Historia de dos colegios mayores
No todos los colegios mayores son iguales. Los centros mixtos son mucho m¨¢s abiertos tanto ideol¨®gica como sexualmente que los segregados por sexos
A¨²n recuerdo mi primer d¨ªa en el Colegio Mayor Universitario Chaminade, a principios de septiembre de 2011. Fui desde M¨¢laga a Madrid en coche con mi padre, un trayecto que hice nervios¨ªsimo. Entr¨¦ en el Chami con una tienda de campa?a y lo primero que vi fue a unos hippies en monociclo, que me saludaron alegremente. Todo el mundo parec¨ªa conocerse, as¨ª que pas¨¦ un rato en mi habitaci¨®n pensando que hab¨ªa llegado demasiado tarde para hacer amigos. Me equivoqu¨¦: baj¨¦ al porche y esa mi...
A¨²n recuerdo mi primer d¨ªa en el Colegio Mayor Universitario Chaminade, a principios de septiembre de 2011. Fui desde M¨¢laga a Madrid en coche con mi padre, un trayecto que hice nervios¨ªsimo. Entr¨¦ en el Chami con una tienda de campa?a y lo primero que vi fue a unos hippies en monociclo, que me saludaron alegremente. Todo el mundo parec¨ªa conocerse, as¨ª que pas¨¦ un rato en mi habitaci¨®n pensando que hab¨ªa llegado demasiado tarde para hacer amigos. Me equivoqu¨¦: baj¨¦ al porche y esa misma noche conoc¨ª a algunos de los que se convertir¨ªan con el paso de los a?os en mis mejores amigos. Fuimos al parque a beber y todo el mundo se hac¨ªa el interesante: o ve¨ªas cine franc¨¦s o no hab¨ªa nada que hacer. A m¨ª me hab¨ªan contado que el Chami era famoso porque sus colegiales y colegialas se tiraban el rollo; era verdad. Lo que no sab¨ªa es que por la noche nos visitar¨ªan los de los colegios masculinos. El grito m¨¢s t¨ªpico, que nosotros celebr¨¢bamos, era ¡°Chami, maric¨®n¡±; el segundo era el Cara al Sol.
Cuando Vox comenz¨® a ser un partido exitoso, durante los primeros meses de 2019, yo hab¨ªa abandonado Madrid y estaba desconectado de mi etapa universitaria. El acto que organiz¨® Vox en el Teatro Barcel¨® con el objetivo de atraer j¨®venes universitarios, ¡°Ca?as por Espa?a¡±, me record¨® a ese Madrid del que nunca fui parte y a esa M¨¢laga pija que abandon¨¦ con mi grupo de amigos cuando empezamos la universidad. En 2011 la mayor¨ªa de mis conocidos de M¨¢laga se fueron a colegios masculinos o femeninos, lo que cre¨® una distancia entre nosotros. Ellos se sent¨ªan muy orgullosos de estar en colegios mayores en los que no pod¨ªan dormir en sus habitaciones con nadie; ellas se mostraban conformes con vivir en lugares donde ten¨ªan que volver antes de las diez de la noche a riesgo de quedarse tiradas en la calle. La mayor¨ªa se hicieron, o quiz¨¢s lo eran ya sin que yo me hubiera dado cuenta, muy de derechas. Cuando volv¨ªa a M¨¢laga, sent¨ªa que los que se hab¨ªan ido a los colegios masculinos y femeninos de Madrid en realidad se hab¨ªan ido a otro planeta.
Lo incre¨ªble es que sea en 2022 cuando se ha problematizado por primera vez el machismo de los colegios mayores masculinos: nadie que haya pasado un tiempo por la Ciudad Universitaria de Madrid se puede sorprender de que desde el El¨ªas Ahuja se gritara as¨ª a sus vecinas, ni de que hubiera chicas que salieran luego a defenderlos. La reacci¨®n de muchas personas en este entorno ha sido parecida a la de Juan Soto Ivars en El Confidencial: no ha sido para tanto, no deja de ser un rito que tiene que ser entendido. La pregunta es si tambi¨¦n justificar¨¢n as¨ª las novatadas que cada a?o sufren muchos de los estudiantes que van a Madrid desde el resto de Espa?a. Aunque toda la atenci¨®n est¨¢ puesta en los colegios mayores masculinos, los colegios mayores femeninos son casi id¨¦nticos. ?O es que en algunos de estos colegios no insultan a las novatas ni someten al ostracismo a las que no est¨¢n dispuestas a pasar por las humillantes novatadas?
