Whitechapel
Un d¨ªa, Jack el Destripador comunic¨® a la Polic¨ªa que lo dejaba. Cuando sali¨® de prisi¨®n, muchos le vieron como un tipo valiente que hab¨ªa luchado contra la prostituci¨®n en el barrio
Triunfales proclamas festejan el fin de ETA: pol¨ªticos que nos explican c¨®mo consiguieron el desestimiento de la banda, v¨ªctimas que charlan con los verdugos y les preparan rape a la plancha, aquellos mediadores internacionales de Aiete que vuelven recordando sus gratas jornadas ociosas y la buena mesa, en fin menos los muertos sube al escenario todo el mundo. Quedan flecos malolientes por recortar (j¨®venes del PP y Vox hostilizados en la calle, aislamiento de c...
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Triunfales proclamas festejan el fin de ETA: pol¨ªticos que nos explican c¨®mo consiguieron el desestimiento de la banda, v¨ªctimas que charlan con los verdugos y les preparan rape a la plancha, aquellos mediadores internacionales de Aiete que vuelven recordando sus gratas jornadas ociosas y la buena mesa, en fin menos los muertos sube al escenario todo el mundo. Quedan flecos malolientes por recortar (j¨®venes del PP y Vox hostilizados en la calle, aislamiento de constitucionalistas pero no de herederos del terrorismo, planes para el arrinconamiento educativo del castellano, homenajes a los etarras que han cumplido condena...). EH Bildu no padece ninguna reticencia pol¨ªtica pese a no condenar el terrorismo sino que es ya decisiva en el Gobierno del Estado. Lo oportuno ser¨ªa dejarse de sensibler¨ªas o an¨¦cdotas personales y tratar de bucear en el foso s¨¦ptico ideol¨®gico. Por eso tiene tanto valor el libro Odiar para ser. Nacionalismo vasco: resentimiento e identidad (ed. Almuzara) de Luis Haramburu Altuna. Para ir m¨¢s all¨¢ de las apariencias...
Sucedi¨® en Whitechapel. Jack el Destripador aterrorizaba las noches del barrio asesinando mujeres indefensas. La Polic¨ªa multiplicaba sus patrullas mientras el vecindario se atrincheraba en sus casas. Algunos audaces vigilaban por su cuenta, acosando al asesino. Un d¨ªa, Jack comunic¨® a la Polic¨ªa que lo dejaba. ?No m¨¢s muertes! Reconoc¨ªa que quiz¨¢ se hab¨ªa pasado un poco en su campa?a de moralizaci¨®n. Hubo voces que ped¨ªan un castigo ejemplar, pero el culpable s¨®lo sufri¨® un periodo de encarcelamiento. Cuando sali¨® de prisi¨®n, muchos le vieron como un tipo valiente que hab¨ªa luchado contra la prostituci¨®n en el barrio. ?l segu¨ªa pensando de las golfas lo mismo que antes, aunque ya sin violencia. Las ¨²ltimas noticias son que se presenta a la alcald¨ªa con buenas perspectivas de voto...