Las nuevas vacunas contra la malaria: un ¨¦xito con algunas sombras

El doctor Chris van Straten sabe qu¨¦ es la malaria. La conoci¨® de ni?o, cuando la padeci¨® su abuelo, y m¨¢s tarde, su t¨ªo. Se acuerda de las convulsiones que hac¨ªan que sus cuerpos se contrajeran y lo confusos y fr¨ªos que estaban, aunque sudaran profusamente. Recuerda las arcadas y los v¨®mitos. ¡°Aprend¨ª a identificar y a tratar la malaria en Pap¨²a Nueva Guinea; trabajaba en un hospital de una isla lejana. Incluso ahora lidio con ella casi a diario, porque tengo pacientes en todas las zonas de ?frica afectadas por la enfermedad. He perdido a familiares, compa?eros y pacientes por su culpa, as¨ª que para m¨ª la malaria es algo muy cercano y muy real¡±, explica el ahora Asesor de Salud Mundial sobre Gobernanza Cl¨ªnica para la organizaci¨®n International SOS.

La aparici¨®n de dos vacunas, junto con otras intervenciones, especialmente la quimioprevenci¨®n de la malaria estacional, han puesto a ?frica en el camino hacia la erradicaci¨®n de la malaria, una enfermedad causada por un par¨¢sito que se transmite a los humanos a trav¨¦s de la picadura de mosquitos infectados. Sin embargo, Van Straten cree que el recorrido ¡°ser¨¢ dif¨ªcil¡±: una de las vacunas, la RTS,S, aprobada por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) en 2021, solo se distribuye en Ghana, Kenia y Malaui, y ofrece un umbral de protecci¨®n moderado; mientras que la otra, la R21, la vacuna de Oxford que acaban de autorizar Ghana y Nigeria, es m¨¢s eficaz pero no dispone a¨²n del visto bueno del organismo de la ONU, lo que complica su financiaci¨®n.

El ¨²ltimo Informe Mundial sobre la Malaria de la OMS aporta pruebas de que aproximadamente el 95% de los casos de paludismo (234 millones) y el 96% de todas las muertes (593.000) en 2021 se produjeron en ?frica

El ¨²ltimo Informe Mundial sobre la Malaria, publicado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) en diciembre de 2022, revela que 619.000 personas fallecieron en todo el mundo a causa de la enfermedad y que se produjeron 247 millones de nuevos casos en 2021. El informe aporta pruebas de que aproximadamente el 95% de los casos de paludismo (234 millones) y el 96% de todas las muertes (593.000) en 2021 se produjeron en ?frica, y que los ni?os menores de cinco a?os representaron casi el 80% de los fallecimientos.

En octubre de 2021, tras llevar a cabo estudios piloto en Ghana, Kenia y Malaui, la OMS aprob¨® el uso de la vacuna RTS,S, de la farmac¨¦utica GlaxoSmithKline ¡ªMosquirix por su nombre comercial¡ª, en ni?os de pa¨ªses con un elevado n¨²mero de casos de paludismo. Las tres primeras dosis se administran con un intervalo de un mes, la primera a los cinco o seis meses de edad. La cuarta dosis se administra entre seis y 12 meses despu¨¦s de la tercera. Sin embargo, seg¨²n la OMS, la RTS,S ofrece una eficacia ¡°modesta¡± y ha logrado reducir los casos graves de paludismo en un 29%. La estimaci¨®n coincide con un estudio publicado en la revista Nature el pasado marzo, que tambi¨¦n describ¨ªa la eficacia de la vacuna como ¡°modesta y de corta duraci¨®n¡±.

Aunque 28 pa¨ªses africanos quieren que GAVI ¡ªla alianza mundial para la vacunaci¨®n que financia programas de inmunizaci¨®n en pa¨ªses menos desarrollados¡ª les ayude a desplegar la vacuna RTS,S, esta solo est¨¢ disponible en algunas partes de los tres pa¨ªses piloto. No obstante, la Alianza para las Vacunas indica que espera distribuir la vacuna en m¨¢s pa¨ªses en 2024. Pero el suministro actual no podr¨¢ satisfacer la demanda. ¡°Lo que nos frena son los problemas financieros. Lo hemos visto en la falta de inversi¨®n proactiva en la ampliaci¨®n de la producci¨®n de la vacuna RTS,S, y ahora estamos pagando el precio por ello¡±, se lamenta Ashley Birkett, responsable mundial de vacunas y productos biol¨®gicos contra la malaria en PATH, una organizaci¨®n mundial sin ¨¢nimo de lucro que lucha por acabar con las desigualdades sanitarias.

