Volar Ciudadanos, disolver Podemos
La nueva pol¨ªtica, qu¨¦ iron¨ªa, va a caracterizarse por la desaparici¨®n de los partidos nacidos en la nueva pol¨ªtica
Si los gestos pol¨ªticos cotizaran en las casas de apuestas, hoy se pagar¨ªa poco por un adelanto electoral. Demasiado previsible. Los anuncios de un cheque de 400 boniatos para el medio mill¨®n de j¨®venes que el pr¨®ximo a?o se incorporan al censo electoral, horas despu¨¦s del bono mensual de 250 para vivienda, sugieren que se hace sonar el tam-tam de la tribu convocando a leva. El horizonte electoral no parece inmediato, pero los tambores s¨ª que se oyen. Hay movimientos de rearme en las grandes fuerzas ¡ªconvenci¨®n del PP, congreso del PSOE¡ª y no es raro que resurja la literatura del retorno al bipartidismo, sin duda sue?o h¨²medo de esas dos grandes fuerzas que se han alternado en el poder desde 1982. Pero nadie podr¨¢ reprocharles que aspiren a disfrutar de victorias en escenarios simplificados. Antes se le podr¨ªa reprochar a las fuerzas de la nueva pol¨ªtica que hayan dilapidado caudales formidables en tan pocos a?os.
En Unidas Podemos sufren el efecto socio menor de coalici¨®n: hay estudios, como el an¨¢lisis de 219 elecciones en 28 pa¨ªses europeos entre 1972 y 2017 firmado por Kl¨¹ver&Spoon, que constatan la p¨¦rdida significativa de voto respecto al socio mayoritario porque el cumplimiento de sus objetivos se ve limitado. De ah¨ª que Podemos marque territorio a veces hasta lo chusco en socios de gabinete: ya sea groseramente con la luz o la vivienda, o disput¨¢ndose medallas como el bono cultural o el bono inmobiliario... El desplome de Podemos en los sondeos es dram¨¢tico, y el plan ahora pasa por diluirlo en una plataforma que no sea ¡°suma de partidos ni de egos¡±. De momento, en las redes se bromea con JxYolanda o M¨¢s Yolanda, a cinco minutos de Yolandemos, lo que no est¨¢ mal para un supuesto proceso de transici¨®n desde el hiperliderazgo fallido de Pablo Iglesias al soft Yolanda D¨ªaz, cuya militancia en el Partido Comunista no le impide manejarse con un aire pulcro de socialdem¨®crata n¨®rdica.
En Ciudadanos, la situaci¨®n es m¨¢s cr¨ªtica a corto plazo, casi desesperada, ya que podr¨ªan verse como fuerza extraparlamentaria de no frenar la sangr¨ªa. Parad¨®jicamente su espacio no est¨¢ ocupado, pero la marca sigue en ca¨ªda. De ah¨ª que su mise-en-sc¨¨ne ya no sea como Ciudadanos sino, de un tiempo a esta parte, como liberales. El proyecto parece abocado a rematar una voladura controlada de la marca minimizando los da?os en la implosi¨®n. Claro que el proceso de rebranding puede ser progresivo, al modo can¨®nico de la cerveza ?guila: en los noventa, ?guila mimetiza primero el logo de Amstel, despu¨¦s pasa a ser ?guila Amstel, conservando su origen, despu¨¦s fue Amstel ?guila en una metamorfosis de arriba-abajo s¨®lo aparentemente insustancial, para quedar al fin como Amstel despu¨¦s de una d¨¦cada larga. Claro que el proceso de liberales, que tiene prestigio europeo y el atractivo de ser la ¨²nica alternativa a los pactos con los extremos populistas, deber¨¢ ser mucho m¨¢s r¨¢pido.
La nueva pol¨ªtica, qu¨¦ iron¨ªa, va a caracterizarse por la desaparici¨®n de los partidos de la nueva pol¨ªtica: Podemos y Ciudadanos. Ahora est¨¢ por ver cu¨¢nto sobrevive de esos proyectos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.