Carmena y la soberbia de no corregir
La exalcaldesa de Madrid se convierte en tendencia en Twitter gracias a una entrevista en la que opina sin ambages sobre la ¡®ley del s¨ª es s¨ª¡¯, entre otros aspectos de la actualidad pol¨ªtica y judicial
Manuela Carmena suele dar titulares. No porque la exalcaldesa de Madrid busque el esc¨¢ndalo o la provocaci¨®n (m¨¢s bien su estilo parece el contrario), sino porque expresa sus opiniones con naturalidad, sin ambages. En ocasiones, mucha gente se identifica con su sentido com¨²n y el tenor de sus palabras. Algo as¨ª ha sucedido con el titular que abr¨ªa la entrevista publicada por este peri¨®dico el pasado mi¨¦rcoles: ¡°No corregir la ley del s¨ª es s¨ª es soberbia infantil¡±. A primera hora de la ma?ana ya se hab¨ªa convertido en tendencia en Twitter. La jueza jubilada a?ade que ¡°el BOE est¨¢ lleno de rectificaciones¡± y si ¡°se produce un efecto que no quer¨ªas, se modifica¡±.
?Qu¨¦ problema hay? ?Por qu¨¦ si esta ley de garant¨ªa de la libertad sexual, en tantos aspectos valiente y necesaria, provoca un efecto indeseado, como la revisi¨®n de penas, no se corrige? Son preguntas que se plantean cuando sale el tema a colaci¨®n. ?Tan dif¨ªcil es rectificar? ?Es m¨¢s importante evitar que la derecha se arrogue una victoria? Hace poco, en una comida, un amigo manifestaba su rabia por el conteo de excarcelaciones: ¡°m¨¢s madera para los ataques incendiaros de la extrema derecha¡± (no solo) contra el Gobierno, y en particular, contra los ¡°podemitas¡± y la ministra de Igualdad, Irene Montero. Coincidi¨® en el peri¨®dico la entrevista y la informaci¨®n de que las v¨ªctimas afectadas por las excarcelaciones a partir de la entrada en vigor de la norma podr¨¢n pedir dispositivos telem¨¢ticos de protecci¨®n. ?No ser¨ªa m¨¢s sencillo modificar la norma?
Solo por formular la pregunta anterior puedes ser calificado de facha o colaboracionista, como se refleja en el magma tuitero. Los apoyos a la sensatez de la exalcaldesa rivalizan con las cr¨ªticas contra ella por seguir el juego a la derecha y por pasadas pugnas pol¨ªticas. Hay que cerrar filas o arrimar el ascua a tu sardina. Este ¨²ltimo es el caso de la portavoz parlamentaria Cuca Gamarra, que incluso se muestra ecum¨¦nica: ¡°Esto no va de derecha e izquierda. Ya que no nos escuchan a nosotros, a ver si hacen caso a Carmena y rectifican¡±. O el del portavoz popular en el Senado, Javier Maroto: ¡°Nunca pens¨¦ que iba a estar de acuerdo con Manuela Carmena. Pues en esto s¨ª lo estoy. Y es en algo relevante de verdad¡±. ¡°Nunca pensaste que ibas a estar de acuerdo con Manuela Carmena porque eres un sectario¡±, le responde un tuitero.
¡°La derecha que tanto despotricaba de Manuela Carmena, hoy le pondr¨¢ una estatua en la Alameda. Son tan tiernos...¡±, apunta otro. Los usuarios en la ¨®rbita de Podemos se activan: ¡°Ya sali¨® la bruja pirula de Manuela Carmena para hacerse notar, prep¨¢rense porque la volver¨¢n a utilizar como en los viejos tiempos para machacar a Podemos, en este caso va a por Irene Montero, eso s¨ª, no dice nada de que las leyes pasan por la aprobaci¨®n del gobierno, incluido M. Justicia¡±, ¡°Manuela Carmena se suma al linchamiento al Ministerio de Igualdad ultraderechista, por la ley ¡®solo s¨ª es s¨ª'. Nada nuevo¡± o ¡°A ver... si con el pelotazo de la operaci¨®n Chamart¨ªn no quedo todo clar¨ªsimo, yo ya no s¨¦¡±, del dirigente Pablo Echenique.
Muchas de las adhesiones a las palabras de la exalcaldesa, que se reafirma en sus convicciones de izquierdas, se expresan retuiteando o d¨¢ndole me gusta a la entrevista. Tambi¨¦n con mensajes como: ¡°Carmena siempre tan sensata. Gracias¡±; ¡°Ojal¨¢ @sumar recupere a Manuela Carmena. Una izquierda sin miedo a reconocer errores: ¡°No puedes cambiar el C¨®digo Penal sin hacer antes una evaluaci¨®n, exclusivamente por razones pol¨ªticas, pero nos hemos acostumbrado a eso¡±; ¡°Qu¨¦ mujer dejaron perder los madrile?os. Mucha suerte en todo lo tuyo, Manuela¡±; o reflexiones del tipo: ¡°No entiendo como lo que es en global una buena ley se la tenga en la p¨¢gina de sucesos todos los d¨ªas por no solucionar los errores que contiene, sobre todo porque se corre el peligro de que sean los que no crean en la ley quienes ¡®arreglen sus errores¡±.
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