Una mujer negra o ind¨ªgena de Brasil merece ganar el Nobel de la Paz
El pa¨ªs m¨¢s grande de Am¨¦rica Latina es el ¨²nico de la regi¨®n que no ha ganado ning¨²n galard¨®n. Lula a¨²n aspira a ganarlo pese a las dificultades de ser mediador de la guerra entre Rusia y Ucrania
Desde que llegu¨¦ a Brasil hace m¨¢s de 20 a?os llevo haci¨¦ndome una pregunta: ?Por qu¨¦ este pa¨ªs, el quinto mayor del mundo, reconocido por su creatividad, nunca ha ganado un premio Nobel? Ni siquiera el de literatura a pesar de contar con escritores y escritoras reconocidos en todos lados.
Y no sucede igual que en el resto de Am¨¦rica Latina, ya que pr¨¢cticamente todos los otros pa¨ªses c...
Desde que llegu¨¦ a Brasil hace m¨¢s de 20 a?os llevo haci¨¦ndome una pregunta: ?Por qu¨¦ este pa¨ªs, el quinto mayor del mundo, reconocido por su creatividad, nunca ha ganado un premio Nobel? Ni siquiera el de literatura a pesar de contar con escritores y escritoras reconocidos en todos lados.
Y no sucede igual que en el resto de Am¨¦rica Latina, ya que pr¨¢cticamente todos los otros pa¨ªses cuentan con dicho galard¨®n, incluso con varios. Quiz¨¢ por ello, el actual presidente, Lula da Silva, lleva tiempo so?ando con quebrar ese ayuno.
Lula, al que no le falta sagacidad a pesar de no haber estudiado, sigue trabajando para conquistar concretamente el premio Nobel de la Paz. Tiene apremio acabar con la guerra de Ucrania, un af¨¢n tan agudo que hasta ha sido criticado de estar olvid¨¢ndose de los muchos problemas brasile?os.
El Nobel de la Paz ha tenido siempre una fascinaci¨®n especial porque adem¨¢s lleva el nombre del cient¨ªfico sueco, Alfred Nobel, que curiosamente era conocido por sus famosas patentes de explosivos, entre ellos de la dinamita, que evocan la guerra y la violencia.
Hoy son m¨¢s de 60 pa¨ªses en el mundo, algunos peque?os, que han sido ya galardonados con alg¨²n Nobel. ?Por qu¨¦ Brasil no?
Es verdad que su lengua de alguna forma fue ya condecorada con el Nobel de Literatura concedido al escritor Jos¨¦ Saramago. Pero se trat¨® de un escritor portugu¨¦s, no brasile?o.
Hay quien achaca esa falta de premios al atraso del pa¨ªs sea en materias cient¨ªficas que en humanas. En estas ¨²ltimas por los altos ¨ªndices de criminalidad y de racismo. No basta. Hay pa¨ªses con el galard¨®n sueco con tanta o mayor carga de violencia que Brasil.
En lo que se refiere a la creatividad cient¨ªfica, hoy es un¨¢nime, por ejemplo, la fuerza de Brasil en las nuevas tecnolog¨ªas digitales y hasta los grandes gur¨²s de la inteligencia artificial reconocen que los j¨®venes brasile?os destacan por su talento innato para los nuevos lenguajes de las redes.
Es humano y comprensible que Lula sue?e con el Nobel y que en su persistencia actual por convertirse en el art¨ªfice de la paz entre Rusia y Ucrania est¨¦ latente la b¨²squeda por el que ser¨ªa el primer Nobel para este pa¨ªs. Pero dada su capacidad de di¨¢logo con los otros grandes del mundo, Lula podr¨ªa tambi¨¦n interesarse y luchar para que el mayor y m¨¢s rico pa¨ªs de Am¨¦rica Latina, fuera finalmente galardonado con alg¨²n Nobel, aunque no fuera para ¨¦l.
Brasil, con una poblaci¨®n de 220 millones de los cuales la mayor¨ªa son descendientes de esclavos africanos y tambi¨¦n la mayor¨ªa mujeres, puede muy bien aspirar, por ejemplo, a tener un Nobel negro y femenino. Ser¨ªa simb¨®lico.
Si ello se diera durante la presidencia la presidencia de Lula acabar¨ªa pasando a la historia m¨¢s a¨²n que si el Nobel de la Paz lo recibiera ¨¦l. En este pa¨ªs, hay muchas mujeres negras e ind¨ªgenas que luchan y exponen su vida en las ciudades y en sus suburbios o en el coraz¨®n de la Amazonia martirizada, con sus acciones contra la violencia y la injusticia.
Reconocer a una de esas brasile?as con el galard¨®n mundial de la paz, ser¨ªa, en esta coyuntura hist¨®rica, donde suenan cada d¨ªa con mayor estruendo las campanas de la violencia y la intolerancia contra los diferentes, la ocasi¨®n de oro para enviar un mensaje al mundo. S¨ª, un mensaje de Paz y con may¨²scula. Un mensaje de que la paz es posible y que quienes se distinguen en esa lucha en este momento son los m¨¢s perseguidos y sacrificados, las v¨ªctimas m¨¢s numerosas de la violencia y de la segregaci¨®n racial, como lo siguen siendo las mujeres.
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