Aprenda a decir cten¨®foro

Hasta ahora, los primeros animales de la historia eran las esponjas, lo que es f¨¢cil de recordar y sirve para las preguntas del Trivial. Ahora son los cten¨®foros, que ni se usan en la ducha ni hay guapo que los haya o¨ªdo mencionar en su vida. Los cten¨®foros son unos bichos francamente extra?os. Se reproducen escupiendo ¨®vulos y espermatozoides por la boca, a falta de otro orificio m¨¢s adecuado. Tienen forma de supositorio, son trasparentes y nadan libremente. Miden dos o tres mil¨ªmetros, aunque hay alguno de metro y medio, y son tan abundantes que constituyen una buena parte del plancton marino.

Un siglo de zoolog¨ªa ha dejado claro que los cten¨®foros son m¨¢s complejos que las esponjas, casi tan complejos como las medusas y m¨¢s simples que nosotros, los animales bilaterales, es decir, hechos de dos mitades que son im¨¢genes especulares una de otra. Esto ha conducido a la reconstrucci¨®n est¨¢ndar de los or¨ªgenes de la vida animal en la Tierra: primero las esponjas, luego los cten¨®foros y despu¨¦s los bilaterales. Pero la gen¨®mica acaba de transformar ese esquema. Porque el genoma de los cten¨®foros se parece mucho m¨¢s que el de las esponjas al de nuestros ancestros unicelulares.

Sigue siendo cierto que las esponjas carecen de sistema nervioso y de m¨²sculos. Las esponjas siguen siendo simples, pero la raz¨®n no es que sean m¨¢s primitivas que los cten¨®foros, como dictaba nuestro prejuicio. Se puede ser simple y moderno a la vez. La gen¨®mica nos obliga a concluir que las esponjas evolucionaron a partir de los cten¨®foros, que s¨ª tienen nervios y m¨²sculos. Una explicaci¨®n puede ser que las esponjas sean un caso de simplificaci¨®n evolutiva, como el que ocurre en muchos par¨¢sitos. Solo el ADN delata que las esponjas fueron complejas antes de haberse simplificado.

Los paleont¨®logos y los genetistas est¨¢n continuamente afinando y mejorando los modelos evolutivos ¨Dlas reconstrucciones del ¨¢rbol de la vida en la Tierra¡ª, pero en este caso no estamos hablando de un ajuste menor, sino de unos acontecimientos esenciales que tuvieron lugar hace 600 millones de a?os, y a los que se debe nuestra presencia en el cosmos. Una pregunta derivada es hasta qu¨¦ punto cabr¨ªa esperar un proceso semejante en alg¨²n otro planeta de esta galaxia enorme. Porque sin vida multicelular no hay cerebro, y sin cerebro no hay arte ni poes¨ªa ni filosof¨ªa ni mensajes alien¨ªgenas.

Sin caer en el terracentrismo, hay algunos principios que podemos dar por supuestos, como que las cosas m¨¢s simples deben preceder a las m¨¢s complejas. En evoluci¨®n, el huevo va antes que la gallina. La c¨¦lula va antes que el organismo multicelular. Las bacterias van antes que la c¨¦lula. Parece de caj¨®n. Pero ahora vemos de qu¨¦ forma nuestra percepci¨®n de la simplicidad y la complejidad nos puede confundir en la reconstrucci¨®n del pasado profundo. Como mensaje a las agencias espaciales podemos ofrecer: no busquen esponjas, sino cten¨®foros. Bueno, supongo que alg¨²n d¨ªa la NASA estar¨¢ en condiciones de distinguir entre esas dos cosas, aunque ahora mismo ni se me ocurre c¨®mo lo podr¨ªa hacer. Entretanto, deber¨ªamos hacer un homenaje a las 150 especies de cten¨®foros que tenemos en nuestros oc¨¦anos. Son los abuelos, y siguen vivos.