AznarNews

Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar: cuarto consejero m¨¢s votado, en la junta de accionistas del negocio de Rupert Murdoch. Ustedes se asombrar¨¢n. Yo, no.

En primer lugar, por las caracter¨ªsticas de News Corporation, que es lo que en el argot actual se conoce como ¡°un conglomerado medi¨¢tico¡±, para no decir un superpoder que act¨²a por encima de la ley cuando le conviene. En mi juventud, conglomerado era esa materia hecha con desperdicios de madera que, presionados, se convert¨ªan en tablas para estanter¨ªas baratas. No s¨¦ si en Ikea se sigue utilizando. En el mundo de la comunicaci¨®n, s¨ª.

Entre los materiales que News Corporation comprime para sacar el m¨¢ximo beneficio con destino a sus accionistas se encuentran todo tipo de virutas: el espionaje telef¨®nico, la coacci¨®n a v¨ªctimas del terrorismo, la explotaci¨®n del esc¨¢ndalo, la connivencia con pol¨ªticos a alto nivel, mediante chantaje o soborno, y la mentira. Sobre todo, la mentira. Sin complejos. Ah¨ª es donde el consejero espa?ol da la talla. La da tambi¨¦n en otro requisito imprescindible para el grupo, al que pertenece la ¨ªnclita cadena Fox News: su afinidad con el sionismo y con el Tea Party.

En la misma junta en donde se premi¨® a Aznar por sus m¨¦ritos ¡ªy por lo que puede conseguirles cuando la derecha y su FAES se hagan del todo con este pa¨ªs¡ª, se castig¨® levemente a los responsables del espionaje telef¨®nico. Pero no se hagan ilusiones. No fue porque los inversores descubrieran, horrorizados, que hab¨ªan cometido delitos en su nombre. Fue por dejarse pillar.

Todos sab¨ªan. Todos saben. Ser accionista ¡ªde un conglomerado, de una empresa, de un banco¡ª es tambi¨¦n, hoy m¨¢s que nunca, una cuesti¨®n moral.

El mundo que trabaja lo hace actualmente para ellos. En medio, los capataces fieles. Esa y no otra es la nueva carrera de Aznar.