Cambios en el mercado de las telecos
La fusi¨®n entre Orange y M¨¢sM¨®vil, que se produce en un momento de concentraci¨®n de empresas europeas y con el reto de la IA en el horizonte, debe garantizar los derechos de los usuarios
Casi dos a?os despu¨¦s de que Orange y M¨¢sM¨®vil anunciaran su decisi¨®n de fusionarse, la Comisi¨®n Europea ha dado el visto bueno a la uni¨®n de las dos operadoras, lo que dar¨¢ lugar a la primera empresa de telecomunicaciones en Espa?a, con 7,3 millones de clientes de banda ancha, m¨¢s de 30 millones de servicios m¨®viles y m¨¢s de 2,2 millones de clientes de televisi¨®n. La operaci¨®n est¨¢ pendiente de la aprobaci¨®n por parte de las autoridades espa?olas, pero una vez que se confirme, la nueva compa?¨ªa superar¨¢ por primera vez a Telef¨®nica en volumen, aunque la multinacional que dirige Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez-Pallete conservar¨¢ el liderazgo en ingresos, despliegue de fibra o televisi¨®n.
La fusi¨®n entre Orange y M¨¢sM¨®vil, valorada en m¨¢s de 18.600 millones de euros, est¨¢ condicionada a la venta de parte de la frecuencia m¨®vil a la proveedora de origen rumano Digi, lo que consolidar¨¢ cuatro grandes operadores en el mercado espa?ol ¡ªlos citados m¨¢s Vodafone¡ª y garantiza el mantenimiento de la competencia en un mercado decisivo para el futuro de la econom¨ªa. Con todo, el acuerdo trasciende a sus implicados. Por un lado, porque la cesi¨®n de espectro a Digi mantiene la presi¨®n sobre el resto de los competidores a trav¨¦s de los precios, lo que redunda en beneficio de los consumidores. De hecho, la Comisi¨®n sostiene en su pliego de condiciones que sin esa cesi¨®n los precios podr¨ªan aumentar un 10%. Pero tambi¨¦n porque apunta un cambio en la pol¨ªtica de competencia impulsada desde Bruselas, al relajar las condiciones de la operaci¨®n y permitir que sobrevivan operadores nacionales fuertes con capacidad para invertir en nueva tecnolog¨ªa y, por tanto, adquirir una escala suficiente como para competir con otras telecos internacionales y ofrecer servicios transfronterizos. En juego est¨¢ el desarrollo del 5G en Europa, pero tambi¨¦n la apuesta por las infraestructuras necesarias para permitir el desarrollo de la inteligencia artificial, dos aspectos en los que ni Espa?a ni la Uni¨®n Europea ocupan posiciones de liderazgo a escala global.
La fusi¨®n entre Orange y M¨¢sM¨®vil se produce justo cuando el Estado estudia c¨®mo financiar la compra de una participaci¨®n en el accionariado de Telef¨®nica, 27 a?os despu¨¦s de la privatizaci¨®n del antiguo monopolio, tras la entrada en el capital de la saud¨ª STC. El mercado est¨¢ tambi¨¦n pendiente de la autorizaci¨®n oficial a la adquisici¨®n de Vodafone Espa?a por parte del fondo brit¨¢nico Zegona. Asistimos, pues, a una bater¨ªa de movimientos que puede ser el detonante de nuevas acciones de consolidaci¨®n entre las telecos europeas. Se suman adem¨¢s a los cambios legislativos que el Gobierno debe aprobar en los pr¨®ximos meses en materia de ciberseguridad, comunicaciones audiovisuales y telecomunicaciones para avanzar en el citado desarrollo del 5G. Unos y otros van a transformar sin duda el statu quo del sector este 2024. Lo importante es que se garanticen los derechos de los consumidores.
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