Irene Montero, las mentes sucias y los juicios ama?ados

Twitter lleva la friolera de tres d¨ªas (m¨¢s de 180.000 tuits) discutiendo si Espa?a tiene una ministra pederasta o, al menos, simpatizante. Una nueva manipulaci¨®n en las redes de un v¨ªdeo con declaraciones de Irene Montero ha provocado que la derecha pida su dimisi¨®n, que Vox se querelle contra ella por ¡°corrupci¨®n de menores¡± y que los tuiteros se partan la cara para atacarla o defenderla.

Mi¨¦rcoles, d¨ªa de autos. La titular de Igualdad comparece en la comisi¨®n ¨ªdem del Congreso. La diputada de Vox Lourdes M¨¦ndez arranca fuerte: niega ¡°absolutamente¡± que se discrimine al colectivo LGTBI; acusa a la ministra de ¡°incitar a los menores a que transiten al otro g¨¦nero¡±, de ¡°conseguir el desequilibrio de los m¨¢s peque?os¡± y de llevar a beb¨¦s ¡°al matadero¡±. Se detiene especialmente en la ley del aborto y critica que los padres ¡°no tengan nada que decir¡± si su hija decide abortar, ¡°atentar contra otro ser humano¡±.

En su turno de r¨¦plica, Montero explica: ¡°Si una mujer no puede decidir sobre su propio cuerpo, no decide sobre su proyecto de vida. Lo deciden por ella y eso limita el ejercicio de otros muchos derechos. Por eso esta nueva ley del aborto es una ley de derechos sexuales y reproductivos no solamente para garantizar el acceso efectivo a la interrupci¨®n voluntaria del embarazo, sino para hablar de educaci¨®n sexual, por ejemplo, que es un derecho de los ni?os y de las ni?as independientemente de qui¨¦nes sean sus familias. Porque todos los ni?os, las ni?as y les ni?es de este pa¨ªs tienen derecho a conocer su propio cuerpo, a saber que ning¨²n adulto puede tocar su cuerpo si ellos no quieren y que eso es una forma de violencia. Tienen derecho a conocer que pueden amar o tener relaciones sexuales con quien les d¨¦ la gana, basadas, eso s¨ª, en el consentimiento¡±.

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La r¨¦plica de Irene Montero a Lourdes M¨¦ndez

Pero lo que llega al Gran Tribunal de Amateurs, Twitter, es un extracto de su intervenci¨®n donde se omite intencionadamente el comienzo. El ministerio aclara que cuando habla de ¡°relaciones sexuales basadas en el consentimiento¡±, Montero se refiere a menores de entre 16 y 17 a?os. Ya es tarde. El v¨ªdeo manipulado triunfa en las redes sociales y, al olor de la hoguera, pol¨ªticos de la oposici¨®n acuden raudos a echar m¨¢s le?a al fuego y escandalizarse m¨¢s que ninguno acusando a la ministra de Igualdad, madre, de fomentar la pederastia.

La ¨²ltima vez que pas¨® algo parecido con un v¨ªdeo de Montero, algunos diputados de Vox pidieron disculpas al destaparse la manipulaci¨®n. De momento, la nueva falsa pol¨¦mica les ha servido para aplacar otra, de las internas, de las inc¨®modas: el enfrentamiento, ya a cara de perro, con Macarena Olona, a quien se le ha ense?ado ¡°el fin de camino¡± en el partido ultra.

Cuando ya Twitter empezaba a atisbar el enga?o sobre las palabras de la ministra, un reportero de la ¨®rbita de Vox intent¨® ampliar el ruido sobre el enemigo, despistando la atenci¨®n sobre otras cosas: ¡°?Se arrepiente de haber hecho apolog¨ªa de la pedofilia tras decir que cualquier ni?o puede tener relaciones sexuales con adultos?¡±, pregunt¨® a la ministra en los pasillos del Congreso. Montero hizo, a su vez, un pen¨²ltimo intento por aclarar lo obvio, su intenci¨®n de que ¡°la educaci¨®n sexual¡± permita a los ni?os ¡°en el futuro¡± tener relaciones sexuales libres y sanas.