Ayudemos a la India, ahora

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En mi ni?ez, en el Valle de Cachemira en el norte de la India, a menudo mi padre, que era m¨¦dico, me acompa?aba a mis vacunaciones anuales. Yo le preguntaba c¨®mo funcionan y se crean las vacunas. Tras explicarme la biolog¨ªa b¨¢sica del sistema inmune humano, siempre recalcaba que eran el resultado de esfuerzos globales en que cient¨ªficos y empresas de todo el mundo colaboraban meticulosamente para asegurarse de que todos quienes las recibieran estuvieran bien protegidos.

Hoy solo una acci¨®n global puede afrontar la creciente crisis de covid-19 en la India, donde la cantidad de casos diarios super¨® hace poco los 400.000 (un r¨¦cord mundial) y m¨¢s de 270.000 personas han fallecido. Los modelos epidemiol¨®gicos del Instituto de Medici¨®n y Evaluaci¨®n Sanitaria de la Universidad de Washington proyectan que las infecciones en ese pa¨ªs seguir¨¢n creciendo de manera exponencial, con un pico a mediados de mayo, y que el recuento total de muertes por covid-19 podr¨ªa llegar al mill¨®n de personas. Si bien las consecuencias para la India son terribles, ser¨ªa imprudente por parte de las autoridades globales pensar que el impacto se limitar¨¢ a solo un pa¨ªs.

Eso se debe a que mientras m¨¢s se propague y replique el coronavirus en la India, m¨¢s mutar¨¢. La circulaci¨®n sin control del virus llevar¨¢ al surgimiento de nuevas variantes que pueden prolongar la pandemia. La variante B.1.617, responsable de la masacre india, ya se ha observado en 19 pa¨ªses, incluidos los Estados Unidos. Informes recientes tambi¨¦n sugieren que esta variante potencialmente puede evadir la respuesta inmune, lo que exacerbar¨ªa a¨²n m¨¢s la presi¨®n sobre los sistemas sanitarios. Adem¨¢s, todav¨ªa no sabemos cu¨¢nta protecci¨®n contra la B.1.617 pueden significar las vacunas contra el covid-19 aprobadas hasta ahora, lo que podr¨ªa amenazar la eficacia de las campa?as de vacunaci¨®n globales.

Resulta preocupante que el surgimiento de esta variante pueda amenazar tambi¨¦n los sistemas sanitarios vulnerables en otros pa¨ªses de bajos recursos, como los vecinos de India, Pakist¨¢n y Banglad¨¦s, que tienen altas densidades de poblaci¨®n, sufren insuficiencia de capacidad de cuidados intensivos y ventiladores, y donde las actuales tasas de vacunaci¨®n est¨¢n por debajo del 5%. La capacidad de cuidados intensivos es muy limitada en otros pa¨ªses de ?frica y Sudam¨¦rica, que todav¨ªa se est¨¢ recuperando de la propagaci¨®n incontrolada de la variante brasile?a. Si la B.1.617 puede causar tanto da?o en la India, un pa¨ªs con un sistema sanitario de capacidad moderada, podr¨ªa resultar devastadora en otros pa¨ªses menos equipados.

Las tribulaciones de la India son un retroceso repentino y agudo. El pa¨ªs suministra m¨¢s del 60% de las vacunas mundiales y se supon¨ªa que iba a liderar los esfuerzos por fabricar vacunas contra el covid-19 para numerosos pa¨ªses. Pero ahora que la nueva variante est¨¢ devastando el sistema sanitario indio, no est¨¢ claro cu¨¢nto tiempo ser¨¢ necesario para aumentar la capacidad productiva. Al pa¨ªs se le est¨¢n acabando las vacunas para el covid-19 y el Serum Institute of India, el principal fabricante mundial de vacunas, no puede impulsar la producci¨®n por el momento. Los economistas ya estaban proyectando que los pa¨ªses de bajos recursos no podr¨ªan alcanzar una cobertura total de vacunas para su poblaci¨®n sino hasta 2023. La crisis actual pondr¨¢ todav¨ªa m¨¢s obst¨¢culos a la recuperaci¨®n mundial pospandemia.

