Hospital bandera
Madrid persigue una pol¨ªtica sanitaria de gestos pero desatiende asuntos b¨¢sicos
La inauguraci¨®n del hospital Enfermera Isabel Zendal en Madrid se convirti¨® ayer en el paradigma de las contradicciones de la pol¨ªtica sanitaria de la comunidad, caracterizada por un gran esfuerzo por demostrar capacidad de respuesta y dotar de ¨¦pica a las decisiones sobre la pandemia, mientras la red sanitaria p¨²blica sufre las consecuencias de una falta cr¨®nica de recursos e inversiones. Pese a sus esfuerzos, la presidenta Isabel D¨ªaz Ayuso no pudo disipar las dudas que existen sobre la funcionalidad actual del hospital ni sobre el destino futuro de unas instalaciones en las que se han invertido m¨¢s de 100 millones de euros.
El edificio se ha levantado en poco m¨¢s de 100 d¨ªas, lo que permite exhibirlo como un hito capaz de emular la gesta de la ciudad de Wuhan, que construy¨® un hospital en tiempo r¨¦cord. Pero el esfuerzo queda empa?ado por las serias dudas sobre su eficacia real. Se trata de un modelo de hospital monogr¨¢fico que ha quedado obsoleto respecto de los requerimientos de la medicina actual. El dise?o en forma de pabellones recuerda las estructuras hospitalarias del siglo XIX, que ahora solo tiene alg¨²n sentido en situaciones de emergencia y aun as¨ª son discutibles, pues esa misma funci¨®n puede lograrse con hospitales de campa?a como los que se habilitaron en Ifema o junto a grandes hospitales en la primera ola. Esta es una construcci¨®n permanente, y cuando la pandemia pase se plantear¨¢ la dificultad de decidir qu¨¦ usos darle teniendo en cuenta que no responde a ninguna planificaci¨®n previa. Reconvertirlo en hospital general requerir¨¢ una elevada inversi¨®n adicional.
De las m¨¢s de 1.000 camas proyectadas en su versi¨®n de centro monogr¨¢fico, de momento solo se pondr¨¢n en servicio 240 de agudos y 48 de cuidados intensivos e intermedios. Abrir¨¢ pues con un tercio de su capacidad y con personal que en su mayor parte ser¨¢ detra¨ªdo de otros centros. En un contexto de escasez de recursos, en el que la red sanitaria p¨²blica acusa la falta de inversiones en los ¨²ltimos 10 a?os, las decisiones de gasto deben ponderarse muy bien. En medicina no solo es importante demostrar que una decisi¨®n presenta un buen balance entre el coste y el beneficio, sino tambi¨¦n desde el punto de vista del coste/oportunidad. Es decir, plantearse si esa misma inversi¨®n tendr¨ªa mejores y mayores rendimientos en caso de destinarse a otras finalidades. Y tambi¨¦n desde este punto de vista, el proyecto estrella de D¨ªaz Ayuso plantea serias dudas entre quienes consideran que ese dinero hubiera rendido mucho m¨¢s reforzando las plantillas y los medios de la actual red de hospitales y de la debilitada atenci¨®n primaria. Madrid se ha esforzado en crear macroestructuras, pero fracas¨® rotundamente en activar a tiempo una red de rastreadores que habr¨ªa sido muy ¨²til. Estas circunstancias agravan las dudas ante una pol¨ªtica centrada en gestos ¨¦picos y fallida en la gesti¨®n ordinaria.
Por lo dem¨¢s, la inauguraci¨®n se produce en un momento en el que las medidas adoptadas para atajar la pandemia est¨¢n dando resultados y la Comunidad de Madrid ha pasado de tener los peores registros a una situaci¨®n entre las m¨¢s llevaderas en Espa?a. Hay que reconocer este avance. Pero la situaci¨®n es fr¨¢gil, el riesgo de repuntes elevado y, al margen de grandes gestos, Madrid debe consolidar la base de una red sanitaria p¨²blica que deber¨ªa haber atendido mejor a sus ciudadanos.
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