Rubalcaba apretar¨¢ a Rajoy para que concrete de d¨®nde obtendr¨¢ ingresos

Los socialistas, adem¨¢s de reconocer que, en efecto, Mariano Rajoy, hace bien en resaltar que es un pol¨ªtico ¡°previsible¡±, y por tanto no ha habido grandes sorpresas en su discurso, s¨ª recalcan sus enormes dudas en materia econ¨®mica. Ante los anuncios, previstos en el programa electoral del PP, de incentivos fiscales, ( bajada de impuestos a los aut¨®nomos, a las sociedades, desgravaciones por vivienda, etc, ), se preguntan de d¨®nde vendr¨¢n los ingresos para sufragarlos. O, el ahorro vendr¨¢ por partidas delicadas. ¡°Las cuentas no cuadran¡±, ha sentenciado el portavoz del Grupo Socialista, Jos¨¦ Antonio Alonso, despu¨¦s de calificar el discurso de ¡°ambiguo¡± en materias que requieren ser precisas y claras.

Por ejemplo, preocupa sobremanera el anuncio de una cartera de servicios b¨¢sicos, por ejemplo en Sanidad, por si entra?a la exclusi¨®n de prestaciones que ahora s¨ª ofrece la sanidad p¨²blica. Desde esta perspectiva, el presidente del Grupo Socialista, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, tratar¨¢ de llevarle al terreno de la concreci¨®n y si no lo consigue, lo pondr¨¢ de manifiesto. Rubalcaba tiene preparada la parte del discurso que se refiere a la actuaci¨®n del Grupo Socialista en su tarea de oposici¨®n pero dej¨® abierta su r¨¦plica al discurso de Rajoy para responder a lo que ¨¦l ha dicho y alejarse de discursos escritos de antemano sin referencia a las palabras del orador.

No obstante, para algunos diputados socialistas, el discurso de Rajoy no se puede echar por tierra porque se ha movido en el terreno habitual de los debates de investidura. Y, adem¨¢s, no ha dado lugar al alboroto porque ha sido muy correcto con el Gobierno saliente. Se ver¨¢ si se mantiene el tono en las r¨¦plicas y d¨²plicas, una vez que la oposici¨®n le apriete.