Espacios seguros para los ni?os que huyen del conflicto en Cabo Delgado

El movimiento insurgente yihadista que act��a en Cabo Delgado, al norte de Mozambique, desde 2017 se ha cobrado ya m��s de 6.000 vidas y ha provocado el desplazamiento de alrededor de un mill��n de personas, seg��n cifras de la ONU. M��s de medio mill��n de esos desplazados son menores de edad. Varias de las ONG presentes en la zona llevan tiempo implementando lo que llaman ��espacios seguros para los ni?os��. En algunos casos, hay una peque?a infraestructura, en otros, basta con la sombra de un gran ��rbol de mango o de anacardos para organizar actividades l��dicas, que son una terapia psicosocial para mitigar el sufrimiento. En el distrito de Metuge, estos espacios concentran decenas de ni?os. En la foto, un equipo de la ONG IsraAID organiza actividades y juegos. Juan Luis Rod

Adem��s de juegos, en estos espacios seguros tambi��n realizan actividades formativas que asientan los contenidos que aprenden en la escuela. El acceso a la educaci��n es un desaf��o en este contexto de desplazamiento y movilizaci��n de la poblaci��n. Es por ello que organizaciones como Ayuda en Acci��n apoyan en la dotaci��n de infraestructuras escolares o la formaci��n del profesorado en nuevas metodolog��as de ense?anza. Ayuda en Acci��n tambi��n promueve la participaci��n de las ni?as en la educaci��n formal, a trav��s de actividades destinadas a padres, madres y equipos docentes, con el fin de contribuir a relaciones de g��nero m��s justas y equitativas.Juan Luis Rod

Varios ni?os muestran orgullosos los dibujos que han realizado en el espacio infantil habilitado en el centro de reasentamiento 25 de Junio, en el distrito de Metuge. La aldea contaba con una poblaci��n original de 80 familias antes del conflicto y llegaron a recibir 6.750 familias desplazadas. Un total de 36.000 personas fueron acogidas en este campamento, seg��n datos de la Organizaci��n Internacional para las Migraciones (OIM). Juan Luis Rod

En las escuelas de estas comunidades de acogida, los profesores no estaban preparados para recibir la gran cantidad de ni?os que llegaron de golpe a sus aulas. En la imagen, el equipo de IsraAID durante una formaci��n de docentes en la Escuela de Impire, destinada a reforzar las herramientas de los maestros para lidiar con clases abarrotadas.Juan Luis Rod

Fernanda Mahhose y Assane Lu��s Malandela son profesores y han participado en el programa de formaci��n de la Escuela de Impire, en el distrito de Metuge. Coinciden en que ha sido fundamental para poder ayudar e integrar a los nuevos alumnos que huyendo del conflicto en sus lugares de origen. Muchos de estos profesores no ten��an formaci��n especializada y no sab��an muy bien c��mo actuar con estos ni?os traumatizados que llegaban a sus aulas. En estas formaciones se abordan diferentes conceptos como la depresi��n, el trauma, el estr��s postraum��tico o la ansiedad a trav��s de distintas din��micas de grupo.Juan Luis Rod

Otro de los grandes desaf��os que viene afrontando la poblaci��n desplazada es el acceso al agua potable. Durante el primer semestre de 2023 se diagnosticaron 1.186 casos de c��lera en la provincia de Cabo Delgado, seg��n datos de la OMS. Para evitar que estas enfermedades se contin��en expandiendo y evitar al mismo tiempo que los casos de desnutrici��n infantil se disparen, algunas de las ONG tambi��n dedican parte de su tiempo y esfuerzo en promover h��bitos de higiene saludables como el lavado de manos o la gesti��n de los residuos, explica Daniel Rodr��guez, coordinador de proyectos de la ONG Medicus Mundi en Cabo Delgado.Juan Luis Rod

En los centros de reasentamiento tambi��n se llevan a cabo acciones como la instalaci��n de sistemas caseros conocidos como ��tipy-tap��, en los que una garrafa de pl��stico con agujero en el tap��n y una cuerda amarrada a dos palos hace las veces de grifo para lavarse las manos antes de comer.Juan Luis Rod

Anli Wazir, que trabaja en el espacio infantil seguro de Metuge desde septiembre de 2022 brindando apoyo psicosocial, comenta que la mayor��a de los ni?os ya han empezado a cambiar su comportamiento y ahora cantan, juegan y se r��en. Explica que cuando llegaron muchos estaban traumatizados y no quer��an participar en las actividades. Algunos siguen sin recuperarse, como el ni?o de la imagen, que se apart�� del grupo con el que estaba jugando y se aisl�� durante el ejercicio. ONG como Medicus Mundi, con la financiaci��n de la Agencia Espa?ola de Cooperaci��n Internacional para el Desarrollo (AECID), impulsan la creaci��n de grupos de apoyo psicosocial, formados por mujeres y hombres desplazadas. En ellos se intentan crear espacios de encuentro y debate sobre preocupaciones en com��n, se impulsan iniciativas que contribuyan a mejorar la convivencia en las comunidades, ya que, en muchos casos, las personas desplazadas pueden quedarse all�� un largo tiempo.Juan Luis Rod

Amina Ali Somare tiene 67 a?os, una hija, siete nietos y varios bisnietos. Todav��a sufre pesadillas con el ataque que sufrieron en su comunidad, Bilibiza, donde los insurgentes entraron y quemaron todo. Hoy vive en un centro de reasentamiento de Metuge y est�� contenta porque sus nietos pueden ir a la escuela con tranquilidad. Asegura que de momento no tiene pensado volver a su aldea. Sigue teniendo mucho miedo.Juan Luis Rod

La poblaci��n desplazada que vive en los centros de reasentamiento ubicados en la zona sur de la provincia ve c��mo la ayuda humanitaria comienza a escasear. Antes recib��an con cierta regularidad asistencia del Programa Mundial de Alimentos (PMA), pero las entregas se han espaciado mucho. M��s all�� del conflicto, el norte de Mozambique sufre la falta de alimentos en algunos meses del a?o.Juan Luis Rod