De Merkel a Casado
La canciller alemana no ha hecho ni una concesi¨®n a Alternativa para Alemania, que aprenda el PP, que sigue emborronando su curr¨ªculum con flirteos permanentes con Vox y dando cuerda a parte de su discurso
Abandonen toda esperanza. El PP, instalado en su estrategia de confrontaci¨®n, seguir¨¢ contraviniendo los principios que tanto predica al tiempo que seguir¨¢ legitimando a la extrema derecha asumiendo parte de su discurso y negociando restricciones de derechos y libertades para obtener su apoyo, como hemos visto estos d¨ªas en Madrid, donde las proclamas de libertad de ...
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Abandonen toda esperanza. El PP, instalado en su estrategia de confrontaci¨®n, seguir¨¢ contraviniendo los principios que tanto predica al tiempo que seguir¨¢ legitimando a la extrema derecha asumiendo parte de su discurso y negociando restricciones de derechos y libertades para obtener su apoyo, como hemos visto estos d¨ªas en Madrid, donde las proclamas de libertad de Isabel D¨ªaz Ayuso parecen no alcanzar a los colectivos LGTBI, o en las campa?as contra el derecho al aborto, que est¨¢n dando pie a penosas exhibiciones de sadismo machista.
Estos d¨ªas la prensa hace balance del legado de Angela Merkel, que deja la canciller¨ªa alemana despu¨¦s de 16 a?os. Y si en algo hay amplio reconocimiento es en su insobornable actitud ante la extrema derecha. Ni una sola concesi¨®n a Alternativa para Alemania, el partido neonazi, a la que ha parado los pies siempre que ha sido necesario sin c¨¢lculos electorales ni concesiones mezquinas. Una firmeza que no le ha impedido ser reelegida hasta que ella ha dicho basta. Que aprenda el PP, que sigue emborronando su curr¨ªculum con flirteos permanentes con Vox y dando cuerda a parte de su discurso, con el argumento de recuperar as¨ª el electorado que se fug¨®. ?Todav¨ªa no se han enterado de que fue la corrupci¨®n la que marc¨® el fin de ciclo del PP? No basta con una grosera radicalizaci¨®n y exhibici¨®n de lenguaje macho para aspirar a recuperar terreno. Pero parece que a Casado no le alcanza para plantear un programa alternativo y prefiere jugar al ruido y a las tretas legales.
El respeto a los dem¨¢s y el cumplimiento de la ley, principios b¨¢sicos de la democracia que a menudo proclama el PP, parece que son de per¨ªmetro variable para la derecha: como si el PP tuviese bula en defensa de sus intereses de grupo. Llevan tres a?os neg¨¢ndose a cumplir con el calendario legal de renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial. Incluso Europa exige ya que se cumpla la normativa. Pero sigue bloqueando el procedimiento por la sencilla y mezquina raz¨®n de que no quiere perder las complicidades que tiene en el gobierno de los jueces. No hay salida. El camino es claro: renu¨¦vese el Consejo y despu¨¦s que ponga el PP en marcha los procedimientos pertinentes para el largo proceso de reforma legal que pretende, y que el Parlamento decida. Pero no. Lo que quiere Casado es seguir en la provisionalidad del Poder Judicial, contando con obtener una mayor¨ªa parlamentaria dentro de dos a?os que le permita renovar, entonces s¨ª, el Consejo con la confianza de seguir sinti¨¦ndolo como favorable. Esta es la idea de la derecha de la divisi¨®n de poderes. Otro regalo a los o¨ªdos de Vox.
De Merkel a Casado, dos derechas bien distintas, de la defensa de las instituciones democr¨¢ticas al irresponsable jugueteo con la extrema derecha.