Problemas de sue?o, problema de salud

Los des¨®rdenes del sue?o se han convertido en un relevante problema sanitario. Un 10% de los espa?oles ¡ªm¨¢s de cuatro millones de personas¡ª sufren alg¨²n trastorno de sue?o cr¨®nico y grave, seg¨²n la Sociedad Espa?ola de Neurolog¨ªa. Los datos coinciden con los recogidos por una encuesta de 40dB. para EL PA?S y la Cadena SER seg¨²n la cual el 47,5% de la poblaci¨®n duerme mal o regular. Esos desajustes producen cambios emocionales inmediatos, en especial mayor ansiedad y ca¨ªda del estado de ¨¢nimo. Crecen adem¨¢s las evidencias que vinculan dormir mal con un mayor riesgo de obesidad, diabetes, enfermedades cerebrovasculares y neurodegenerativas y mortalidad prematura, as¨ª como una peor salud mental a largo plazo. Como en otros ¨¢mbitos, la pandemia de covid no hizo m¨¢s que empeorar la situaci¨®n.

No es casual el mal dormir de los ciudadanos en un pa¨ªs con largas jornadas laborales que priman la presencialidad, ritmos de trabajo muchas veces extenuantes, precariedad o ¡ªno es balad¨ª¡ª horarios televisivos vespertinos muy poco razonables. Al igual que ha ido ocurriendo con la adicci¨®n al tabaco o la obesidad, los problemas de sue?o no deben concebirse como afecciones estrictamente individuales, sino que necesitan un abordaje integral por parte del sistema sanitario y una consideraci¨®n global en t¨¦rminos sociales y de igualdad.

Dado que las mujeres tienen mayores dificultades de conciliaci¨®n laboral y familiar y asumen en mayor medida las tareas de cuidado, no es tampoco casual que protagonicen los peores indicadores en la mayor¨ªa de las ratios. Se trata de un preocupante sesgo de g¨¦nero tambi¨¦n presente en el consumo de hipnosedantes, que en 2022 registr¨® el m¨¢ximo de la serie hist¨®rica entre la poblaci¨®n de 15 a 64 a?os. En todos los rangos de prevalencia de consumo, las mujeres registran porcentajes entre cuatro y nueve puntos superiores a los hombres.

Por otro lado, aunque los desequilibrios en el descanso son m¨¢s frecuentes entre las personas de mayor edad, conviene estar alerta a su relaci¨®n con el aumento de problemas de salud mental entre los j¨®venes: una de cada tres personas de 15 a 29 a?os ha tomado alguna vez psicof¨¢rmacos, seg¨²n el ¨²ltimo bar¨®metro de Fad Juventud.

Expertos y sociedades m¨¦dicas llevan tiempo alertando de la necesidad de formar a profesionales sanitarios especializados en la atenci¨®n a los trastornos del sue?o, al tiempo que se incentivan los h¨¢bitos saludables en todas las edades y con perspectiva de g¨¦nero. El Congreso de los Diputados aprob¨® en noviembre de 2022, a iniciativa del PSOE, una proposici¨®n no de ley en ese sentido, pero su recorrido ha sido nulo. Es hora de dar prioridad a un problema de salud que afecta a la calidad de vida de millones de ciudadanos.