¡°El que un ni?o reciba la vacuna no significa que no vaya a contraer la malaria, sino que tendr¨¢ menos episodios de paludismo, que la gravedad de la enfermedad ser¨¢ menor y tendr¨¢ menos probabilidades de morir¡±, explica John Bawa, responsable de la aplicaci¨®n de la vacuna en ?frica para PATH. Sin embargo, conseguir que los ni?os reciban cuatro dosis tambi¨¦n podr¨ªa ser un problema. ¡°Hemos visto en los ensayos que algunos pacientes abandonaron y nunca recibieron las cuatro dosis por cosas como el coste de desplazarse a las cl¨ªnicas¡±, considera Van Straten. Seg¨²n Bawa, en los tres pa¨ªses donde se utiliza actualmente la RTS,S, entre el 70% y el 80% de todos los ni?os que recibieron la primera dosis volvieron para la segunda y la tercera. ¡°Con la cuarta dosis, el porcentaje no es tan impresionante; la media ronda el 52%. Es comprensible, porque si nos fijamos en el tiempo que transcurre entre la tercera y la cuarta dosis, es largo; por ejemplo, en Kenia, m¨¢s de un a?o. Algunos ni?os ya han empezado la escuela y a los padres les resulta dif¨ªcil volver¡±.

El ministro de Salud ghan¨¦s, Kwaku Agyeman-Manu, atribuye a la vacuna RTS,S el m¨¦rito de haber contribuido ¡°enormemente¡± a reducir la tasa de prevalencia de la malaria en su pa¨ªs

Hema Srinivasan, directora de acceso de MedAccess, una empresa de financiaci¨®n social con sede en Londres que ayud¨® a sufragar el despliegue inicial de las vacunas RTS,S, afirma que el resultado previsto de la campa?a ser¨¢ vacunar a 7,5 millones de ni?os m¨¢s, evitar 8,7 millones de casos de malaria y salvar 36.000 vidas infantiles. Desde 2019 hasta 2022, Bawa ayud¨® al Gobierno de Ghana a administrar 1,4 millones de dosis de la vacuna. Casi 500.000 ni?os recibieron al menos una dosis, y alrededor de 185.000 recibieron las cuatro.

El resultado fue un ¨¦xito. El ministro de Salud ghan¨¦s, Kwaku Agyeman-Manu, atribuye a la vacuna RTS,S el m¨¦rito de haber contribuido ¡°enormemente¡± a reducir la tasa de prevalencia de la malaria en su pa¨ªs, lo cual ha tenido como resultado que las muertes por paludismo en pacientes hospitalizados hayan disminuido de 428 en 2018 a 155 en 2022. As¨ª y todo, a falta de un despliegue m¨¢s amplio, la prevalencia de la enfermedad en Ghana, el primer pa¨ªs en aprobar la nueva vacuna de Oxford, sigue siendo desmesuradamente alta.

Una vacuna m¨¢s eficaz y barata

La R21, desarrollada en la Universidad de Oxford, ha demostrado una eficacia significativamente mayor que la RTS,S en ni?os mayores de 12 meses, brind¨¢ndoles m¨¢s de un 75% de protecci¨®n frente a la malaria grave. Otro de sus atractivos es su coste: tres d¨®lares por dosis, frente a los cinco d¨®lares de la RTS,S. Sin embargo, PATH matiza que, dado que no se han realizado estudios comparativos entre la RTS,S y la R21, todav¨ªa no hay base para afirmar que una sea superior a la otra.

Por el momento, la inmunizaci¨®n se ha probado en Reino Unido, Tailandia y varios pa¨ªses africanos. En Burkina Faso, Kenia, Mal¨ª y Tanzania se est¨¢ realizando un ensayo con cerca de 5.000 ni?os. Y Ghana y Nigeria acaban de aprobar su uso en ni?os de entre cinco meses y tres a?os, el grupo de edad con mayor riesgo de muerte por malaria. Pero, a falta de la calificaci¨®n de la OMS, ni ellos ni otros pa¨ªses podr¨¢n obtener financiaci¨®n de GAVI para adquirirla.

Si tenemos otra vacuna que cuente con la aprobaci¨®n de la OMS, los pa¨ªses tendr¨¢n m¨¢s opciones y habr¨¢ m¨¢s suministros disponibles

John Bawa, responsable de la aplicaci¨®n de la vacuna en ?frica para PATH

¡°Prevemos que este proceso durar¨¢ aproximadamente un a?o. Y sabemos que las vacunas RTS,S disponibles son limitadas. Si tenemos otra vacuna que cuente con la aprobaci¨®n de la OMS, los pa¨ªses tendr¨¢n m¨¢s opciones y habr¨¢ m¨¢s suministros disponibles. Eso acelerar¨¢ las iniciativas para luchar contra la malaria¡±, asegura Bawa.

