La defensa de Garz¨®n niega que el juez se embolsase 852.000 d¨®lares

?El abogado Enrique Molina, defensor del juez Baltasar Garz¨®n en el caso de los cursos de Nueva York, ha negado tajantemente que su cliente se embolsase 852.000 d¨®lares, como ¡°parece inferirse¡± de un escrito dirigido por el juez instructor del Supremo, Manuel Marchena, a autoridades judiciales? norteamericanas.Seg¨²n la defensa, Marchena omite en su escrito el ¡°hecho cierto¡± de que todos los ingresos para financiar los cursos dirigidos por Garz¨®n se realizaron en cuentas de la Universidad de Nueva York (UNY).

La defensa de Garz¨®n se queja de que de la redacci¨®n del texto del juez Marchena ¡°parece inferirse que dichas sumas fueron a parar a la tesorer¨ªa de Garz¨®n, lo cual no es cierto¡±. Molina contest¨® as¨ª el pasado 28 de julio a un escrito de Marchena ampliando una comisi¨®n rogatoria dirigida a las autoridades norteamericanas.

El escrito asegura que ¡°tampoco se ajusta a la verdad¡± la afirmaci¨®n de que Garz¨®n ¡°se prevali¨® de su cargo de juez para dirigir comunicaciones personales a directivos de empresas en demanda de dinero. El abogado precisa que Garz¨®n no dirigi¨® ning¨²n documento ni mantuvo ninguna conversaci¨®n con responsables de empresas como Telef¨®nica, BBVA o Endesa, que patrocinaron los cursos dirigidos por el juez en Nueva York,

Respecto a los comunicados dirigidos al presidente del Banco de Santander y a Cepsa, GArz¨®n los firm¨® como "titular de c¨¢tedra" en el Centro Rey Juan Carlos I de la UNY, o como ¡°Senior Fellow Center on Law and Security¡±. En ninguno de esos comunicados Garz¨®n pide dinero, ni invoca su condici¨®n de juez y ¡°ni un c¨¦ntimo se destina a Garz¨®n¡± fuera del abono de su salario. Es m¨¢s, ¡°el BBVA exigi¨® constancia expresa de que ninguna de las cantidades de su patrocinio se destinar¨ªa al abono del salario de Garz¨®n¡±, explica su abogado.

Tras se?alar que la atribuci¨®n a Garz¨®n de prevalimiento de su cargo ¡°no tiene ning¨²n soporte en el proceso¡±, Molina critica que el juez Marchena --que lleva dos a?os intentado sentar a Garz¨®n en el banquillo--, haya ampliado la investigaci¨®n en en busca de supuestos delitos de prevaricaci¨®n y cohecho, despu¨¦s de que la Sala Penal archivase o no admitiese a tr¨¢mite la investigaci¨®n de esos delitos.

El defensor de Garz¨®n insiste por ¨²ltimo en que el instructor acepte la prueba testifical de las autoridades acad¨¦micas de la Universidad de Nueva York, propuesta por Garz¨®n el pasado noviembre, para despejar las ¡°supuestas contradicciones¡± apreciadas por Marchena en las certificaciones aportadas por la UNY.