Salud emocional
El aumento de tentativas de suicidio y de fragilidad emocional adolescente obliga a las instituciones a intervenir
Hay sucesos tr¨¢gicos que nos sit¨²an de repente ante la evidencia de que existe una realidad oculta a la que no se ha prestado suficiente atenci¨®n. Que dos adolescentes de 12 a?os se arrojaran por el balc¨®n de su casa desde un tercer piso en Sallent (Barcelona) es una tr¨¢gica se?al de alerta sobre el creciente malestar emocional entre este segmento de edad, que se traduce en un incremento muy preocupante de los intentos de suicidio. Una de las gemelas perdi¨® la vida y su hermana se encuentra en estado grave.
Cuando alguien se suicida no suele ser por un ¨²nico factor y en este caso habr¨¢ de esperar para determinar con mayor precisi¨®n qu¨¦ provoc¨® ese terrible salto al vac¨ªo. Pero de lo que se conoce hasta ahora, uno de los factores pudo ser el bullying que sufr¨ªa la adolescente fallecida despu¨¦s de haber comenzado a expresar su deseo de un cambio de identidad de g¨¦nero pidiendo que la llamaran Iv¨¢n, adem¨¢s del rechazo que percib¨ªan por ser inmigrantes y desconocer el catal¨¢n.
La inestabilidad familiar adicional las hab¨ªa situado en el radar de los servicios sociales del municipio, pero si comunicaron al instituto, como sostiene la familia, el acoso que sufr¨ªan, no se puso en marcha ninguno de los mecanismos de alerta previstos. Hace solo dos meses que los consejeros de Salud y Educaci¨®n de Catalu?a expusieron los preocupantes resultados de una encuesta sobre el estado emocional de los adolescentes realizada en mayo de 2022 con 270.000 alumnos de 12 a 18 a?os. Un 43,4% de los escolares hab¨ªa tenido pensamientos suicidas, m¨¢s de un 40% declaraba haber ido a dormir alguna vez deseando no despertarse y una cuarta parte (el 26,8%) se hab¨ªa autolesionado al menos una vez. Los datos son mucho m¨¢s elevados que en estudios anteriores: revelan un creciente malestar emocional en una edad plagada de cambios neuropsicol¨®gicos y fisiol¨®gicos como es la adolescencia.
Pero hay algo que debe centrar la atenci¨®n: el hecho de que tanto los intentos de suicidio como las autolesiones y otras expresiones de malestar emocional afecten en mucha mayor proporci¨®n a las ni?as que a los ni?os. Los servicios catalanes de prevenci¨®n han comprobado que los intentos de suicidio en las chicas se han disparado un 195% despu¨¦s de la pandemia y triplican a los de los chicos. Parecida desproporci¨®n se observa en los registros del Ministerio de Sanidad y de otras comunidades. Esta es la realidad de la que formaban parte tragedias como la de Sallent. Los poderes p¨²blicos han empezado a aplicar medidas, pero es evidente que los servicios de prevenci¨®n ¡ªen todos los ¨¢mbitos de la vida de los adolescentes¡ª y de atenci¨®n mental est¨¢n desbordados. Si no se act¨²a de forma m¨¢s dr¨¢stica, el riesgo de tomar decisiones tr¨¢gicas e irreversibles o con graves secuelas seguir¨¢ siendo desproporcionadamente alto entre nuestros adolescentes.
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