Navarra mira con alegr¨ªa y cautela c¨®mo abordar ahora el reto de la convivencia
La mayor¨ªa de los sectores consultados en la Comunidad Foral entiende que a¨²n queda mucho por recorrer para superar las heridas del terrorismo
Junio de 1960, estaci¨®n de Amara de San Sebasti¨¢n: la ni?a de 22 meses Bego?a Urroz, la primog¨¦nita de un matrimonio navarro reci¨¦n instalado en Guip¨²zcoa, se convierte en la primera v¨ªctima de ETA. 30 de junio de 2009, Calv¨ªa (Baleares): el agente de la Guardia Civil Diego Salv¨¢ Lez¨¢un, un joven de 27 a?os nacido en Pamplona, muere en el ¨²ltimo atentado mortal cometido por la banda en Espa?a. Entre estos dos asesinatos, los dos con v¨ªctimas relacionadas con la comunidad foral, han pasado cinco d¨¦cadas en las que la sociedad navarra ha vivido en primera persona la barbarie del terrorismo. Ahora, afronta un nuevo tiempo sin violencia y se enfrenta al reto de una convivencia efectiva, en la calle y en las instituciones.
Navarra, eje de una de las principales reivindicaciones de la banda para su anexi¨®n al Pa¨ªs Vasco, ha sido escenario de hasta 40 asesinatos de los 823 cometidos por ETA. El chantaje a los empresarios, la kale borroka en la calle y las amenazas han formado parte del d¨ªa a d¨ªa de muchos navarros, que tras el comunicado de cese de la violencia ven el futuro con esperanza y tambi¨¦n con cautela. As¨ª lo se?ala Jes¨²s Mar¨ªa Os¨¦s, profesor de Historia del Pensamiento Pol¨ªtico y de los Movimientos Sociales de la Universidad P¨²blica de Navarra, que explica adem¨¢s que la "alegr¨ªa" con la que la sociedad navarra ha recibido la noticia no ha sido "manifiestamente mayor" porque muchos daban por hecho que tarde o temprano esto se iba a producir.
Esos ciudadanos han visto c¨®mo durante d¨¦cadas el apoyo al terrorismo ha "herido tr¨¢gicamente" el tejido social de la comunidad, seg¨²n Os¨¦s, que mantiene que estas cuestiones ideol¨®gicas han causado un "tremendo da?o entre amigos, familias ahora divididas, y creado una cortina de silencio sobre muchos temas". Recuperar todo esto, a?ade, "va a costar mucho tiempo y esfuerzo". De entrada, habr¨¢ que empezar "a verbalizar y hablar sobre todo ello ya sin miedo".
La organizaci¨®n terrorista ha asesinado a 40 de sus 823 v¨ªctimas en la regi¨®n
Del otro lado, los miembros de ETA, muchos de ellos navarros, los que les apoyan, los presos y sus familias. Tambi¨¦n la izquierda abertzale, de nuevo en las instituciones desde el pasado 22 de mayo. En aquella cita electoral se puso de manifiesto la pluralidad de esta comunidad y la importancia del apoyo a Bildu, que sum¨® siete parlamentarios, 17 alcald¨ªas y 184 concejales, la mayor¨ªa en la zona norte.
Sobre este punto, el presidente de los empresarios navarros, Jos¨¦ Antonio Sarr¨ªa, asegura que en muchas localidades navarras sigue existiendo un terrorismo "de baja intensidad", que se traduce en amenazas, ruedas pinchadas, insultos o pintadas. "Esta comunidad ha vivido mucho a?os de sufrimiento", incluidos los empresarios y sus familias, muchas extorsionadas y obligadas a abandonar Navarra bajo la presi¨®n del miedo. Otros empresarios de fuera no han instalado sus negocios en Navarra, con el perjuicio econ¨®mico que esto supone, "por el temor a entrar en una zona cercada por el terrorismo", explica Sarr¨ªa.
A su juicio, a¨²n debe pasar "un tiempo" para lograr recomponer esta situaci¨®n, que "no ser¨¢ f¨¢cil", y que depender¨¢, en buena medida, del papel a jugar por los alcaldes de Bildu en las localidades donde gobierna. "No solo se trata de ser extorsionado o amenazado, tambi¨¦n de desarrollar la labor normalmente con la colaboraci¨®n efectiva de las corporaciones locales", por ejemplo, a la hora de poner en marcha proyectos entorno al TAV, prosigue el l¨ªder de los empresarios de la comunidad.
