Generalitat sometida
A quien no viva el d¨ªa a d¨ªa de la degradaci¨®n p¨²blica catalana podr¨¢ sorprenderle que un ¡®indepe¡¯ reclame que nadie pretenda tutelar al sistema de autogobierno y que dirija ese clamor a otros ¡®indepes¡¯
El autogobierno de Catalu?a se plasma y enra¨ªza en la Generalitat. Y esta cristaliza en tres instituciones, tres: Parlamento, presidente y Gobierno. Todo lo que venga en erosionarlas, mina el autogobierno, que es un sistema de autonom¨ªa y una voluntad de ejercerla y expandirla.
Oportunamente, el president en funciones y aspirante a president en plenitud, Pere Aragon¨¨s, clam¨®, exigi¨® o implor¨® ¡ªel acento es libre¡ª a sus socios/rivales de Junts/Waterloo, en su segundo intento de investidura, a que respeten esa tripleta: porque ostenta una ¡°responsabilidad indelegable¡± y debe ejercerse ¡°sin sustituciones ni tutelas¡±. A quien no viva el d¨ªa a d¨ªa de la degradaci¨®n p¨²blica catalana podr¨¢ sorprenderle que un indepe reclame que nadie pretenda tutelar al sistema de autogobierno y que dirija ese clamor a otros indepes. Es as¨ª. La en¨¦sima estaci¨®n de nuestro G¨®lgota.
Pero, ?no se exageran esos intentos de ¡°tutela¡±? Veamos los textos. Seg¨²n el programa electoral de Junts ¡°el Consell per la Rep¨²blica debe liderar pol¨ªticamente el movimiento independentista¡± y lo primero que deber¨¢ hacer el nuevo Parlament es reconocer a ese club ¡°como Autoridad Nacional [as¨ª, con may¨²sculas], apoder¨¢ndolo para liderar el movimiento¡±.
O como traduce la musa de Waterloo, Elsa Artadi, conviene una ¡°bifurcaci¨®n¡±: un organismo, la Generalitat, ¡°m¨¢s de gesti¨®n¡± y ¡°otro¡± que encarna ¡°la estrategia¡±. Hete aqu¨ª c¨®mo se rebaja la Generalitat a mera diputaci¨®n, consejo comarcal, o alcald¨ªa de barrio. Y se encumbra al club que encabeza el fugitivo de Waterloo en fragua de la estrategia: por otra parte, no catalana en puridad, sino solo secesionista, lo ¨²nico que cuenta.
Es decir, un organismo privado, no electo, adscrito a legislaci¨®n for¨¢nea y carente de transparencia, mandato ni obligaci¨®n de rendir cuentas, y de tenebrosa financiaci¨®n, ser¨¢, seg¨²n Junts, quien imparta ¨®rdenes a la Generalitat electa.
Pero es que adem¨¢s, en su pacto bilateral, la Esquerra de Aragon¨¨s y la antisist¨¦mica CUP tambi¨¦n ¡°se comprometen¡± a alumbrar otro monstruo: a ¡°generar una mesa de direcci¨®n estrat¨¦gica¡±, con partidos amigos y la cohorte de organizaciones activistas que nadie ha tenido a bien elegir, para ¡°trazar las l¨ªneas estrat¨¦gicas¡± y preparar el ¡°nuevo embate democr¨¢tico con el Estado¡±. Anda ya, nois. Lo malo no es ya que excluyan de todo eso a la mitad de la ciudadan¨ªa. Lo peor es que ni siquiera se respetan a s¨ª mismos como partidos votados por la otra mitad.
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