En la carrera para liderar el veh¨ªculo el¨¦ctrico, China tambi¨¦n es la primera
El gigante asi¨¢tico no solo concentra una buena parte de la producci¨®n mundial de los autom¨®viles enchufables, sino que, a¨²n m¨¢s importante, controla el suministro de los componentes de las bater¨ªas
A medida que la transici¨®n verde despega mundialmente, la adopci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos se ha convertido en una pieza fundamental de dicha estrategia, y no tanto porque los autom¨®viles sean la primera fuente de emisiones. La industria y las cadenas de producci¨®n son responsables de al menos la mitad de las emisiones globales mientras que a los autom¨®viles apenas se atribuye un 12% de las mismas. El protagonismo de este sector en la transici¨®n verde se debe m¨¢s bi...
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A medida que la transici¨®n verde despega mundialmente, la adopci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos se ha convertido en una pieza fundamental de dicha estrategia, y no tanto porque los autom¨®viles sean la primera fuente de emisiones. La industria y las cadenas de producci¨®n son responsables de al menos la mitad de las emisiones globales mientras que a los autom¨®viles apenas se atribuye un 12% de las mismas. El protagonismo de este sector en la transici¨®n verde se debe m¨¢s bien a que ofrece una soluci¨®n comercial y t¨¦cnicamente factible, como son los veh¨ªculos el¨¦ctricos, para reducir emisiones y cumplir as¨ª las metas establecidas mientras se gana tiempo en sectores donde la tecnolog¨ªa no est¨¢ a¨²n lo suficientemente desarrollada para reducir emisiones a un coste razonable. Por ¨²ltimo, el sector de los veh¨ªculos el¨¦ctricos es una gran oportunidad industrial, no solo para las empresas y pa¨ªses que tradicionalmente produc¨ªan autom¨®viles sino para muchos otros. De hecho, la clave en la carrera para liderar este sector no es para nada la misma que para los autom¨®viles tradicionales y este es el gran reto. Las empresas m¨¢s exitosas en la fabricaci¨®n de veh¨ªculos el¨¦ctricos o bien no exist¨ªan, como es el caso paradigm¨¢tico de Tesla, o bien provienen de sectores muy diferentes como es el caso de Foxconn, una de las mayores empresas del mundo en componentes el¨¦ctricos que se ha embarcado en la producci¨®n de coches el¨¦ctricos.
La Uni¨®n Europea ¡ªel primer gigante econ¨®mico en tomar medidas de peso ante el reto del cambio clim¨¢tico¡ª fue la primera en incentivar la demanda de autom¨®viles sostenibles, pero en menor media en producirlos, al menos no los completamente el¨¦ctricos, con una gran apuesta por el modelo h¨ªbrido, probablemente por los intereses de las empresas automovilistas europeas existentes. En China, en cambio, la apuesta ha sido claramente por el coche completamente el¨¦ctrico, tanto por el lado de la demanda como de la producci¨®n. En este sentido, los subsidios se han concentrado en los productores ¡ªy menos en los consumidores¡ª para incentivar la inversi¨®n en investigaci¨®n y desarrollo que hasta la fecha ha sido la variable m¨¢s determinante para el ¨¦xito de las empresas productoras de veh¨ªculos electr¨®nicos, con Tesla como mejor ejemplo.
La realidad es que el crecimiento de este mercado no ha hecho m¨¢s que empezar. As¨ª, se espera que las ventas de autom¨®viles el¨¦ctricos pasen de representar el 4% de las ventas totales de autos en 2020 al 70% en 2040, con China como principal mercado, seguido de Europa, mientras que el resto de Asia deber¨ªa llegar con fuerza a partir de 2025. De hecho, la adopci¨®n de coches el¨¦ctricos en el resto de Asia ha sido lenta, con solo el 3% de las ventas totales. El principal motivo del retraso estriba en el muy limitado apoyo gubernamental, excepto en Corea del Sur. Pero esto tambi¨¦n significa oportunidades de crecimiento masivo, ya que Asia, excluida China, representa el 20% del mercado mundial de autom¨®viles tradicionales. Los productores de veh¨ªculos el¨¦ctricos en China, que ya acumulan el 40% del mercado mundial, se encuentran en una posici¨®n envidiable para beneficiarse del fuerte crecimiento esperado en el resto del mercado asi¨¢tico gracias a la firma de acuerdos comerciales regionales. Como si esto no fuera poco, la producci¨®n del coraz¨®n de los coches el¨¦ctricos, las bater¨ªas, que representan m¨¢s del 40% del coste total, tambi¨¦n se concentra en Asia, entre Corea del Sur, Jap¨®n y China, pero es de nuevo Pek¨ªn quien lleva la delantera en los componentes de bater¨ªas, despu¨¦s de una larga lucha por el dominio del suministro de componentes con Jap¨®n. As¨ª, la cuota de mercado de China para componentes de bater¨ªas para veh¨ªculos el¨¦ctricos aument¨® del 43% en 2014 al 60% en 2020 gracias al control del suministro de nuevos materiales, como litio, cobalto y n¨ªquel, cuyos precios han crecido de manera desorbitada en los ¨²ltimos a?os.
A medida que los fabricantes de veh¨ªculos el¨¦ctricos aumentan la oferta para satisfacer la creciente demanda, los riesgos geopol¨ªticos emergen claramente. La creciente preocupaci¨®n de muchos gobiernos por la seguridad de la cadena de suministro no puede m¨¢s que aumentar en el ¨¢mbito de los veh¨ªculos el¨¦ctricos dado el dominio de China en los componentes de bater¨ªas. Ante su importancia para la lucha contra el cambio clim¨¢tico, los componentes para bater¨ªas podr¨ªan convertirse f¨¢cilmente en otro cuello de botella en la cadena de suministro global, como lo son ahora los semiconductores. La diferencia es que en estos ¨²ltimos China continental est¨¢ intentando reducir su retraso respecto a Estados Unidos o incluso Taiw¨¢n, mientras que en los componentes de bater¨ªas el¨¦ctricas China lleva claramente la delantera.
En resumen, en la carrera hacia el dominio del sector de veh¨ªculos el¨¦ctricos, China est¨¢ por delante en la demanda ¡ªahora por la de sus propios consumidores y en breve por la del resto de Asia¡ª, pero tambi¨¦n en la oferta, puesto que no solo concentra una buena parte de la producci¨®n mundial de autom¨®viles sino, lo que es m¨¢s importante, controla los componentes de bater¨ªas. Ante esta realidad, m¨¢s vale que los pa¨ªses europeos que se han beneficiado de la posici¨®n de liderazgo de Europa en el sector automovil¨ªstico, entre los que se encuentra Espa?a, se pongan las ¡°pilas¡± empezando a producirlas y a asegurarse el suministro de sus componentes.