Una nueva oportunidad para Siria

La Administraci¨®n Trump ejerci¨® una confusa pol¨ªtica en Siria cuyo acto final fue el anuncio de la salida de las tropas norteamericanas que apoyaban los esfuerzos kurdos contra el Estado Isl¨¢mico. James Mattis, veterano general con amplio conocimiento de la zona gracias a su participaci¨®n en la guerra del Golfo, Afganist¨¢n e Irak, present¨® su renuncia como secretario de Defensa al d¨ªa siguiente. La llegada del presidente Biden al poder en Estados Unidos ha hecho albergar la esperanza de que es posible variar el rumbo.

El pasado mes de enero el Centro Carter, un think-tank dem¨®crata y de gran prestigio que ha supervisado decenas de elecciones desde 1989 y ha participado en la mediaci¨®n de numerosos conflictos, public¨® un breve documento con el esbozo de una nueva pol¨ªtica hacia Siria. Unos d¨ªas despu¨¦s, Jeffrey Feltman, cuyo nombre suena con fuerza en los ¨²ltimos d¨ªas para convertirse en el nuevo enviado especial del presidente Biden para Siria, firmaba un art¨ªculo para otro think-tank de referencia, Brookings Institution, titulado ¡°Estados Unidos necesita una nueva pol¨ªtica hacia Siria¡±.

Esta nueva orientaci¨®n parte de varias premisas. Siria se encuentra en una situaci¨®n humanitaria desesperada, las sanciones est¨¢n contribuyendo a una espiral de crisis econ¨®mica sin final que podr¨ªa conducir a convertir al pa¨ªs, o parte de ¨¦l, en un Estado fallido y como consecuencia de lo anterior existe la posibilidad de un nuevo ¨¦xodo masivo de refugiados que afecte tanto a los pa¨ªses lim¨ªtrofes como a los que sufrieron la ola de refugiados en 2015 incluidos muchos pa¨ªses europeos.

El impasse diplom¨¢tico actual est¨¢ asociado a la pol¨ªtica del ¡°all for all¡±, es decir un ¡°o todo o nada¡±, que el Gobierno del presidente El Asad, con el apoyo de Rusia e Ir¨¢n, se niegan a aceptar por lo que, siempre dentro del respeto al esp¨ªritu de la Resoluci¨®n del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas 2254 de 2015, parece necesario apostar por una nueva v¨ªa m¨¢s realista.

La interesante propuesta del Centro Carter establece siete tracks o v¨ªas de negociaci¨®n independientes pero interconectadas. Esto no supone abandonar las posturas maximalistas actuales, sino posponer los asuntos m¨¢s complejos para una fase posterior y abordar cuestiones de mayor urgencia para evitar que el pa¨ªs caiga en un pozo sin fondo del que ser¨ªa mucho m¨¢s dif¨ªcil salir y de consecuencias imprevisibles en una zona tan vol¨¢til.

Los siete tracks enumerados en el documento ser¨ªan: reforma pol¨ªtica, prisioneros pol¨ªticos, retorno de los refugiados, acceso humanitario, alto el fuego en la regi¨®n de Idlib, salida de las fuerzas extranjeras y armas qu¨ªmicas. En cada uno hay definidas medidas de fomento de la confianza que el r¨¦gimen sirio debe cumplir ¡ªfundamentales para el avance y ¨¦xito del proceso¡ª.

Este proceso de negociaci¨®n comprender¨ªa tres fases, cada una con una serie de pasos verificables acompa?ados de incentivos progresivamente m¨¢s importantes para dotar al cumplimiento de los acuerdos de mayor fuerza vinculante para las partes. Esos incentivos, en la primera fase, ser¨ªan de diversa ¨ªndole; diplom¨¢ticos, como la reapertura de algunas embajadas en Damasco y la presencia diplom¨¢tica permanente en la capital siria. Incentivos relativos a la reconstrucci¨®n del pa¨ªs, con especial ¨¦nfasis en las infraestructuras esenciales y finalmente ¡ªasunto m¨¢s delicado¡ª en materia de sanciones, que se ir¨ªan levantando progresivamente con el fin de aliviar los efectos m¨¢s perniciosos para la poblaci¨®n.

El conflicto sirio est¨¢ a punto de cumplir diez a?os en los que hemos sido testigos de algunas de las mayores atrocidades que muchos de nosotros podemos recordar. Mi propia experiencia al frente de la Embajada de Espa?a en Siria durante algunos de los a?os m¨¢s complicados de la guerra, entre 2012 y 2015, me permiten entender tanto la dificultad que encierra cualquier soluci¨®n negociada para muchas de las v¨ªctimas y sus familiares, como el escarpado camino que un plan de esta naturaleza encontrar¨¢ a nivel pol¨ªtico en muchos de los actores presentes y necesarios para llevarlo a buen t¨¦rmino. Ahora bien, una nueva pol¨ªtica que nos saque del actual impasse ¡ªy este plan podr¨ªa ser un buen punto de partida¡ª tendr¨ªa muchos m¨¢s efectos beneficiosos que nocivos tanto en t¨¦rminos geoestrat¨¦gicos, como de seguridad y por supuesto desde un punto de vista humanitario. Pero, sobre todo, creo que despu¨¦s de tanto sufrimiento Siria y los sirios merecen un nuevo esfuerzo y una nueva oportunidad.

Santiago Jim¨¦nez Mart¨ªn es diplom¨¢tico. @santiagoVPINT