Ghana decidi¨® no esperar. Paul Boateng, coordinador de Gesti¨®n de Casos de Paludismo del Programa Nacional de Eliminaci¨®n del Paludismo del Servicio de Salud de Ghana, describe la vacuna R21 como ¡°segura¡± y ¡°eficaz¡±. Pero adem¨¢s, es muy necesaria: ¡°Hay problemas de suministro inadecuado de la vacuna RTS,S, ya que por ahora no todos los distritos del pa¨ªs la est¨¢n suministrando, por lo que si la de Oxford se incorpora, ayudar¨¢ a ampliar la cobertura de la vacuna contra la malaria en todo el pa¨ªs¡±.

En Nigeria, Mojisola Adeyeye, director general de la Agencia Nacional para la Administraci¨®n y el Control de Alimentos y Medicamentos de Nigeria, afirma que la aprobaci¨®n de la R21 por parte de su pa¨ªs antes que la OMS tiene por objeto adelantarse a los acontecimientos y prepararse para su despliegue.

La importancia de la quimioprevenci¨®n

La administraci¨®n de vacunas en zonas con malaria estacional, como gran parte del ?frica subsahariana entra?a grandes dificultades, considera Jane Grant, especialista en enfermedades contagiosas de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres. Por eso, la experta invita a no olvidar un tratamiento que ya ha demostrado su ¨¦xito: la qimioprevenci¨®n.

¡°Es una intervenci¨®n muy eficaz para prevenir la malaria en aquellas personas m¨¢s vulnerables a sus efectos. Consiste en administrar dosis mensuales de medicamentos contra la enfermedad a ni?os de entre tres y 59 meses durante la temporada de m¨¢xima transmisi¨®n¡±, explica el Consorcio de la Malaria. Grant ratifica esta apreciaci¨®n y a?ade que en ?frica subsahariana permite proteger a 45 millones de ni?os menores de cinco a?os. ¡°Se ha demostrado que una combinaci¨®n de la RTS,S m¨¢s la quimioprevenci¨®n de la malaria estacional proporciona entre un 60% y un 70% de protecci¨®n frente al paludismo cl¨ªnico y grave, y las muertes a causa de esta enfermedad frente a la quimioprevenci¨®n sola¡±.

Otras intervenciones han incluido mosquiteras tratadas con insecticida, ropa protectora y venenos, para proteger de las picaduras de mosquito. ¡°Tenemos muchas herramientas para prevenir la malaria, pero seguimos viendo gente que muere¡±, se?ala Van Straten.

La historia ha demostrado que en Latinoam¨¦rica y otras partes del mundo que llegaron a un buen punto, se relajaron y antes de que se dieran cuenta, se produjo un rebrote

Sin embargo, existe entre la comunidad de expertos una gran preocupaci¨®n de que, a medida que las vacunas vayan ganando terreno en ?frica, se reduzca el uso de la quimioprevenci¨®n. ¡°En nuestra investigaci¨®n sobre la RTS, S y la R21 en Mal¨ª y Burkina Faso hemos visto que la gente a menudo cree que las dos hacen lo mismo. Tambi¨¦n ten¨ªan la percepci¨®n de que las inmunizaciones son muy eficaces y han tenido un gran ¨¦xito en la prevenci¨®n de enfermedades que ya no se ven, por lo que todo el mundo est¨¢ esperando que las vacunas contra la malaria hagan lo mismo¡±, alerta Grant.

El gran peligro, coinciden los expertos, es que una vez que las vacunas est¨¦n firmemente establecidas en ?frica, y los casos y muertes empiecen a descender, el riesgo de resurgimiento de la malaria ser¨¢ alto. Bawa recuerda que ¡°la historia ha demostrado que esto es lo que ocurri¨® en Latinoam¨¦rica y otras partes del mundo que llegaron a un buen punto y entonces se relajaron, y antes de que se dieran cuenta, se produjo un rebrote¡±.

Tambi¨¦n ser¨¢ dif¨ªcil, seg¨²n Srinivasan, movilizar una cantidad significativa de nuevos fondos en el actual clima econ¨®mico para la atenci¨®n sanitaria en general, y espec¨ªficamente para la malaria. ¡°Los gobiernos de pa¨ªses end¨¦micos cruciales como Nigeria se enfrentan a graves d¨¦ficits fiscales y presiones inflacionistas. Es probable que esto lleve a una reducci¨®n o al estancamiento de los presupuestos destinados al control y la eliminaci¨®n de la malaria¡±. Bawa remacha: ¡°Necesitamos que los gobiernos, el sector privado y los donantes den un paso adelante para ayudar a eliminar la malaria de una vez por todas. Nunca debemos dejar de trabajar. Tenemos que dedicar un gran esfuerzo ahora para garantizar que todos los ¨¦xitos que hemos conseguido hasta la fecha no se vayan al garete¡±.

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