Garz¨®n: ¡°Hice lo que deb¨ªa hacer con las reglas de la buena fe¡±
Garz¨®n asegura que respet¨® la legalidad nacional e internacional y se ratifica en su actuaci¨®n
¡°Hice lo que cre¨ª que deb¨ªa hacer, no es cuesti¨®n de ideolog¨ªa. Los jueces no estamos para ideolog¨ªas. Aqu¨ª hab¨ªa cientos de miles de v¨ªctimas que no hab¨ªan sido atendidas en sus derechos¡±. El juez Baltasar Garz¨®n ha descartado as¨ª que hubiesen influido sus ideas pol¨ªticas en la investigaci¨®n de los cr¨ªmenes del franquismo, en el interrogatorio de su defensor, el abogado Gonzalo Mart¨ªnez-Fresneda. El juez no ha contestado a la acusaci¨®n del pseudosindicato ultraderechista Manos Limpias por no considerarle legitimado para acusar.
¡°El fiscal tambi¨¦n discrep¨® de m¨ª en los casos de Argentina y Chile durante dos a?os, con recursos dur¨ªsimos, y luego cambi¨® de posici¨®n y mantuvo que eran cr¨ªmenes contra la Humanidad¡±, ha a?adido Garz¨®n, al justificar haber mantenido la investigaci¨®n durante dos a?os.
Garz¨®n ha afirmado tajantemente que no autoriz¨® ninguna exhumaci¨®n en el tiempo que estuvo investigando los cr¨ªmenes del franquismo. ¡°Desde diciembre de 2006 a 2008 no autoric¨¦ ni una sola exhumaci¨®n. Expresamente se dijo que no se autorizaba ninguna exhumaci¨®n hasta que no quedase determinada la competencia¡±.
El juez imputado, que ha declarado con voz segura y firme, ya sobrepasada la afon¨ªa que le aquej¨® durante el juicio de las escuchas del caso G¨¹rtel, ha manifestado tambi¨¦n que en la Audiencia Nacional, concretamente en el juzgado central 2, se segu¨ªa un proceso contra nazis que a¨²n hoy se sigue tramitando a petici¨®n del fiscal y que afectan a hechos de 1942 a 1944 referidos a campos de concentraci¨®n.
Para nada fue una interpretaci¨®n que se apartara de una l¨ªnea aceptable y defendible
Garz¨®n justific¨® su actuaci¨®n para investigar el franquismo en la doctrina de la propia Sala Penal del Supremo en el caso de Adolfo Scilingo, el argentino que particip¨® en los vuelos de la muerte al que el juez proces¨® y fue condenado en Espa?a.
A preguntas de su defensor, Garz¨®n relat¨® que en diciembre de 2006 lleg¨® a su juzgado la primera denuncia y posteriormente se presentaron m¨¢s. ¡°Relataban hechos acontecidos durante y despu¨¦s de la Guerra Civil, de ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas, torturas¡ hechos con apariencia delictiva de cr¨ªmenes contra la Humanidad. Posteriormente hubo otras y en septiembre de 2008, tambi¨¦n por casos de menores desaparecidos hasta el d¨ªa de hoy¡±.
El proceso de ratificaci¨®n de esas denuncias se prolong¨® dos a?os. Durante ese tiempo, Garz¨®n dict¨® ¡°una serie de prove¨ªdos¡± para resolver la competencia. ¡°En todas y cada una de esas providencias no hubo ning¨²n recurso del fiscal¡±, sigui¨® el juez imputado, hasta que la Fiscal¨ªa de la Audiencia Nacional interpuso el 21 de octubre de 2008 un recurso de apelaci¨®n directo contra el auto de Garz¨®n declar¨¢ndose competente para investigar las denuncias.
