede venir de la capacidad de hacer pruebas, aislar, tratar y prevenir este virus.

El virus de covid-19 sigue siendo un virus para el cual, en la actualidad, no existe prevenci¨®n ni cura probada. Pero la investigaci¨®n m¨¦dica y la ciencia nos dan esperanzas.

Hasta la fecha, solo ha llegado la cuarta parte de los 7.500 millones de euros necesarios en un principio.

La ayuda necesaria solo pueden proporcionarla gobiernos, multinacionales y organizaciones filantr¨®picas. Necesitamos que este dinero empiece a llegar r¨¢pidamente y sin idea de beneficios financieros.

Y, aunque todos los pa¨ªses deben beneficiarse por igual de cualquier avance, las inversiones no pueden ser las mismas. Los que tengan la capacidad necesaria deben dar un paso al frente para ayudar al mundo entero.

Necesitamos financiaci¨®n para que haya muchos equipos de trabajo que aporten distintos enfoques, y debemos garantizar que sea posible hacer llegar esos avances a toda la poblaci¨®n mundial, independientemente de la capacidad de pago de cada pa¨ªs o de d¨®nde se hayan producido esos avances.

Es inconcebible un mundo que tenga que hacer frente a m¨²ltiples oleadas o a epidemias repetidas, adem¨¢s de las repercusiones para la salud, la sociedad y la econom¨ªa global.

El 4 de mayo, en la Cumbre de Respuesta Global al Coronavirus ¡ªauspiciada por la Uni¨®n Europea y los Gobiernos de Francia, Alemania, Italia, Noruega, Arabia Saud¨ª y Reino Unido¡ª, los pa¨ªses deben unirse para poner fin a esta pandemia.

El multilateralismo ofrece una salida, incluso una oportunidad para construir un mundo mejor, m¨¢s equitativo y comprometido con la salud p¨²blica.

Con 1 euro por persona, ese podr¨ªa ser el mayor premio de nuestro tiempo.

Jeremy Farrar es m¨¦dico e investigador especializado en enfermedades infecciosas. Es asesor cient¨ªfico y de salud p¨²blica de la OMS y de los Gobiernos del Reino Unido y Alemania y director de Wellcome Trust.

Traducci¨®n de Mar¨ªa Luisa Rodr¨ªguez Tapia.