No cabe en un tuit
Aquella ma?ana me levant¨¦ y ech¨¦ un vistazo a Twitter, a Facebook y a Bloomberg. De un solo vistazo hab¨ªa recibido decenas de impactos indiferenciados que conten¨ªan noticias, opiniones, simples chascarrillos o la situaci¨®n del bono alem¨¢n y su diferencial con el espa?ol o el italiano.
Luego vinieron el caf¨¦ y los peri¨®dicos y entonces me di cuenta de que estaba haciendo algo m¨¢s que una lectura transversal de los mismos.
Sinceramente creo que la sociedad del conocimiento es el futuro y que la democratizaci¨®n de la informaci¨®n es buena, como tambi¨¦n lo es que no haya cientos de emisores y millones de receptores pasivos, sino que opine y participe la mayor cantidad de personas posibles.
Cuatro ojos ven m¨¢s que dos y ocho m¨¢s que cuatro, perd¨®n, pero los castellanos somos refraneros.
Defiendo las nuevas tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y defiendo el papel de los medios de comunicaci¨®n convencionales, cada uno juega su papel.
Sin embargo tengo una sensaci¨®n extra?a y creciente.
Por razones obvias estoy siguiendo al detalle la campa?a de Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Una campa?a que no es f¨¢cil si atendemos al contexto demosc¨®pico y al clima adverso generado sobre la pol¨ªtica.
Puede que mi sensaci¨®n vaya contra corriente, no lo s¨¦, pero la siento de manera s¨®lida.
Hace pocos d¨ªas escuch¨¦ a una persona al salir de uno de los Di¨¢logos que est¨¢ manteniendo el candidato con ciudadanos an¨®nimos, voluntarios, que est¨¢n acudiendo a charlar con Rubalcaba. Seg¨²n ¨¦l, si los m¨¢s de cuarenta millones de espa?oles escucharan y participaran de estas charlas Rubalcaba obtendr¨ªa mayor¨ªa absoluta seguro.
Me hizo recordar otra an¨¦cdota, la que me cont¨® alguien que particip¨® hace muchos meses en un encuentro cerrado con Rajoy. Seg¨²n ¨¦l le hab¨ªan pedido que enviara su pregunta con antelaci¨®n y lo vio como algo normal porque entend¨ªa que todos los partidos lo hac¨ªan as¨ª.
Mi sensaci¨®n no es melanc¨®lica, todo lo contrario, es muy positiva. No soy capaz de adivinar el resultado electoral, pero s¨¦ que Alfredo est¨¢ recuperando la mejor esencia de la pol¨ªtica justo en el momento m¨¢s adverso, o quiz¨¢s en el momento propicio, porque la gente se ha cansado ya de slogans, argumentarios y frases ocurrentes.
Creo que somos muchos los que nos reconocemos en la forma de hacer pol¨ªtica que ha elegido el candidato: pocas alusiones y ninguna descalificaci¨®n al rival, propuestas serias y con una financiaci¨®n posible detr¨¢s y sobre todo honestidad intelectual. Honestidad en el fondo, recuperando lo bueno de la pol¨ªtica cl¨¢sica: la deliberaci¨®n, la elecci¨®n de las preguntas correctas antes de las respuestas, la argumentaci¨®n seria y documentada, de fondo, pero sin la renuncia al perfil ideol¨®gico presente siempre al lado de cada dato objetivo¡
Vivimos en una sociedad veloz, que consume en tiempo real y donde una semana contiene m¨¢s que un a?o en sociedades anteriores. No me cabe duda de que la globalizaci¨®n encierra m¨¢s oportunidades que amenazas y que nuestra obligaci¨®n es aprovechar esas oportunidades y minimizar las amenazas.
Los mercados seguir¨¢n actualizando sus valores en tiempo real, Twitter y Facebook seguir¨¢n ardiendo al minuto, las radios y las televisiones seguir¨¢n emitiendo sus totales de 20 y de 30 segundos y los peri¨®dicos se extender¨¢n algo m¨¢s, seguro que cada vez m¨¢s¡
Pero agradezco lo que est¨¢ haciendo el candidato, su tono y su fondo, el ir por la verdad por delante aunque se arriesgue un titular retorcido, el hablar de los temas s¨®lo cuando se conocen a fondo y escuchando a otros que tambi¨¦n saben, el negarse a caer en el ilusionismo program¨¢tico, el trabajar quince horas diarias y no robarle ni un solo minuto a cada foro, a cada encuentro o a cada reflexi¨®n de todos aquellos que aportan¡.
Tengo la sensaci¨®n de que somos muchos, m¨¢s de lo que algunos creen.
Aquel d¨ªa volv¨ª a acostarme echando un vistazo a Twittery a Facebook, volv¨ª a entrar en la aplicaci¨®n deBloomberg para ver c¨®mo hab¨ªan cerrado los mercados de deuda y escuch¨¦ una tertulia radiof¨®nica nocturna, pero hab¨ªa visto y escuchado a varios ciudadanos opinando y preguntando, participando, y a un pol¨ªtico hacer pol¨ªtica de la grande, de verdad, sin artificios ni artima?as, con honestidad¡.
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