Primero, Santa Sof¨ªa
Turqu¨ªa ha pasado de abanderar la idea de una democracia islamista abierta a las minor¨ªas, que aspiraba a integrarse en la UE, a adoptar una deriva autoritaria con pretensiones de liderazgo para el mundo isl¨¢mico
Cuando Huntington public¨® su tesis sobre el ¡°choque de civilizaciones¡±, se desat¨® una oleada de cr¨ªticas y contratesis. Posteriormente, interpretada en el contexto de los atentados de las Torres Gemelas, gener¨® como respuesta la ¡°alianza de civilizaciones¡±, un anhelo de previsi¨®n que a modo de conjuro buscaba anular la profec¨ªa de un enfrentamiento entre Occidente y el mundo isl¨¢mico. La Alianza, declaraci¨®n de buenas intenciones, pero con escasas herramientas a la hora de abordar cuestiones centrales como el estatus de las respectivas minor¨ªas religiosas desde una visi¨®n de reciprocidad, fue liderada por los Gobiernos de Espa?a y Turqu¨ªa con Zapatero y Erdogan a la cabeza.
Mucho han cambiado las cosas desde entonces. La guerra contra el terror ha dado paso a una acumulaci¨®n de conflictos entre los que destaca la guerra comercial y tecnol¨®gica con China. Nacionalismo, populismo, autoritarismo campan a sus anchas. La Am¨¦rica de Trump se bate en el caos, el mundo musulm¨¢n implosiona, Asia emerge triunfante, y en la medida en que China ejerce el sinocentrismo, se ensayan nuevas f¨®rmulas multilaterales. Con Erdogan, Turqu¨ªa ha pasado de abanderar la idea de una democracia islamista abierta a las minor¨ªas jud¨ªas y cristianas, que aspiraba a integrarse en la UE, a adoptar una deriva autoritaria con pretensiones de liderazgo geopol¨ªtico y espiritual para el mundo isl¨¢mico. De ah¨ª la reislamizaci¨®n de Santa Sof¨ªa. El cambio requiere anular el legado secular de Atat¨¹rk y reemplazarlo por una versi¨®n moderna del sultanismo que recupere en el plano simb¨®lico el estatus que tuvo el Imperio otomano con el califato, emblema de la unidad pol¨ªtica y religiosa de la comunidad musulmana.
La reislamizaci¨®n de Santa Sofia tiene, por lo tanto, distintas lecturas que van m¨¢s all¨¢ del pragmatismo pol¨ªtico. Supone un regreso a la era pre-Atat¨¹rk, la era otomana, precisamente cuando en otras partes del planeta se tumban esculturas de significaci¨®n imperialista y colonial. Tampoco es el primer caso: en India la militancia hindutva acab¨® destruyendo la mezquita de Ayodhia en 1992, y en Israel el Gobierno de Netanyahu anunci¨® la anexi¨®n de Samaria y Judea sobre la base de los derechos b¨ªblicos. La decisi¨®n, adem¨¢s, arruina definitivamente el di¨¢logo de civilizaciones. Santa Sof¨ªa celebra la riqueza de una historia compartida por distintas religiones desde un humanismo universal. Env¨ªa tambi¨¦n un claro mensaje de primac¨ªa sobre el legado cristiano occidental. La decisi¨®n, precedida por la reconversi¨®n de otras iglesias en mezquitas, es un gesto de poder en el esp¨ªritu de la Reconquista que anuncia pr¨®ximos triunfos. En un discurso triunfalista Erdogan declar¨® que ¡°la resurrecci¨®n de Santa Sof¨ªa es el arranque del fuego de la esperanza de los musulmanes y todos los oprimidos, perjudicados y explotados¡± que conducir¨¢ a ¡°liberaci¨®n de la mezquita de Al Aqsa¡± entre otros objetivos.
Del choque a la alianza, y regreso a un esp¨ªritu de Reconquista. Predicci¨®n o profec¨ªa, el desenlace augura m¨¢s costes que beneficios.
@evabor3
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