?Un examen selectivo para acceder a la Universidad?

Sacar un 10 en Selectividad ya no es la aspiraci¨®n o la recompensa de los alumnos m¨¢s brillantes; casi se puede decir que los estudiantes de ahora lo consideran un derecho. Los ex¨¢menes de todas las asignaturas tienen que ser asequibles o, de lo contrario, se considera un ataque a su leg¨ªtima ambici¨®n. Nos solidarizamos con los estudiantes que han tenido que enfrentarse a un examen de Matem¨¢ticas demasiado dif¨ªcil o aceptamos con normalidad que existan cuatro opciones de temas de Historia de Espa?a y que los chicos s¨®lo tengan que estudiarse la mitad de esa asignatura. Tal vez se trata de una prueba obsoleta, carente de sentido en este mundo en el que lo que se potencia en los alumnos es el desarrollo de competencias. Desde luego, no merece la pena invertir tiempo y recursos en unas pruebas de acceso a la Universidad para ordenar a los estudiantes en un rango de notas entre el 12.5 y el 14. Quiz¨¢ por eso cambiaron su denominaci¨®n a EvAU porque lo de Selectividad ha dejado de ser realista.

Celia Maya D¨ªaz. Sevilla

Inviolabilidad real

La mayor¨ªa de los ciudadanos creemos que el rey no puede ser inviolable si comete delitos en el ¨¢mbito privado fuera de su actuaci¨®n como jefe del Estado. No entender¨ªamos que no pudiera ser juzgado si violase a una menor o robase un banco. Los letrados del Congreso opinan lo contrario, y el PSOE, el PP y Vox se amparan en esa opini¨®n para no acometer un cambio constitucional que aclarase de una vez esta importante cuesti¨®n. Ser¨ªa bueno y pertinente que Felipe VI se pronunciase con claridad sobre este asunto. Facilitar¨ªa mucho la cuesti¨®n.

Alejandro Fern¨¢ndez. Majadahonda (Madrid)

Campa?a en feria

La campa?a electoral andaluza ha coincidido con varias de las ferias con mayor arraigo sure?o. Obviamente, los ciudadanos, despu¨¦s del tenaz encierro, nos hemos incorporado a ellas con todo el ¨¢nimo que cada uno ha sido capaz de aportar; a nadie le amarga un dulce. Mientras tanto, los candidatos se han hecho abanderados de la peineta, del caballo, de la sevillana, del clavel, del fino... en fin, de todo junto y a la vez. ?Y ahora? Pues ahora, se?oras y se?ores cabezas de lista: se nos acab¨® la feria. Ahora queda una Andaluc¨ªa at¨®nita por la imagen que han dado de ella en estos d¨ªas. Una Andaluc¨ªa tremenda a pesar de todo. Madre m¨ªa, cuanta pandereta o papeleta o lo que sea.

Aurora Montes Quesada. Granada

Hombres feministas

Leyendo el art¨ªculo de Estefan¨ªa Molina del 16 de junio, recuerdo a mi padre, Alejandro Alonso. Era uno de esos hombres sobre los que ella escribe: los hombres que s¨ª aman a las mujeres. En mi infancia, nos llevaba de excursi¨®n a chicas y chicos, sin distinci¨®n, en bicicleta o andando, incluso alguna vez en borrico, a ba?arnos al r¨ªo o a buscar restos arqueol¨®gicos en el pueblo donde pas¨¢bamos los veranos. Con 17 a?os, me busc¨® una residencia en Londres para que pudiera aprender ingl¨¦s. Mientras estudiaba Ciencias Qu¨ªmicas, me consigui¨® una estancia de cuatro meses en un laboratorio en Inglaterra. Y, cuando a¨²n no ¨¦ramos conscientes del perjuicio del tabaco, me regalaba las marcas de moda. Eran los a?os sesenta y mi padre, que hab¨ªa nacido en 1914, ya era feminista. Gracias, pap¨¢.

Carmen Alonso N¨²?ez. Madrid