En este mismo sentido, Os¨¦s sostiene que, durante a?os, en muchos pueblos del norte de Navarra la tensi¨®n en la calle "se pod¨ªa cortar con un cuchillo". Ahora, una de sus principales preocupaciones es c¨®mo se va a transmitir a las pr¨®ximas generaciones lo que ha pasado, "porque en la escritura de la historia nos vamos a jugar parte de la reconciliaci¨®n".
Debate institucional, el perd¨®n y las v¨ªctimas
Recomponer o no el di¨¢logo con Bildu se ha convertido tambi¨¦n en uno de los puntos centrales del debate pol¨ªtico en la comunidad. As¨ª, la necesidad de plantear, como han propuesto NaBai y Bildu, una iniciativa similar a la puesta en marcha por el lehendakari, Patxi L¨®pez, en el Pa¨ªs Vasco para abrir una mesa de di¨¢logo con todas las fuerzas pol¨ªticas, ha dividido a los partidos navarros. UPN y PP se muestran en contra y apuestan exclusivamente por el Parlamento a la hora de debatir iniciativas.
En este punto cobra especial inter¨¦s el posicionamiento del PSN, que da por rota la l¨ªnea roja que hasta ahora manten¨ªa con Bildu en las instituciones navarras. El cese de la actividad armada era lo que los socialistas hab¨ªan pedido para dialogar con aquellos que pod¨ªan tener "alguna vinculaci¨®n" con el entorno terrorista. "Pero di¨¢logo no es negociaci¨®n o acuerdo necesariamente", explica su secretario general, Roberto Jim¨¦nez, al tiempo que reivindica el papel de Navarra en el nuevo proceso.
Xabi Lasa, alcalde de Berriozar, una localidad navarra gobernada por NaBai con el apoyo de Bildu, explica que el comunicado va a cambiar en primer lugar, y sobre todo, la convivencia entre los pol¨ªticos. "La violencia ya no va a condicionar el debate entre unos y otros y esto va a dar mucha libertad para poder expresar opiniones". Tambi¨¦n en las calles de este municipio de unos 9.000 habitantes, donde seg¨²n Lasa, la convivencia entre unos y otros "es buena", salvo en "ocasiones puntuales".
M¨¢s esc¨¦ptica se muestra Maribel Vals, vecina de Berriozar y portavoz del colectivo Vecinos de Paz, que sostiene que nada ha cambiado. "Aqu¨ª siguen las miradas en la calle con las que parece que te est¨¢n perdonando la vida. No nos van a matar pero tampoco nos van a dejar vivir y hay poca esperanza en que esto cambie a corto plazo, porque ellos no aceptan al que piensa diferente y han sembrado durante d¨¦cadas odio entre los vecinos".
Cuando se acab¨® la guerra vino la victoria, pero no la paz", reflexiona el profesor Os¨¦s
En este mismo sentido se pronuncian muchas de las v¨ªctimas navarras, entre ellas, por ejemplo, Salvador Ulayar, que con 13 a?os presenci¨® c¨®mo un etarra mataba a su padre en Etxarri Aranaz. ?l se refiere al perd¨®n y asegura que esta es una cuesti¨®n "muy personal" que nadie puede exigir a nadie.
Una idea que comparte tambi¨¦n el profesor Os¨¦s: "El perd¨®n es un problema sobre todo personal, porque las heridas no son colectivas, y esto requiere tiempo y movimientos por parte de algunos". Y concluye con una cita de Fernando Fern¨¢n G¨®mez de la obra Las bicicletas son para el Verano: "Cuando se acab¨® la guerra vino la victoria, pero no la paz". "Ellos se han comprometido a no volver a vomitar plomo y esto es una buen¨ªsima noticia, pero no significa ni que hayamos alcanzado la paz ni que las heridas est¨¦n suturadas porque, efectivamente, queda ahora un largo camino por recorrer y que habr¨¢ que transitar ya sin violencia".
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