F¨²tbol: derechos equiparados
La selecci¨®n femenina logra corregir una discriminaci¨®n hist¨®rica en relaci¨®n con sus compa?eros masculinos
El desaliento prematuro es la peor condici¨®n del deporte de competici¨®n. Las futbolistas lo saben porque su hist¨®rica invisibilidad ha ido corrigi¨¦ndose lentamente en los ¨²ltimos a?os hasta lograr sacar del silencio tambi¨¦n la desigualdad de sus condiciones laborales. La firma de un convenio de m¨ªnimos para la Liga de f¨²tbol en 2020 fue un paso. Otro importante ha sido el que ha dado la Real Federaci¨®n Espa?ola de F¨²tbol (RFEF) para igualar los porcentajes de las primas que obtienen las selecciones femenina y masculina: no es la panacea, pero supone el primer aviso de la necesidad de una regulaci¨®n que equipare las condiciones b¨¢sicas del mundo del f¨²tbol en ambos casos. El acuerdo se anunci¨®, por parte de los responsables federativos, como un ¡°paso hist¨®rico¡±, y lo es ante la evidencia de una negociaci¨®n muy larga y las condiciones de m¨¢xima precariedad de partida. Pero es solo el principio del camino. Junto al presidente de la Federaci¨®n, Luis Rubiales, comparecieron las jugadoras Patri Guijarro, Irene Paredes y Alexia Putellas, adem¨¢s de Amanda Guti¨¦rrez, abogada de FutPro, primer sindicato dedicado exclusivamente a los equipos femeninos de f¨²tbol y parte relevante del acuerdo, porque fue quien llev¨® la voz de la negociaci¨®n a propuesta de las futbolistas.
A partir de ahora y durante al menos cinco a?os, tiempo de duraci¨®n del pacto, las selecciones femenina y masculina cobrar¨¢n el mismo porcentaje en los premios y patrocinios que reparten tanto la UEFA como la FIFA, adem¨¢s de equipararse las primas por amistosos y algunas otras condiciones de trabajo. El problema, o la gran diferencia, est¨¢ en el dinero que estos organismos distribuyen entre los pa¨ªses participantes en sus torneos, relacionado con los ingresos que obtienen en esos eventos. Mientras que la UEFA pagar¨¢ 16 millones de euros este verano en la Euro femenina entre las selecciones que la jugar¨¢n (el doble que en 2017), la competici¨®n masculina de 2021 lleg¨® a un reparto de 371 millones. Es decir, ellos se llevaron 23 veces m¨¢s dinero que el que se embolsar¨¢n ellas. Televisiones, taquillas y patrocinadores suman ingentes cantidades por los torneos donde los hombres participan, mientras que las cifras son mucho m¨¢s modestas en el caso de las mujeres porque sus audiencias y seguidores suelen ser mucho menores.
Cabe preguntarse, sin embargo, si UEFA y FIFA no podr¨ªan, o no deber¨ªan, establecer mecanismos correctores para que la diferencia entre ellos y ellas no resultara tan aguda. La evidencia hoy es la disparidad de audiencias que atraen las competiciones masculinas y femeninas, pero es l¨®gico que entre las demandas de las futbolistas haya estado que la Federaci¨®n sea m¨¢s activa en la b¨²squeda de patrocinios y que promueva que las invitadas a representar a la selecci¨®n no sean siempre los mismos nombres. En rueda de prensa, Paredes, capitana de La Roja, dijo que la Federaci¨®n demostraba ¡°con hechos su inter¨¦s de seguir empujando a nuestra selecci¨®n absoluta¡±. Uno de esos hechos fue mejorar ¡°las situaciones que van m¨¢s all¨¢ de las primas, como los viajes y los desplazamientos¡±, seg¨²n la abogada de FutPro. Resulta un tanto incre¨ªble que hasta 2022 las mujeres de la selecci¨®n de f¨²tbol espa?ola se trasladasen en condiciones distintas por el mundo que los hombres, siendo los dos equipos de la Federaci¨®n. El acuerdo hist¨®rico llega algo tarde y todav¨ªa con demasiada letra peque?a.
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