El v¨ªdeo del El¨ªas Ahuja es la punta del iceberg: si se vieran im¨¢genes de lo que ocurre durante las novatadas, los colegios mayores masculinos se cerrar¨ªan inmediatamente. Centrarse en los j¨®venes que salen en el v¨ªdeo, que no dejan de tener entre 18 y 20 a?os y a¨²n tienen tiempo para cambiar, es un error: lo importante es explicar c¨®mo puede ocurrir algo as¨ª hoy en d¨ªa. Yo no era una persona valiente cuando llegu¨¦ a Madrid. De haber acabado en un colegio masculino, es probable que hubiera sido uno de los que abr¨ªan la ventana en el v¨ªdeo y uno m¨¢s de los que hubiera seguido el ciclo de sufrir y luego hacer novatadas: habr¨ªa sido un marciano para la versi¨®n de m¨ª que fue a un colegio mixto. Hay que tener mucho valor para oponerse al ambiente dominante de los colegios masculinos, donde la vida para los que no siguen la norma no es f¨¢cil. Por eso, la primera soluci¨®n es conseguir que se acabe de una vez por todas con las novatadas y que todos los colegios mayores se hagan mixtos, como han hecho el Cisneros y el Mendel. A medio plazo, las direcciones de los colegios masculinos y femeninos tienen la dif¨ªcil tarea de terminar con la cultura machista y clasista que existe en estos centros.
No todos los colegios mayores son iguales. En 2011, hab¨ªa una gran diferencia entre los colegios mixtos como el Chami, que sol¨ªan ser de izquierdas y sin novatadas, y los masculinos y femeninos, que eran de derechas. M¨¢s all¨¢ de las ideolog¨ªas, que diez a?os m¨¢s tarde quiz¨¢s no sirvan tanto para distinguir a todos los colegios mixtos, lo mejor que se puede decir del Chami era que es un lugar libre: era un sitio en el que los j¨®venes pod¨ªan opinar lo que quisieran, ser como deseaban y descubrir las distintas versiones de ellos mismos. Como en el resto de la sociedad espa?ola, en el Chami tambi¨¦n hab¨ªa personas con actitudes machistas, pero eran contestadas desde dentro. Como en todos los lugares donde hay gente tan joven, hab¨ªa personas con m¨¢s o menos luces; el tema era que pudieran madurar desde el respeto a los dem¨¢s. El ambiente en el Chami, y en la mayor¨ªa de los colegios mixtos, era mucho m¨¢s abierto tanto ideol¨®gica como sexualmente que en los colegios masculinos y femeninos. Se hac¨ªa todo lo posible porque fuera un lugar donde cada uno de nosotros pudi¨¦ramos desarrollar nuestra personalidad (el lema no oficial del Chami podr¨ªa ser que es el lugar donde uno puede desarrollar su leg¨ªtima rareza). A m¨ª, y creo que hablo por mucha gente, pasar por el Chami fue la mejor experiencia de mi etapa universitaria.
Los tiempos han cambiado para bien y hoy en d¨ªa casi todos nos escandalizamos por v¨ªdeos como el del El¨ªas Ahuja. El problema es m¨¢s profundo de lo que parece: muchas ¨¦lites pol¨ªticas de la derecha espa?ola han pasado por estos colegios mayores masculinos donde se insulta a las mujeres y se humilla a los novatos. Por eso, que Alberto N¨²?ez Feij¨®o haya criticado abiertamente el v¨ªdeo es una buena noticia, ya que quiz¨¢s a sus predecesores les hubiera costado m¨¢s. Sin embargo, la pregunta de c¨®mo se puede acabar con estas actitudes en los j¨®venes sigue latente. Despu¨¦s del l¨®gico esc¨¢ndalo que se ha montado, es el momento de dar un paso m¨¢s. Empecemos por apostar por los colegios mayores mixtos, aumentar la educaci¨®n sexual y acabar de una ver por todas con las novatadas.