Europa: viejos abismos, y nuevos puentes que disgustan a Putin
El marco mental creado por la guerra en Ucrania propicia, pese a que persistan divergencias, la posibilidad real de significativos avances de integraci¨®n en el continente
En Europa se van construyendo nuevos puentes. Esta semana, en Moldavia, se ha celebrado una nueva cumbre de la Comunidad Pol¨ªtica Europea (CPE), un foro que re¨²ne a 47 pa¨ªses para fomentar espacios de cooperaci¨®n entre Estados del continente, miembros de la UE, de la OTAN, de ambas organizaciones o ninguna. Se trata de una galaxia heterog¨¦nea, y est¨¢ por ver qu¨¦ resultados concretos podr¨¢ dar, pero la segunda cumbre da nuevo impulso a un formato con valor pol¨ªtico ante el desaf¨ªo ruso.
Tambi¨¦n esta semana, en Bratislava, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha pronunciado un discurso que deja entrever importantes desarrollos en tres ¨¢reas con una exhortaci¨®n a ¡°acelerar las decisiones estrat¨¦gicas¡± de Europa.
En primer lugar, Macron abog¨® por ofrecer a Ucrania ¡°garant¨ªas de seguridad tangibles y cre¨ªbles¡±. Dijo adem¨¢s que, si bien plantear ahora la adhesi¨®n de Kiev a la OTAN es problem¨¢tico, ¡°necesitamos un camino hacia la membres¨ªa¡±.
En segundo lugar, afirm¨® que hay que avanzar ¡°lo m¨¢s r¨¢pido posible¡± en la ampliaci¨®n de la UE, subrayando que ser¨ªa un error jugar al viejo juego de dar esperanzas y ganar tiempo.
En tercer lugar, tendi¨® la mano a los pa¨ªses del Este de la UE, admitiendo que Francia ¡°a veces ha sido percibida como arrogante o lejana o desinteresada hacia esta parte de Europa¡±. ¡°Pod¨¦is contar con nosotros¡±, a?adi¨®.
Estas tres declaraciones parecen apuntar a una evoluci¨®n de la posici¨®n de Par¨ªs y suenan como la evidencia de que hay cosas que se mueven, puentes que se construyen, nuevos pasos posibles en el corto y medio plazo.
La relaci¨®n con Ucrania es un apartado esencial y ser¨¢ el epicentro de la cumbre de la OTAN de Vilnius en julio. Macron dice que hay que ofrecer algo que est¨¦ a medio camino entre la asistencia de seguridad a Israel y la plena membres¨ªa.
En la ampliaci¨®n de la UE, insiste en la necesidad de una reforma interna previa a nuevas adhesiones, pero hay ahora un gran acento en la urgencia. Tradicionalmente, Berl¨ªn y Bruselas impulsaban, Par¨ªs frenaba. No cabe ver un giro copernicano en esto, pero s¨ª un posible viraje, y la UE se construye por lo general as¨ª. La ampliaci¨®n, pues, no est¨¢ cerca, pero hay motivos para pensar que desde una sustancial par¨¢lisis se transite a una modalidad m¨¢s proactiva.
Y la mano tendida al Este, con giros del discurso que han sonado a disculpas impl¨ªcitas, es todo un cambio. La tensi¨®n en materia de Estado de derecho sigue (esta misma semana Varsovia ha dado una marcha atr¨¢s tras recibir presi¨®n). Pero lo que antes era solo tensi¨®n y bronca, se ve ahora acompa?ado por un genuino esfuerzo de cooperaci¨®n. Hay un reconocimiento moral de que el Este tuvo una raz¨®n de calado hist¨®rico en la cuesti¨®n rusa, mientras el flanco Oeste se equivoc¨®. Esto no cambia los equilibrios de fuerza; pero s¨ª la relaci¨®n.
Por otra parte, el renovado puente transatl¨¢ntico tambi¨¦n se le ve consolidado. El G-7 ha cristalizado un acercamiento entre Europa y EE UU de cara a la nueva relaci¨®n con China ¡ªen t¨¦rminos cercanos a las ideas de la UE¡ª.
Todo es de una enorme complejidad; lo es la perspectiva de encaje de Ucrania en la UE y la OTAN o incluso solo c¨®mo seguir en el apoyo militar; lo es la ampliaci¨®n de la UE a los Balcanes; la relaci¨®n entre los flancos oeste y este de la UE; incluso dentro del propio flanco occidental hay discrepancias. Los problemas abundan, como demuestran las tensiones en Kosovo, los persistentes tics iliberales en Hungr¨ªa y Polonia, divisiones sobre c¨®mo reformar la zona euro, frialdad en muchos apartados entre Berl¨ªn y Par¨ªs, o la tercera econom¨ªa de la UE ¡ªItalia¡ª en manos de la ultraderecha. El riesgo de par¨¢lisis o fracaso existe. Los abismos de siempre no han desaparecido.
Pero la brutal invasi¨®n rusa de Ucrania ha propiciado una nueva conciencia geopol¨ªtica, y esta ha abierto nuevos canales de comunicaci¨®n, nuevos marcos mentales, nuevos proyectos. La conciencia de que la amigable y razonable Administraci¨®n Biden no durar¨¢ eternamente ¡ªy que lo que venga despu¨¦s puede ser tan malo como lo que vino antes¡ª es compartida y es otro elemento que espolea a moverse. No descarten que Europa, en el marco UE, en el marco OTAN, en el marco CPE, logre en el corto y medio plazos significativos avances gracias a los nuevos puentes cuyos cimientos se van poniendo ahora.
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