El PP exige a CiU un acuerdo de gobierno en Barcelona

El Partido Popular de Catalu?a entiende que ha llegado el momento de poner precio a sus constantes apoyos a Converg¨¨ncia i Uni¨® tanto en la Generalitat como en el Ayuntamiento de Barcelona. Los reiterados pactos entre nacionalistas y populares no se han visto reflejados hasta ahora en cuotas de poder para los segundos m¨¢s all¨¢ de la intervenci¨®n de CiU para que el PP gobierne en Badalona, tercera ciudad de Catalu?a, u ostente la vicepresidencia de la Diputaci¨®n de Barcelona. Ahora, el PP quiere tener poder en instituciones de primera fila. La presidenta del PP catal¨¢n, Alicia S¨¢nchez- Camacho, pidi¨® ayer a Converg¨¨ncia i Uni¨® un pacto de gobierno en el Ayuntamiento de Barcelona, donde CiU gobierna en minor¨ªa y con gran precariedad. Eso llega despu¨¦s de que el PP haya exigido a CiU que le se?ale sin ambages como socio prioritario en la Generalitat, algo que ayer rechaz¨® el presidente catal¨¢n, Artur Mas.

S¨¢nchez-Camacho pidi¨® ayer en una entrevista a la agencia Efe que el PP entre en el gobierno municipal de Barcelona. ¡°Ser¨ªa bueno y necesario que pudiese haber un acuerdo de gobierno, un modelo de ciudad en Barcelona, con un pacto de gobierno PP-CiU¡±, dijo en l¨ªnea con lo apuntado ya las ¨²ltimas semanas por el jefe de filas del PP en la capital catalana, Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz. Es m¨¢s, el l¨ªder del PP en el Consistorio ha repetido en varias ocasiones que tras su apoyo a los presupuestos de 2012, ahora toca hablar del gobierno. En caso contrario, avanza que ser¨¢ ¡°oposici¨®n dura¡±.

El pacto en Barcelona depende, sobre todo, de lo que valore el alcalde, Xavier Trias. ?l insiste en que est¨¢ c¨®modo como est¨¢. En su grupo, predomina el alma soberanista a la que no le convencen nada algunos de los planteamientos del PP, que hasta la fecha se ha abstenido de poner en apuros a Trias con cuestiones ling¨¹¨ªsticas. El sector de Uni¨® no tendr¨ªa ning¨²n problema en hacer un hueco en el gobierno a los ediles del PP.

Al otro lado de la plaza de Sant Jaume, CiU se est¨¢ resistiendo como puede a la presi¨®n del PP. Aunque ha tenido que echar mano de los votos de S¨¢nchez-Camacho para salvar todas las votaciones importantes del Parlamento catal¨¢n durante el ¨²ltimo a?o, los sectores m¨¢s soberanistas del partido rechazan cualquier pacto visible y siguen apostando por una agenda nacionalista que incluye el concierto econ¨®mico en primera l¨ªnea. Artur Mas les est¨¢ escuchando y mantiene que se siente ¡°confortable¡± con la actual situaci¨®n. Aunque los hechos indican que el PP es ya socio preferente de CiU, los nacionalistas se niegan a reconocerlos esta categor¨ªa. Mas insiste en que lo que quiere es pactar con diferentes partidos, ¡°no siempre el mismo¡±.

El PP amenaza con dejar a CiU en la estacada si no cumple sus demandas. Por ejemplo, en enero obligar¨¢ a los nacionalistas a pronunciarse en el Parlamento sobre el cierre de algunas delegaciones de la Generalitat en el extranjero, un compromiso que los nacionalistas asumieron el a?o pasado y por ahora no han cumplido. El PP advierte que no se sentar¨¢ a negociar las cuentas de 2012 si Mas no cumple antes lo pactado el a?o pasado. ¡°Ser¨ªa imposible sentarse a negociar unas cuentas con un Gobierno aut¨®nomo que no generase la confianza suficiente¡±, argumentan los populares.