Que el pol¨ªtico no decida por m¨ª a ciegas

?La construcci¨®n de un portaaviones chino deber¨ªa interesarle a una importante industria textil espa?ola? O mejor ?C¨®mo hacerle ver a esa compa?¨ªa que realmente es de su inter¨¦s que China est¨¦ construyendo un portaaviones? En medio de la monta?a rusa de las cotizaciones burs¨¢tiles, primas de riesgo, calendarios pol¨ªticos y protestas sociales puede parecer complicado que quienes toman decisiones pol¨ªticas y econ¨®micas tengan en su agenda un hueco para reflexiones a medio y largo plazo. Pero ese tipo de visiones son las que pueden resultar decisivas para el ¨¦xito o el fracaso de estrategias pol¨ªticas, comerciales o sociales. A eso precisamente se dedican en nuestro pa¨ªs centros de investigaci¨®n y reflexi¨®n que en los ¨²ltimos 10 a?os han comenzado a tener un papel importante en la toma de final de decisiones. Son los think tank espa?oles. Un concepto y una denominaci¨®n surgida en el mundo anglosaj¨®n trasplantada a la sociedad espa?ola.

¡°Me gusta m¨¢s la expresi¨®n centros de pensamiento, opina Nicol¨¢s Sartorious, vicepresidente ejecutivo de la Fundaci¨®n Alternativas, quien subraya que ¡°en Espa?a hay gente buen¨ªsima para elaborar ideas, pero hay que dar la oportunidad para que esas ideas se expresen¡±. Y no se trata ¨²nicamente de elaborar el mensaje, sino de c¨®mo colocarlo en los despachos y en las reuniones. Que no solo sea le¨ªdo, tambi¨¦n que sus tesis se adopten en las discusiones. ¡°Un think tank efectivo es aquel que tiene buenas ideas y las hace llegar. Consigue que sean tenidas en cuenta a la hora de tomar decisiones¡±, explica Marta Tello de la Fundaci¨®n Ciudadan¨ªa y Valores y autora de la Gu¨ªa de los Thinks Tanks en Espa?a, un elenco de las principales instituciones de este tipo en nuestro pa¨ªs.

?Pero c¨®mo funciona un think tank? Aunque la idea no sea aut¨®ctona, el funcionamiento b¨¢sico de los think tank espa?oles difiere poco del de sus colegas del resto de Europa y EE UU. Un grupo de expertos elabora, mediante un proceso de debate, intercambio de ideas e investigaci¨®n, documentos que tienen en cuenta la actualidad (pol¨ªtica, econ¨®mica, social¡­) con una visi¨®n, por lo menos, a medio plazo. No se trata de documentos acad¨¦micos strictu sensu sino de papeles ¡ªy esa precisamente es su expresi¨®n en ingl¨¦s¡ª que puedan ser manejados f¨¢cilmente por quienes toman decisiones sobre algo en concreto, ya sea en la mesa del Consejo de Ministros, en un Consejo de Administraci¨®n o en una reuni¨®n en Bruselas. ¡°En Espa?a hay una necesidad de tomar decisiones informadas¡±, advierte Francesc Bad¨ªa, gerente del Centro de Estudios y Documentaci¨®n Internacionales de Barcelona (CIDOB). ¡°Espa?a es muy autorreferencial. El Gobierno y las grandes empresas tienen sus propios equipos de estudios internos. En otras sociedades hay m¨¢s costumbre de consultar fuera. Este es el reto¡±, a?ade.

¡°Hay que tomar decisiones informadas¡±, explica un experto

La apertura total de Espa?a al exterior, cuyo comienzo coincide con el final de la Guerra Fr¨ªa y la aceleraci¨®n consiguiente de la globalizaci¨®n, ha hecho que la toma de decisiones tenga cada vez m¨¢s factores y est¨¦ revestida de mayor complejidad.

Las empresas y el Gobierno se gu¨ªan por sus estudios. Son autorreferenciales

Volviendo al ejemplo del portaaviones chino y la empresa espa?ola, existen factores aparentemente inconexos que pueden pasar desapercibidos completamente pero que a medio plazo son decisivos. Una compa?¨ªa que se quiere expandir en el sudeste asi¨¢tico no deber¨ªa ser ajena a un potencial conflicto regional y al rumbo que lleva este. ¡°En Espa?a quienes toman decisiones deben ser conscientes de que tienen a los think tank a su servicio¡±, apunta Cristina Manzano, subdirectora general de la Fundaci¨®n para las Relaciones Internacionales y el Di¨¢logo Exterior (FRIDE). Otras fuentes consultadas por este diario son m¨¢s expl¨ªcitas: ¡°Llevo 10 a?os en esto y todav¨ªa tengo que explicarlo¡±, se?alan. Manzano apunta otra dificultad: ¡°Muchas veces se confunde el think tank con los lobbies (grupo de defensa de unos intereses concretos) y encima se le da a esta palabra una connotaci¨®n negativa¡±.

El peso de los think tank ya se deja sentir en muchas decisiones importantes en Espa?a. Hace apenas un mes, el Gobierno aprob¨® la Estrategia Espa?ola de Seguridad, que analiza las amenazas y riesgos a los que se enfrenta nuestro pa¨ªs con un plazo de 10 a?os, un periodo de tiempo inusual en el calendario pol¨ªtico sujeto a los per¨ªodos legislativos. La estrategia es un documento de 90 p¨¢ginas elaborado por el exsecretario general de la OTAN y exrepresentante europeo para la pol¨ªtica exterior Javier Solana, miembro del consejo del ECFR, el Consejo Europeo para las Relaciones Exteriores. Un think tank europeo fundado, entre otros, por el fil¨¢ntropo espa?ol, Diego Hidalgo. Del mismo modo, ante la decisi¨®n de cerrar la central nuclear de Garo?a diferentes papeles sobre lo que debe ser el modelo energ¨¦tico espa?ol en el futuro tambi¨¦n estuvieron sobre la mesa y en las argumentaciones.