Durante la investigaci¨®n, ha dicho Garz¨®n, ¡°llegu¨¦ a la conclusi¨®n de que no hab¨ªa datos de desaparecidos a nivel nacional, absolutamente ninguno¡±. Por eso se dirigi¨® a los denunciantes, a los que pidi¨® que elaboraran un listado completo. A principios de octubre de 2008 le dieron el n¨²mero de 114.000 casos de desaparecidos sin vinculaci¨®n con la Guerra Civil. El 16 de octubre de 2008, se declar¨® competente: ¡°La resoluci¨®n viene a establecer uno de los hechos a que se contraer la investigaci¨®n: un plan sistem¨¢tico de detenciones, desapariciones, ejecuciones extrajudiciales, torturas, etc¨¦tera. por parte de algunos procedentes de Falange. Consider¨¦ que los hechos pod¨ªan ser delictivos y que integraban el delito de desaparici¨®n forzada, que persiste en el tiempo¡±, ha explicado el acusado .
En aquel auto pidi¨® que se aportaran los certificados de defunci¨®n del general Franco y de otras 44 figuras del r¨¦gimen ¡°para poder declarar la extinci¨®n de la responsabilidad penal y las posibles reclamaciones civiles por hechos delictivos con responsabilidad civil extinguida por fallecimiento¡±, ha seguido diciendo Garz¨®n.
El juez ha negado que hubiera querido saltarse la Ley de Amnist¨ªa. ¡°No es cierto, eso no se sostiene¡±, ha asegurado, ante la principal imputaci¨®n que le hizo el juez instructor Luciano Varela. Garz¨®n ha explicado que los efectos del delito detenci¨®n ilegal, sin dar raz¨®n del paradero del detenido, tiene efectos que permanecen en el tiempo: ¡°La ley de amnist¨ªa se refiere a hechos o delitos de contenido jur¨ªdico. En ning¨²n caso, a cr¨ªmenes contra la Humanidad, que son los que se denuncian, y que no pueden tener car¨¢cter pol¨ªtico de ning¨²n tipo¡±. Garz¨®n tambi¨¦n ha negado que al tratarse de delitos permanentes opere la prescripci¨®n, porque son delitos ¡°que se siguen cometiendo¡±.
Antes de resolverse por la Sala Penal el recurso del fiscal, Garz¨®n se inhibi¨®. La Sala de lo Penal declar¨® despu¨¦s que no era competente para investigar, pero tres magistrados se mostraron de acuerdo con la investigaci¨®n y las tesis de Garz¨®n.
Tambi¨¦n ha rechazado que hubiese pretendido ¡°ningunear¡± la Ley de Memoria Hist¨®rica. ¡°Para nada. No s¨¦ qui¨¦n ha dicho eso- La ley de Memoria Hist¨®rica tiene un interpretaci¨®n perfectamente compatible con lo que se investigaban en el juzgado¡±.
Tampoco acept¨® que entre sus motivaciones estuviese obtener ¡°notoriedad¡± o ¡°publicidad¡±. ¡°Creo que he hecho lo mismo que en otros casos en que hab¨ªa dificultades jur¨ªdicas. Son cuestiones muy complejas. He procurado interpretar en cada caso con las reglas de la buena fe¡±, ha dicho.
A preguntas del fiscal Luis Navajas, el juez acusado ha dicho que no era cierto que hubiese mantenido paralizado el procedimiento durante dos a?os, --como le atribuye el instructor Luciano Varela--, porque las denuncias se fueron presentando a lo largo de ese tiempo y ¨¦l pidi¨® a todos los denunciantes que se ratificasen. Se fueron ratificando todos y cuando solo faltaban dos, le dio traslado de todo al fiscal.
Preguntado por Navajas si era consciente de que no era competente para investigar las s denuncias, Garz¨®n ha asegurado. ¡°Si hubiera sido consciente, no lo habr¨ªa dictado¡±, ha dicho en referencia al auto de competencia.
Garz¨®n ha concluido el interrogatorio asegurando que no incurri¨® en un delito de prevariaci¨®n, es decir, que no adopt¨® una resoluci¨®n injusta a sabiendas: ¡°Siempre he respetado las normas. Interpret¨¦ las normas legales en vigor, nacionales e internacionales y lo consider¨¦ ajustado a la legislaci¨®n nacional e internacional sobre derechos humanos. Para nada fue una interpretaci¨®n que se apartara de una l¨ªnea aceptable y defendible. Es lo que hice, acertadamente o no, y hoy me ratifico¡±.
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