Uni¨® Mallorquina pag¨® a militantes con dinero p¨²blico para captar votos

Osvaldo Fr¨ªas declar¨® ante una juez que cobr¨® dinero p¨²blico del Consorcio de Inform¨¢tica del Consell de Mallorca. Era cantante de tangos pero en realidad se dedic¨® a fichar pol¨ªticamente a individuos y realiz¨® encuestas con fines partidistas. Otra ciudadana argentina explic¨® que se le encarg¨® la localizaci¨®n de personas afines para invitarlas a fiestas e integrarlas en asociaciones de inmigrantes para ser patrocinadas. Son dos testimonios entre decenas, los nudos de la red (sa xarxa) de captaci¨®n de militantes y votos que trab¨® Uni¨® Mallorquina (UM), una minor¨ªa que presidi¨® el Consell entre 2003 y 2007 con los votos del PP y despu¨¦s pact¨® con el PSOE.

M¨¢s de medio centenar de afiliados y simpatizantes de UM est¨¢ imputado ¨Cen tres casos judiciales distintos- junto a pol¨ªticos y empresarios que ampararon la operaci¨®n supuestamente ilegal, en las elecciones de 2007 y en la pasada legislatura. Ante el juez dicen ignorar el sentido de su trabajo y la mayor¨ªa confiesa que nunca pis¨® las sedes de las compa?¨ªas que les abonaban la paga. En su mejor momento antes de la extinci¨®n de la formaci¨®n, en 2010, UM contaba con unos 2.000 militantes.

Los tapados de UM (la prensa de Mallorca les ha llamado enchufados, cazadores de votos o empleados fantasma) ayudaron al partido a consolidar en 2007 su posici¨®n decisiva en Baleares, Mallorca y Palma. Una constructora, una compa?¨ªa de publicidad, una productora de televisi¨®n y el consorcio inform¨¢tico ¨Cm¨¢s la empresa de residuos de Palma- situaron en su n¨®mina ¨Ca petici¨®n de UM- a protegidos y militantes. El microgrupo decid¨ªa la balanza del poder, decid¨ªa sobre los presupuestos.

En los juzgados de Palma desfilan personas an¨®nimas hasta ahora en la vida pol¨ªtica que figuran como imputados por malversaci¨®n y falsedad en sumarios. La Polic¨ªa Judicial, que lleva a?os examinando los esc¨¢ndalos de UM, dej¨® escrito en su ¨²ltimo informe al juez de otro esc¨¢ndalo, el caso Ibatur, que el partido funcion¨® como una organizaci¨®n cl¨¢sica del mundo clandestino y criminal, con jerarqu¨ªa y disciplina interna, con estructuras empresariales y testaferros para ¡°desviar dinero p¨²blico¡± y ¡°obtener beneficios econ¨®micos, poder o influencia de actos relacionados con la corrupci¨®n¡±.

La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, tras destapar las supuestas tramas delictivas e imputar a los supuestos responsables pol¨ªticos y empresariales, ha contado con la colaboraci¨®n decisiva de un grupo de implicados que, a cambio de beneficios en la condena, han asumido los hechos y aportado informaci¨®n clave.

Devorada por la corrupci¨®n

UM qued¨® devorado por sus esc¨¢ndalos de corrupci¨®n. Se disolvi¨® en febrero de 2011 y abandon¨® las siglas y su sede central en Palma tras ser registrada por un juez y la polic¨ªa para desentra?ar una red de malversaci¨®n de fondos y falsos encuestadores. Aquel juez fij¨® una fianza civil de 1,6 millones para el partido para responder de la malversaci¨®n de caudales. Su hijuela, Converg¨¨ncia per les Illes, apenas cotiz¨® en las urnas del 22-M.

Uno de los ex secretarios generales de UM, Tomeu Vicens, est¨¢ preso condenado por malversaci¨®n por pagar 12.020 euros procedentes de las arcas p¨²blicas a su contable asesor fiscal. Tres ex presidentes de UM (la expresidenta del Parlamento Maria Ant¨°nia Munar, el exconsejero de Turismo Miquel Nadal y exconsejero de Econom¨ªa de Mallorca Miquel ?ngel Flaquer) est¨¢n imputados y bajo fianza. Otros ex consejeros insulares y baleares est¨¢n encausados entre una decena de ex altos cargos, en la media docena de causas pendientes de juicio por supuesta corrupci¨®n urban¨ªstica, cobros de comisiones y malversaci¨®n.

El exl¨ªder Miquel Nadal ¨Ccon dos detenciones, cinco causas abiertas y tres fianzas judiciales- debe acudir cada d¨ªa ante la polic¨ªa o el juzgado. Nadal es uno de los cerebros de las supuestas operaciones de extensi¨®n de la militancia desde las instituciones y empresas patrocinadas. Ante el juez acus¨® a su protectora Maria Ant¨°nia Munar.

La juez Carmen Abrines, que instruye el caso Voltor (buitre), tiene la partitura y conoce el reparto del esc¨¢ndalo de la red partidista. En la instrucci¨®n consta el listado de nombres -y sus n¨®minas- de militantes y simpatizantes de UM, el partido bisagra en Baleares, que se beneficiaron de la maniobra corrupta al cobrar de las instituciones o de sus empresas contratistas mientras hac¨ªan labores electoralistas.

El gerente de la compa?¨ªa p¨²blica de inform¨¢tica del Consell, tras ser detenido, pact¨® su confesi¨®n y se?al¨® qui¨¦nes eran los cargos de UM que ordenaban la maniobra partidista ilegal y dio la lista de los implicados. Tambi¨¦n desvelaron nombres, cantidades, correos electr¨®nicos, cuentas corrientes y pol¨ªticos protectores, otros empresarios imputados, los tres due?os de una productora de televisi¨®n de Mallorca que UM compr¨® para que fuera pantalla de esas contrataciones clandestinas y recibiera mediante subvenciones del Consell. En otra causa, la Picnic, se indagan el pago de encuestadores y las invitaciones a simpatizantes de UM desde las ¨¢reas de medio ambiente y basuras de Palma.