El Ministerio de Educaci¨®n nos ofende

Educaci¨®n planea un vuelco hacia un aprendizaje menos memor¨ªstico. ?Pero de verdad alguien cree que en Espa?a queda alg¨²n profesor que prioriza alg¨²n tipo de aprendizaje memor¨ªstico? Por favor, se?ores del Ministerio de Educaci¨®n, ?pueden ustedes dejar de cortar y pegar lo mismo una y otra vez publicando unos documentos obsoletos y dejar de ofender a todos los profesores de este pa¨ªs? Estamos intentando hacer una ense?anza constructiva, lo cual resulta dif¨ªcil cuando llegan alumnos al instituto que pr¨¢cticamente no saben ni leer ni escribir. Queremos contagiar literatura y ganas de leer, que entiendan y apliquen el funcionamiento de la sintaxis e ilusionarles para mejorar sus redactados. Bueno, mea culpa, una vez que di ingl¨¦s, obligu¨¦ un poco a que se aprendieran los verbos irregulares de memoria, ?lo siento! Era solo para que pudieran escribir frases en pasado.

In¨¦s Mu?oz Suescun. Salou (Tarragona)

Mi voto en Madrid

En Madrid, mi voto depender¨¢ de c¨®mo me levante el d¨ªa de las elecciones. Si me levanto como el aficionado humorista que soy, votar¨¦ al Partido Popular; D¨ªaz Ayuso me garantiza dos a?os m¨¢s de ocurrencias delirantes. Si amanezco ominoso, intransigente y oliendo a naftalina, coger¨¦ la papeleta de Vox. En caso de despertar con dudas existenciales, el elegido ser¨¢ Ciudadanos. Votar¨¦ al PSOE si al abrir el ojo veo que predomina mi lado progresista perezoso. En cambio, si mi atenci¨®n se centra en los servicios p¨²blicos, el voto se lo llevar¨¢ M¨¢s Madrid. Por ¨²ltimo, si esa ma?ana me siento sobre todo ut¨®pico, votar¨¦ a Unidas Podemos.

Enrique Chicote Serna. Arganda del Rey (Madrid)

Listas cerradas

Antonio Mu?oz Molina (Qu¨¦ puede hacerse ahora, suplemento Ideas del 28 de marzo) tiene raz¨®n en decir que hay que ¡°votar a quienes no siembren la discordia ni est¨¦n manchados de corrupci¨®n ni de mentira¡±. Pero para poder hacerlo hace falta tener listas electorales abiertas y no cerradas como ahora. Las listas cerradas para la elecci¨®n de los diputados (aunque no en el caso del Senado) transfieren un poder excesivo a las direcciones del partido, que, de este modo, se aseguran la obediencia aduladora de sus propios pol¨ªticos. A diferencia de lo que ocurre con los de listas abiertas, los electores votan a un grupo de candidatos y no a pol¨ªticos concretos. Los candidatos salen elegidos conforme al orden en que han sido previamente colocados en la lista. Estas listas tienden a reprimir las corrientes independientes dentro de sus filas. Como reza la c¨¦lebre frase que se dice pronunci¨® Alfonso Guerra: ¡°El que se mueve no sale en la foto¡±.

William Chislett. Madrid

BLM

S¨ªmbolo de los tiempos: que George Floyd, el m¨¢rtir (que lo fue) del racismo (que es real) de nuestra sociedad fuera un drogadicto.

Fernando Schwartz. Madrid

No mienten

Enmascarados, casi todos. Algunos insolentes y soberbios. Todos en estado de amnesia inducida. As¨ª, con esa desfachatez y desparpajo, comparecen ante uno de los poderes del Estado los pr¨®ceres de ese partido del que usted me habla. Son lo que parecen ser. Visto as¨ª, no creo que mientan.

Santiago Melc¨®n P¨¦rez. Sevilla

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