El Ejecutivo prepara una nueva estrategia para recuperar el pulso

Todos los ministros sab¨ªan que no era ni mucho menos un d¨ªa cualquiera. Pero hicieron esfuerzos para que lo pareciera. No solo estaban todos en los pasillos del Congreso con una normalidad absoluta. Mostrando confianza. Adem¨¢s, en un gesto nada habitual, la vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, y la ministra de Empleo, F¨¢tima B¨¢?ez, salieron a pie a las 15.30 del Congreso, sin coches oficiales, y pasearon un buen rato por el centro de Madrid, muy cerca del coraz¨®n de la protesta, la Puerta del Sol.

Caminaron como si nada, cruz¨¢ndose con la gente, con algunos huelguistas que les lanzaron gritos aislados, y se fueron con toda tranquilidad a comer a un restaurante con un men¨² de 14 euros cerca del Congreso, con Jos¨¦ Luis Ayll¨®n, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, y Alfonso Alonso, portavoz parlamentario. Se sentaron en una mesa normal, mientras los dem¨¢s comensales se sorprend¨ªan. Como si nada.

El Ejecutivo, o al menos la mayor parte de ¨¦l, es consciente de que est¨¢ viviendo un momento muy delicado, el peor desde que tom¨® posesi¨®n. Y no solo por la huelga, sobre todo por el resultado de las elecciones andaluzas, que les preocupa mucho m¨¢s, porque es una parte de su electorado la que le ha dado la espalda. ¡°La huelga no ha ido bien, pero los sindicatos han salido mejor de esta que nosotros de las andaluzas¡±, resum¨ªa un dirigente.

En el Gabinete se ha instalado una importante preocupaci¨®n por su desgaste. Y, como siempre en estos casos, se piensa en los problemas de comunicaci¨®n. El Ejecutivo y el PP parecen asumir que no est¨¢n logrando explicar del todo bien sus planes. Todos los consultados son conscientes de que es muy dif¨ªcil que no haya desgaste cuando se toman medidas impopulares, pero casi todos est¨¢n tambi¨¦n convencidos de que se puede explicar mejor.

De hecho, al Gobierno le ha sorprendido el coste pol¨ªtico que est¨¢ teniendo la reforma laboral, y no tanto por la huelga sino por las encuestas y por la idea que ha quedado de que la reforma se concentra en abaratar el despido.

As¨ª que est¨¢ preparando con detalle la estrategia para que los Presupuestos m¨¢s duros de la historia de la democracia, que se presentan este viernes, entren de otra manera. El Gobierno ha dise?ado un plan para que este viernes se haga un discurso en el que se d¨¦ cuenta del momento muy delicado que vive la econom¨ªa espa?ola y sobre todo de las presiones de Bruselas, que se han intensificado en los ¨²ltimos d¨ªas, precisamente cuando se ultimaban las cuentas.

El discurso tras el Consejo de Ministros de Santamar¨ªa y Crist¨®bal Montoro, el ministro de Hacienda, ir¨¢ en esa l¨ªnea, se?alan diversas fuentes. Quieren trasladar la idea de la gravedad del momento y dar m¨¢s detalles para que los ciudadanos sean conscientes de que el Gobierno cree que no hay otra opci¨®n.

Pero no se quedar¨¢n ah¨ª. El detalle de los recortes se conocer¨¢ el martes, cuando lleguen los Presupuestos al Congreso. Hasta entonces solo se anunciar¨¢n las l¨ªneas generales. Mientras llega ese momento, el PP se prepara con reuniones internas con responsables auton¨®micos para coordinar mejor el mensaje. Este s¨¢bado habr¨¢ una dirigida por Dolores de Cospedal. El mi¨¦rcoles, Montoro realizar¨¢ otra con diputados para explicarles los detalles de los Presupuestos. La idea es utilizar al PP, un partido enorme y hegem¨®nico, como altavoz del Ejecutivo. Y recuperar el pulso.