La adaptaci¨®n de Macron
El presidente franc¨¦s ha logrado encontrar una salida legislativa v¨¢lida tras la nueva correlaci¨®n de fuerzas en la Asamblea
El parlamentarismo se aprende andando, como la democracia, y eso es lo que le est¨¢ pasando al presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, tras el rev¨¦s que sufri¨® en las legislativas de junio. Durante su primer quinquenio en el palacio del El¨ªseo, entre 2017 y 2022, se acostumbr¨® a gobernar con un rodillo parlamentario. En las legislativas, celebradas poco despu¨¦s de ...
El parlamentarismo se aprende andando, como la democracia, y eso es lo que le est¨¢ pasando al presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, tras el rev¨¦s que sufri¨® en las legislativas de junio. Durante su primer quinquenio en el palacio del El¨ªseo, entre 2017 y 2022, se acostumbr¨® a gobernar con un rodillo parlamentario. En las legislativas, celebradas poco despu¨¦s de la reelecci¨®n de Macron en las presidenciales, los macronistas ganaron pero quedaron lejos de la mayor¨ªa absoluta. Saltaron las alarmas.
Pero un primer balance permite afirmar que ni el caos se ha adue?ado de la pol¨ªtica francesa, ni el pa¨ªs se ha vuelto ingobernable, ni Macron tiene por qu¨¦ ser un presidente irrelevante en lo que queda de su segundo y ¨²ltimo mandato. En la primera sesi¨®n de la nueva Asamblea Nacional se vieron golpes de efecto y teatro parlamentario, salidas de tono e invectivas, pero tambi¨¦n debates serios y negociaciones que permitieron a la bancada gubernamental adoptar las tres primeras leyes del nuevo quinquenio: un plan ambicioso para proteger el poder adquisitivo de los franceses ante la inflaci¨®n y la crisis econ¨®mica derivadas de la invasi¨®n rusa de Ucrania, una correcci¨®n de los presupuestos para financiar ese plan y el fin de las medidas de excepci¨®n por la pandemia. Para lograrlo se apoy¨® en Los Republicanos, el partido de la derecha tradicional, que podr¨ªa convertirse en muleta eficaz del macronismo.
Los beneficios del nuevo tablero pol¨ªtico franc¨¦s son evidentes: m¨¢s deliberaci¨®n, m¨¢s parlamentarismo, m¨¢s democracia en un Parlamento que representa con mayor fidelidad que el anterior la realidad de una parte del pa¨ªs profundamente descontento con las ¨¦lites y el sistema y tentada por el voto extremo. El problema de la nueva Asamblea no es la par¨¢lisis: Macron encontrar¨¢ probablemente el modo de aprobar leyes. El problema, y lo que le diferencia de su vecino del Norte (Alemania) e incluso del del Sur (Espa?a), es que en Francia la ¨²nica alternativa al poder se encuentra en los m¨¢rgenes del sistema: los dos grupos m¨¢s fuertes de la oposici¨®n son la extrema derecha de Reagrupamiento Nacional y la izquierda euroesc¨¦ptica y anticapitalista de La Francia Insumisa, al frente de una alianza heterog¨¦nea que integra a formaciones m¨¢s moderadas como el disminuido Partido Socialista.
Para Macron, lo dif¨ªcil empieza ahora. Los nuevos presupuestos, la explosiva reforma de las pensiones o una nueva legislaci¨®n migratoria, impulsada por el ala derecha de su grupo, ser¨¢n huesos mucho m¨¢s duros que las leyes de este verano. Est¨¢ por ver si los compromisos con la derecha servir¨ªan para estos proyectos o si el presidente podr¨¢ buscar alianzas puntuales con el centroizquierda. Y es una inc¨®gnita si su propio campo mantendr¨¢ la unidad ante las diferencias ideol¨®gicas y la competici¨®n por sucederle en 2027. El presidente dispone en todo caso de la herramienta de la disoluci¨®n parlamentaria y la convocatoria de nuevas elecciones. Vienen tiempos complicados en Europa, sometida al desaf¨ªo de la guerra de Putin, la amenaza de un invierno de restricciones energ¨¦ticas y el empuje de una extrema derecha m¨¢s disciplinada. La solidez y la estabilidad no deben ser en absoluto incompatibles con un Parlamento m¨¢s poderoso y vibrante.