La Iglesia ante la pederastia
Las v¨ªctimas cuestionan la imparcialidad de la comisi¨®n que va a investigar los abusos y tratar de esclarecer la verdad
La Iglesia cat¨®lica espa?ola ha dado en las ¨²ltimas semanas pasos significativos que implican una rectificaci¨®n en su postura sobre los casos de pederastia en su seno. Ha pasado de negar la naturaleza y la dimensi¨®n del problema a reunirse por primera vez con las v¨ªctimas, pedir perd¨®n y tomar iniciativas para investigar lo sucedido. El presidente de la Conferencia Episcopal Espa?ola, el cardenal Juan Jos¨¦ Omella, ha reconocido que la reacci¨®n ha sido lenta y ha pedido disculpas por la falta de sensibilidad y de escucha hacia quienes denunciaron abusos. Todo esto supone un importante giro que sintoniza a la Iglesia espa?ola con las exigencias del papa Francisco en el abordaje de este espinoso asunto.
Los frutos de este giro, sin embargo, depender¨¢n de la capacidad que tenga la Conferencia Episcopal para disciplinar a los obispos que hasta ahora se han mostrado recalcitrantes. Se trata de un ¨®rgano colegiado sin poder de decisi¨®n ejecutiva sobre las di¨®cesis. Cada uno de los obispos tiene plena autoridad y autonom¨ªa de gesti¨®n en su jurisdicci¨®n, lo que hasta ahora se ha revelado como un inmenso obst¨¢culo para que puedan avanzar las investigaciones. La emprendida por este diario ha constatado que hasta una treintena de obispos han encubierto o silenciado casos de abusos. Despu¨¦s de insistir durante a?os en que eran unos pocos hechos aislados, a principios de marzo la Iglesia reconoci¨® 506 diligencias por pederastia en 80 a?os. En ese momento, la investigaci¨®n de este diario ya recog¨ªa 611 casos. En todo este tiempo, ni se ha seguido una pol¨ªtica de notificaci¨®n sistem¨¢tica de los casos conocidos a la Fiscal¨ªa ni se ha investigado por negligencia a los obispos encubridores.
Estos antecedentes pesan como una losa sobre la principal medida adoptada: el encargo de una auditoria sobre los abusos al despacho de abogados Cremades & Calvo-Sotelo. El hecho de que el consejero delegado de ese bufete est¨¦ vinculado al Opus Dei es considerado por la mayor parte de las asociaciones de v¨ªctimas como un elemento que pone en cuesti¨®n la capacidad de imparcialidad de la comisi¨®n. En el vecino Portugal, la Iglesia encarg¨® esta misma tarea al psiquiatra especializado en infancia y adolescencia Pedro Strecht, que atendi¨® a los abusados en el esc¨¢ndalo de la Casa P¨ªa. Los primeros pasos del bufete Cremades para recabar datos tampoco han sido considerados adecuados por parte de las v¨ªctimas. Sin una clara voluntad de transparencia de todos los obispos y sin la colaboraci¨®n de las v¨ªctimas, dif¨ªcilmente podr¨¢ esta comisi¨®n cumplir el objetivo de esclarecer la verdad.
La auditor¨ªa que promueve Cremades trabajar¨¢ en paralelo a la comisi¨®n que tiene que crear el defensor del pueblo, ?ngel Gabilondo, por encargo del Congreso de los Diputados. La iniciativa recibi¨® el apoyo de todos los grupos parlamentarios, a excepci¨®n de Vox, por lo que cuenta con el respaldo de una abrumadora mayor¨ªa de los representantes de la ciudadan¨ªa. Que la Iglesia haya creado su propia auditor¨ªa no deber¨ªa ser excusa para que la Conferencia Episcopal y las diferentes di¨®cesis no colaboren con la comisi¨®n que el Defensor del Pueblo est¨¢ creando. El grado de transparencia y colaboraci¨®n con el Defensor del Pueblo mostrar¨¢ la credibilidad de la Iglesia en el prop¨®sito de enmienda que proclama.
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