El ciudadano no est¨¢ hecho a dar dinero a estos centros de pensamiento

¡°La capacidad o no de influencia de un think tank estriba en la solvencia de lo que defiende¡±, asegura Jaime Garc¨ªa Legaz, secretario general de la Fundaci¨®n para el An¨¢lisis y los Estudios Sociales (FAES), el think tank vinculado al Partido Popular y presidido por Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar. Garc¨ªa Legaz considera que en Espa?a este tipo de instituciones tiene todav¨ªa poca influencia en las pol¨ªticas p¨²blicas. ¡°El problema es cuando solo hay argumentos pol¨ªticos¡±, destaca.

En EE UU la gente se vincula aunque sea con cinco d¨®lares al mes

Desde la otra orilla ideol¨®gica, Carlos Mulas, director de la Fundaci¨®n Ideas, vinculada al PSOE y a cuyo patronato pertenece Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, subraya que ¡°la ciudadan¨ªa debe saber que existen problemas que hay que resolver en el medio plazo¡±. ¡°A ra¨ªz de la crisis y de la necesidad de saber a d¨®nde vamos en todos los sentidos ha sucedido que quienes toman decisiones escuchen mucho m¨¢s. De hecho, los think tank tienen m¨¢s llegada a los c¨ªrculos de decisi¨®n que a la opini¨®n p¨²blica¡±, considera.

Una opini¨®n p¨²blica, la espa?ola, que no est¨¢ acostumbrada a entregar su dinero a instituciones de este tipo. La financiaci¨®n es uno de los principales talones de Aquiles de muchos think tank espa?oles. ¡°En Estados Unidos, por ejemplo, la sociedad civil ve a los think tank como algo natural y la gente se vincula aunque sea donando cinco d¨®lares al mes¡±, explica Marta Tello de Ciudadan¨ªa y Valores. En Espa?a, la llamada ¡°cultura de la filantrop¨ªa¡± no est¨¢ muy desarrollada a nivel particular (tan solo, tal vez, con las ONG), mientras que a nivel corporativo se hace solo con aquellas actividades que podr¨ªan denominarse blancas, es decir, un banco u otro tipo de empresa que dedica fondos con relativa facilidad a actividades culturales o de ayuda social, pero ser¨¢ mucho m¨¢s reacio a la hora de donar dinero a un foro de reflexi¨®n que, adem¨¢s de ser ajeno, puede llegar a unas conclusiones que no sean de su gusto. ¡°La financiaci¨®n en general se realiza a trav¨¦s del dinero p¨²blico, las empresas tienen poca tradici¨®n de donar¡±, afirma Francesc Bad¨ªa, del CIDOB.

¡°Hay poca cultura del intercambio. Hay que forzarlo¡±, dice una analista

La otra gran carencia de los think tank espa?oles viene de la poca movilidad que existe en el mercado laboral espa?ol entre la empresa privada y la administraci¨®n p¨²blica. Es lo que en el mundo anglosaj¨®n se conoce como puertas giratorias, y que permite que una persona aplique en el entorno p¨²blico sus conocimientos adquiridos en el privado, y viceversa. Y m¨¢s todav¨ªa. Hasta hace poco era dif¨ªcil reunir a personas de diferentes ambientes profesionales simplemente para discutir y alcanzar unas conclusiones.

De la calidad de sus trabajos depender¨¢ el arraigo o no de estas instituciones

¡°En Espa?a hay poca cultura del intercambio y hay que tratar de forzarlo¡±, advierte Pilar Tena, subdirectora de Relaciones Internacionales del Real Instituto Elcano, instituci¨®n que acaba de cumplir sus primeros 10 a?os. Tena subraya que los grupos de trabajo ¡°donde se encuentre gente de todo tipo de sectores y diferentes opiniones¡±, son una herramienta fundamental a la hora de que las conclusiones que se obtengan sean ¨²tiles a la sociedad civil. ¡°Faltan foros donde discutir a medio plazo¡±, sostiene Carlos Mulas de Ideas. ¡°Los partidos pol¨ªticos est¨¢n sometidos al ciclo electoral y los medios al d¨ªa a d¨ªa¡±, a?ade.

Pero al final, el que la instituci¨®n del think tank termine de arraigar en Espa?a o, por el contrario, su papel sea absorbido por el mundo acad¨¦mico y los estudios empresariales depender¨¢ sobre todo de la calidad de sus trabajos y lo acertado de sus visiones. ¡°Hay que insistir mucho en la calidad de la producci¨®n¡±, recalca Pilar Tena de Elcano que afirma: ¡°Nuestra labor es importante porque explicamos las cosas a la sociedad. Lo central es elaborar un producto de calidad¡±. ¡°Los think tank re¨²nen en su seno a gente con experiencia y tiempo para elaborar ideas¡±, se?ala Nicol¨¢s Sartorius, ¡°gente que est¨¢ pegada a los problemas reales y trabaja por el inter¨¦s del pa¨ªs¡±.

Di¨¢logo, reflexi¨®n y mirada a medio plazo. Tres caracter¨ªsticas que tal vez no ser¨ªan las primeras de la lista a la hora de definir a la sociedad espa?ola. Con ellas los think tank espa?oles tratan de abrirse paso en el, hasta ahora, herm¨¦tico mundo de la toma de decisiones.