La comunidad internacional debe ahora unir fuerzas y desarrollar un esfuerzo colectivo para apoyar a la India en esta fase crucial, no solo como un imperativo moral, sino porque la salud de las poblaciones y las econom¨ªas de otros pa¨ªses est¨¢n en juego. Los gobiernos pueden adoptar varias medidas para mitigar el impacto.

Primero, EE. UU., que ha perdido casi 600.000 ciudadanos a causa del covid-19 (m¨¢s que cualquier otro pa¨ªs), deber¨ªa jugar un rol de liderazgo. Aunque la administraci¨®n del Presidente Joe Biden ha prometido donar 60 millones de dosis de la vacuna Oxford-AstraZeneca, informes recientes sugieren que la entrega podr¨ªa tomar hasta dos meses. Ese proceso se debe acelerar. Este pa¨ªs tambi¨¦n deber¨ªa liderar los esfuerzos por compartir las materias primas necesarias para fabricar las vacunas contra el COVID-19, a fin de ayudar a aumentar la capacidad de producci¨®n en la India.

En segundo lugar, la comunidad internacional debe unirse a EE. UU. en el apoyo a una exenci¨®n mundial de los derechos de propiedad intelectual (PI) vinculados a los insumos para la covid-19, medida que la India y Sud¨¢frica han propuesto desde hace tiempo en la Organizaci¨®n Mundial del Comercio. Con menos del 2% de la poblaci¨®n india vacunada, no se puede exagerar la importancia de esta exenci¨®n. Y como lo explicara hace poco Jeffrey D. Sachs, existen mecanismos para mantener la innovaci¨®n farmac¨¦utica al tiempo que se promueven iniciativas de vacunaci¨®n en la India y el resto del planeta, lo que incluye compensar a los titulares de PI y limitar el alcance y duraci¨®n de cualquier exenci¨®n que se decida.

Los pa¨ªses tambi¨¦n deben coordinarse con la Organizaci¨®n Mundial de la Salud para aumentar la capacidad de sistema sanitario indio. China, que construy¨® un hospital en cinco d¨ªas cuando este a?o las infecciones alcanzaron un pico en su territorio, puede asesorar sobre c¨®mo hacerlo. Nigeria y Estados Unidos pueden prestar asistencia t¨¦cnica para convertir grandes instalaciones deportivas en unidades de aislamiento de pacientes con covid-19 y as¨ª reducir la carga en los hospitales.

Adem¨¢s, aquellos pa¨ªses que se han recuperado en parte de la pandemia podr¨ªan compartir concentradores de ox¨ªgeno y ventiladores. Y las organizaciones m¨¦dicas profesionales internacionales pueden combinar sus recursos y desarrollar protocolos para suplir insumos esenciales, como ox¨ªgeno, equipos de protecci¨®n personal y medicamentos.

A medida que algunos pa¨ªses finalmente comienzan a salir de la crisis de la pandemia, sus autoridades no deber¨ªan olvidar su lecci¨®n m¨¢s importante: ning¨²n pa¨ªs estar¨¢ seguro hasta que todos los pa¨ªses lo est¨¦n. Si bien la crisis en la India ha evidenciado el car¨¢cter global de la salud p¨²blica, tambi¨¦n ha servido de oportunidad para demostrar una vez m¨¢s los beneficios de la cooperaci¨®n internacional.

Junaid Nabi es investigador s¨¦nior del Aspen Institute y miembro del Grupo de Trabajo sobre Consideraciones Normativas para Salud e Innovaci¨®n Digital en la Organizaci¨®n Mundial del Trabajo.

Traducido del ingl¨¦s por David Mel¨¦ndez Tormen Copyright: Project Syndicate, 2021.

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