Espa?a: ?por la senda de Catalu?a?

En noviembre de 2003 se eligi¨® a Pasqual Maragall presidente de la Generalitat y form¨® un Gobierno formado por el PSC, ERC e Iniciativa per Catalunya. Ah¨ª se coaligaron unionistas y separatistas, es decir, el agua con el aceite. Fue un desastre, se aprob¨® un in¨²til nuevo Estatuto y empez¨® una deriva hacia el desgobierno y la insurgencia que a¨²n no ha terminado.

Tengo la impresi¨®n que el actual Gobierno de Pedro S¨¢nchez ¡ªPSOE y Podemos, tambi¨¦n agua y aceite¡ª va por la misma senda. As¨ª lo indican algunas coincidencias, en especial el deterioro de las instituciones que empez¨® en la misma moci¨®n de censura de 2018, apoyada por una coalici¨®n incoherente que a¨²n sigue siendo el sost¨¦n, cuando es imprescindible, del Presidente del Gobierno. Veamos.

Cuando desde los partidos independentistas o soberanistas (¨¦stos ¨²ltimos, Comunes-Podemos) se pide el indulto de los l¨ªderes catalanes condenados o huidos de la justicia, se insin¨²a una h¨¢bil maniobra del Gobierno: no concederemos el indulto que se est¨¢ tramitando porque el procedimiento es lento y, dado que no hay arrepentimiento, es dif¨ªcil otorgarlo.

Pero podemos optar por otra v¨ªa: cambiar el tipo penal del delito de sedici¨®n, rebajar las penas y, en virtud de la retroactividad permitida en art. 9.3 de la Constituci¨®n, ponerlos de patitas en la calle o dejar que retornen en olor de multitudes. Todo ello no est¨¢ decidido, pero se ve venir.

Un ejemplo similar es lo decidido ayer: se modifica la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial en aquello que afecta a la elecci¨®n de sus miembros, pero no tramit¨¢ndola mediante un proyecto de ley del Gobierno ¡ªque exige informes del Consejo de Estado, Consejo Fiscal y del mismo Consejo General del Poder Judicial¡ª sino mediante una proposici¨®n de ley, firmada por los grupos parlamentarios del PSOE y Podemos, que no exige tan engorrosos y lentos tr¨¢mites. La cuesti¨®n es eludir los controles para seguir instalado en el Gobierno.

Hay dos formas de entender el Derecho: a) como mero instrumento de poder para ejercer el mando; y b) como l¨ªmite a los poderes p¨²blicos para que estos respeten la libertad y la igualdad de los ciudadanos garantizadas en las leyes.

Me temo que para el actual Gobierno el Derecho es un mero instrumento para conseguir objetivos que poco tienen que ver con la libertad y la igualdad sino con mantenerse en el poder. Para ello se deben hacer trampillas, buscar resquicios legales para escapar a los controles.

En Catalu?a se conoce bien eso, hace a?os que se practica. Si hacer trampas no es conforme a la moral, quiz¨¢s debi¨¦ramos empezar a hablar de la inferioridad moral de la (supuesta, claro) izquierda. No nos suceda como en Catalu?a.