Leibovitz y la vida espa?ola
Lobato lleva abrigo de pa?o y botas de monta?a; el notario, al fondo, hace ¡®scroll¡¯ a un m¨®vil con dedo tembloroso. Foto ligeramente torcida, como todo: otro acierto
Se supo estos d¨ªas que Annie Leibovitz llevaba unas semanas en Madrid para dirigir una sesi¨®n de fotos. La artista cont¨®, dijo Yolanda Romero G¨®mez, historiadora del arte y responsable de conservadur¨ªa y patrimonio del Banco de Espa?a, con ¡°absoluta libertad, desde la elecci¨®n del escenario hasta la indumentaria¡±. Finalmente, se eligi¨® un retrato que fue presentado en un acto multitudinario. Era la primera vez que Juan Lobato Ga...
Se supo estos d¨ªas que Annie Leibovitz llevaba unas semanas en Madrid para dirigir una sesi¨®n de fotos. La artista cont¨®, dijo Yolanda Romero G¨®mez, historiadora del arte y responsable de conservadur¨ªa y patrimonio del Banco de Espa?a, con ¡°absoluta libertad, desde la elecci¨®n del escenario hasta la indumentaria¡±. Finalmente, se eligi¨® un retrato que fue presentado en un acto multitudinario. Era la primera vez que Juan Lobato Gandarias, l¨ªder de los socialistas madrile?os, posaba para Leibovitz, la fot¨®grafa viva m¨¢s importante del mundo, as¨ª que la expectaci¨®n estaba asegurada. Hubo varios retratos descartados, quiz¨¢ el m¨¢s potente aquel en el que Lobato posa en una mesa de madera con apariencia de pupitre con el que Leibovitz quiso expresar la blanca inocencia del pol¨ªtico madrile?o a la hora de enfrentarse al aparato del PSOE: un pulsito nada novedoso (la federaci¨®n madrile?a es un continuo proc¨¦s) pero relevante por el asunto del que trataban. Al fin y al cabo, se trata de una pelea a navajazos dentro del socialismo tras saberse que la pareja de la presidenta de la Comunidad, del PP, reconoci¨® haber defraudado 350.000 euros a Hacienda; es probable que el fraude se vaya a llevar por delante al l¨ªder del PSOE de Madrid y a saber si al fiscal General del Estado. A Leibovitz le estallaba este martes la cabeza viendo Telemadrid en su apartamento del Upper West Side. Quiere volver a Espa?a en el primer avi¨®n para fotografiar a Miguel ?ngel Rodr¨ªguez. El retrato elegido finalmente es un acierto. El posado fue hace casi un mes. Es Juan Lobato en la oficina de un notario dando cuenta de unos wasaps enviados por una asesora socialista de La Moncloa en los que le insta a ense?ar un correo que desmiente un bulo y que se investiga si lo filtr¨® la Fiscal¨ªa. Luz tenue, tonos apagados, la sobriedad de una notar¨ªa. Lobato lleva abrigo de pa?o y botas de monta?a; el notario, al fondo, hace scroll en un m¨®vil con dedo tembloroso. Foto ligeramente torcida, como todo: otro acierto. Ah¨ª estaba el l¨ªder socialista de Madrid registrando notarialmente unos mensajes de una compa?era porque, puede aducir, conoce la casa como si la hubiese parido.