El G-20 y las redes sociales

La cumbre del G-20 celebrada la semana pasada en R¨ªo de Janeiro estuvo marcada por la participaci¨®n t¨¢cita de Donald Trump y Elon Musk. El presidente electo de Estados Unidos y el due?o de X, futuro miembro de la Administraci¨®n republicana, fueron protagonistas, todav¨ªa ausentes, del c¨®nclave de las principales potencias mundiales. Sin embargo, s¨ª viaj¨® a Brasil un portavoz oficioso de sus posiciones. El mandatario argentino, Javier Milei, ejerci¨® de alguna manera como enviado de los dos magnates tras haberse reunido con ellos en Mar-a-Lago. La negociaci¨®n del documento final fue ag¨®nica y desemboc¨® en un consenso de m¨ªnimos por varias razones: la guerra en Ucrania, el conflicto en Oriente Pr¨®ximo, pero tambi¨¦n por las resistencias del economista ultra.

El Gobierno argentino manifest¨® su oposici¨®n ¡°disoci¨¢ndose parcialmente de todo contenido vinculado a la Agenda 2030¡å, adem¨¢s de sumarse a rega?adientes a la alianza contra el hambre promovida por el anfitri¨®n, Luiz In¨¢cio Lula da Silva. Entre las discrepancias manifestadas por la oficina de Milei figura, adem¨¢s, la disconformidad con la supuesta ¡°promoci¨®n de la limitaci¨®n de la libertad de expresi¨®n en redes sociales¡±.

La declaraci¨®n del G-20 recoge en realidad una preocupaci¨®n global por el deterioro de la convivencia digital: ¡°La digitalizaci¨®n del ¨¢mbito de la informaci¨®n y la evoluci¨®n acelerada de nuevas tecnolog¨ªas, como la inteligencia artificial (IA), han repercutido dr¨¢sticamente en la velocidad, la dimensi¨®n y el alcance de la desinformaci¨®n, el discurso de odio y otras formas de perjuicios en l¨ªnea¡±. A partir de este diagn¨®stico, el texto hace hincapi¨¦ en la ¡°necesidad de transparencia y responsabilidad de las plataformas digitales en l¨ªnea con las pol¨ªticas relevantes y los marcos legales aplicables¡±. La ret¨®rica libertaria juega con la idea de ausencia total de regulaciones o la ilusi¨®n del free speech que enarbola Musk, aunque todo lo que se escribe y se lee depende en ¨²ltima instancia del algoritmo, el verdadero director de orquesta de una red social, cuyos criterios de transparencia son a menudo discutibles. Bluesky ha incorporado un esquema que permite escoger contenidos y decidir, en definitiva, a qu¨¦ conversaci¨®n sumarte. Pero los algoritmos cl¨¢sicos se nutren de la confrontaci¨®n.

Una vez terminada la cumbre del G-20, Milei aprovech¨® para revolverse contra el periodismo, apelando precisamente al principio de libertad de palabra. En un largo mensaje publicado en su cuenta de X, el pol¨ªtico ultraderechista se dirige a los informadores afirmando primero que ¡°gran parte del periodismo¡± act¨²a con deshonestidad y acusando incluso a los comunicadores de practicar la extorsi¨®n. La confusi¨®n entre la informaci¨®n y las actividades delictivas da una idea de la premisa del presidente argentino. ¡°Sin embargo, gracias a la tecnolog¨ªa, los celulares y las redes sociales, los delincuentes del micr¨®fono hoy ven que sus v¨ªctimas no solo han logrado desatarse sino que adem¨¢s tienen gran capacidad de respuestas¡±, escribe.

Milei insiste en el planteamiento de Musk, seg¨²n el cual los usuarios de las plataformas digitales se han convertido en medios de comunicaci¨®n. ¡°Gracias a las redes sociales se les termin¨® el privilegio de casta que han tenido durante tanto tiempo y que han ejercido con tanta violencia. Por eso, acepten que el mundo cambi¨® para bien y a ustedes se les acab¨® el monopolio de la palabra. Es hora de que laburen honestamente. Les lleg¨® la hora de competir de modo limpio. S¨ª, ahora van a ganar menos dinero pero eso es normal en un mercado libre¡±.

En cualquier caso, como siempre, el asunto va m¨¢s de afinidades pol¨ªticas que de libertades. Al d¨ªa siguiente, Milei se hizo eco de una intervenci¨®n del presentador Esteban Trebucq a prop¨®sito de una entrevista en la que le acusaron de hacerle el juego al Gobierno. ¡°El presidente agarra Twitter, escribe lo que quiere y sale en todos los lados¡±, dijo Trebucq. ¡°Por suerte hay periodistas que son verdaderamente honestos¡±, replic¨® Milei.